Artículos

Una vanguardia política con el arma en ristre

Fecha: 

02/12/2023

Fuente: 

Granma

Autor: 

El 2 de diciembre de 1963 inició la construcción del Partido en las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), un proceso que se extendió hasta principios de 1967. Fidel y Raúl fueron permanentes orientadores y seguidores del desempeño de la vanguardia política en esa institución.
 
LABRANDO EL CAMINO DE LA VANGUARDIA POLÍTICA
 
A las necesidades crecientes de acercamiento, coordinación y acciones revolucionarias conjuntas de las fuerzas principales que participaron en la lucha por derrocar la dictadura batistiana, le siguió la constitución de las Organizaciones Revolucionarias Integradas.
 
Los graves errores de sectarismo cometidos fueron criticados y superados oportunamente por Fidel. Trazada una línea de masas y plenamente democrática, avanzó a paso firme la formación del Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba, antecedente inmediato y legítimo de nuestro Partido Comunista.
 
Al máximo líder de la Revolución corresponde el mérito mayor, pues concibió un método autóctono para la construcción de la vanguardia política de la Revolución, basado en la participación activa y en la consulta de las masas, la selección de los trabajadores y combatientes ejemplares, las asambleas de críticas y autocríticas, las entrevistas individuales, la elección de los militantes y su presentación pública; requisitos que aseguraban calidad y pureza en las filas del Partido.
 
POR LA SENDA DE LA CONSTRUCCIÓN DEL PARTIDO EN LAS FAR
 
La construcción del Partido en las FAR era una necesidad inaplazable de su desarrollo. Por acuerdo de la máxima dirección política del país, el entonces Segundo Secretario del Partido y ministro de la institución, Comandante Raúl Castro Ruz, tuvo a su cargo la preparación y conducción de un proceso inédito en la institución armada, misión que asumió con particular desvelo.
 
En ese tránsito, un grupo de 172 instructores revolucionarios recibió la preparación que los capacitaría para comenzar esa labor. A ellos diría, anticipadamente, el líder histórico de la Revolución, en septiembre de 1961: «Ustedes estarán llamados a ser los representantes, el alma de ese Partido en las filas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias…; que el esfuerzo de ustedes los haga acreedores a su representación del Partido Unido de la Revolución Socialista en las unidades de combate». La vida corroboró la certeza de esa previsión.
 
Al inicio se tomaron las vivencias en los centros de trabajo designados de la capital del país. Le seguirían las amplias investigaciones sociales realizadas en las zonas montañosas y en las compañías serranas de Oriente, unidades idóneas por su composición político-social. También fueron consideradas las experiencias de las Fuerzas Armadas de la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.
 
La construcción del Partido entrañaba un reto, en tanto se trataba de la creación de la vanguardia política en una institución armada, regida por el principio del mando único y sin menoscabo de la disciplina. Por primera vez se organizaría, en el continente americano, un partido político en el seno de una institución militar regular.
 
 
Raúl entrega el carné del Partido a Marcos Gutiérrez Bello, jefe de la Sección Política. Foto: Oficina de Asuntos Históricos
El 2 de diciembre de 1963, coincidente con el aniversario del desembarco del Granma y Día de las FAR, en una gran unidad del Ejército de Oriente dio inicio el proceso de creación del Partido, cuyo discurso inaugural estuvo a cargo del capitán Jorge Risquet Valdés, secretario de Organización del Partido en Oriente.
 
La selección de la que en aquel momento fuera la 56 División, tuvo en consideración su desempeño destacado durante la Crisis de Octubre de 1962, con el cumplimiento de misiones combativas al norte de la provincia oriental y, posteriormente, en octubre de 1963, por su labor sobresaliente en las tareas de salvamento, la evacuación de la población y la protección de recursos durante el ciclón Flora.
 
Estos elementos contribuyeron a crear un clima favorable para el desarrollo del proceso político que se extendió durante 15 días, y que fuera resumido por el Segundo Secretario del Partido y Ministro de las FAR, en un acto en el que se hizo entrega de los primeros carnés del Partido a los nuevos militantes. Como colofón de esa jornada, una escuela, con el nombre del mártir Víctor Vaillant Godine, fue inaugurada por Raúl, Vilma Espín y otros dirigentes, hecho que devino tradición a lo largo de ese acontecimiento político en las FAR.
 
Ese proceso comprendió a todos los soldados, clases y oficiales de la gran unidad. El 22,2 % de sus miembros integró la familia comunista, término que se empleó porque quienes quedaban en la condición de militantes de la UJC se integraban a los núcleos del Partido. En total, se crearon 45 núcleos, seis burós del Partido y una Sección Política. El 19 de enero de 1964 se efectuó la primera reunión de los comunistas que eligió la Comisión Adjunta al Organismo Político.   
 
Una nueva etapa del trabajo político y del Partido se abrió paso con las primeras organizaciones de base y el surgimiento del primer organismo político en las Fuerzas Armadas: la Sección Política de la División. Se produjo el fortalecimiento inmediato del trabajo en todas las esferas, incluida la batalla por la superación cultural de los combatientes.  
 
LOS PRIMEROS FRUTOS EN DESARROLLO
 
En pocas semanas, el proceso político abarcó otras unidades del ejército, y se sumaron enriquecedoras experiencias, con una evaluación en la Primera Conferencia del Partido de ese mando, en diciembre de 1965.
 
La labor se extendió a los siguientes ejércitos y tipos de fuerza armada y al Estado Mayor General, hasta febrero de 1967. Obtuvieron la condición de militantes del Partido 20 328 combatientes y 7 706 en la juventud comunista; se formaron 2 244 núcleos, 285 burós del Partido, 230 comités de base de la UJC y 30 comités de dirección de la organización juvenil. Se formaron las secciones políticas y eligieron las respectivas comisiones adjuntas en los niveles de división, brigada, flotilla y equivalentes hasta los ejércitos, tipo de fuerza armada y arma.
 
A fines de 1966, en lo fundamental, la construcción del Partido en las FAR había concluido en los principales mandos, con una importante contribución a la elevación de la preparación y disposición combativas, la consolidación de la disciplina militar, junto a un alto estado político-moral en las tropas.
 
Resultante de esa labor y las experiencias alcanzadas, las reuniones del Partido en las FAR, desde 1966, han sido continuidad histórica y momento de balance, de intercambio y generalización de los mejores resultados, y han contribuido a perfeccionar los métodos y el estilo de trabajo, el contenido de los reglamentos y las normas del trabajo político-partidista. Todos los encuentros nacionales fueron resumidos por el entonces Segundo Secretario del Comité Central del Partido, Raúl Castro Ruz.
 
A MODO CONCLUSIVO
 
La vida ha confirmado, con creces, la certeza y validez de la creación del Partido y su repercusión en la vida de la institución armada. Ha sido un permanente guía, orientador, educador, consejero y un juez cuando ha sido necesario.
 
En estas seis décadas, las FAR, indisolublemente unidas a su vanguardia política, han llevado a cabo múltiples misiones combativas, productivas y sociales en defensa de la Revolución, y han sobresalido en el cumplimiento de honrosas misiones internacionalistas que son orgullo de nuestro pueblo.
 
El proceso de creación de la vanguardia política en las FAR tuvo, como principales y permanentes orientadores, a Fidel y a Raúl. No ha habido momento trascendente que no contara con su presencia, enseñanzas y ejemplo. Bajo los acuerdos de los Congresos del Partido y la continuidad de la dirección de la Revolución, hoy se renueva el compromiso invariable del destacamento de vanguardia nacido hace 60 años.