Una ola de solidaridad de la comunidad internacional vuelve a estar al lado de Cuba, justo a unos días de que en las Naciones Unidas se vuelva a presentar una resolución sobre la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra la Mayor de las Antillas.
 
Desde las propias ciudades del imperio se levantaron las voces este fin de semana, para exigir el cese de la criminal política, calificada como genocidio. Nueva York, Los Ángeles, Chicago y otras ciudades estadounidenses se movilizaron a favor de la causa cubana.
 
Desde de la patria de Simón Bolívar llegó el abrazo solidario, expresado en un reciente debate en torno a la próxima jornada de votación sobre este tema en la onu, en el cual se subrayó que los sucesivos Gobiernos de ee. uu. han desconocido la clara posición de la comunidad internacional y lo decidido en la Asamblea General de ese órgano multilateral.
 
El bloqueo, que es una flagrante violación de los derechos humanos por parte del Gobierno que se anuncia como paladín de estos, es sostenido con leyes como la Helms-Burton y la Torricelli, que refuerzan las sanciones y buscan aislar a Cuba internacionalmente.
 
«Las consecuencias devastadoras de esa política estadounidense se agravan por la inclusión de Cuba en la lista de países que patrocinan el terrorismo, las sanciones a navieras, expedidoras y aseguradoras que participan en el suministro de combustible a Cuba, y la persecución de las transacciones financieras», subrayó una declaración emitida por el partido belaruso, Belaya Rus.
 
Una nutrida caravana por las principales arterias de la capital panameña apoyó a Cuba en su justa lucha, expresándose por un mundo que no puede ser espectador de una injusticia como esa, y demandó una acción más fuerte, ante la brutal postura de Estados Unidos.
 
El Comité Dominicano de Solidaridad con Cuba, en la provincia de Santiago de los Caballeros, realizó una parada para exigir el fin de ese cerco económico. También el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba se pronunció en contra de tan aberrante política.
 
Miembros del Parlamento Europeo, pertenecientes a diversas formaciones políticas, quienes habían firmado una carta de solidaridad por la emergencia energética y el paso del huracán Oscar por el oriente cubano, exigieron el levantamiento inmediato del bloqueo, y reconocieron los enormes esfuerzos realizados por el pueblo para resistir sus consecuencias.
 
En España, Países Bajos, México, Francia, Rusia, Belice; Bahamas, Jamaica, Surinam, Trinidad y Tobago, Honduras, Uruguay, Dominica, St. Kitts y Nevis, Bolivia, Canadá, Suecia, Barbados, Australia, Alemania y Antigua y Barbudas hubo reportes de actos de solidaridad con la Mayor de las Antillas.