En medio de la lucha por el regreso del niño Elián González, el 1ero de Mayo del 2000, en la Plaza de la Revolución José Martí de La Habana, nuestro Comandante en Jefe, Fidel Castro, daba a conocer el concepto de Revolución.
 
Sin dudas, una medular definición fruto de su larga experiencia como luchador, y síntesis perfecta de más de dos siglos de batallas contra el colonialismo español, primero; y contra el neocolonialismo de Estados Unidos después.
 
Un concepto con las armas, instrumentos y hasta las vías para que la Revolución no se detenga, y el cual resume en su esencia la historia pasada, presente, y sobre todo futura de la nación cubana.
 
Texto que debemos tener presente, no para repetirlo de memoria como un dogma, sino para aplicarlo diaria y creadoramente en nuestro trabajo.
 
Total vigencia
 
Como la quintaesencia del trabajo político-ideológico resumió el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Raúl Castro, el concepto de Revolución de Fidel.
 
Y aunque los tiempos cambian, con nuevos retos, la definición de Fidel mantiene total vigencia, pues contiene los elementos que validan a la nuestra como una Revolución verdadera.
 
Porque como expusiera nuestro líder histórico: Revolución es sentido del momento histórico y también es unidad, los cubanos acudirán a las plazas este 1ero de Mayo en una gran fiesta de pueblo.
 
Qué mejor recordación al magistral concepto del Comandante en Jefe, a quince años, que ratificar la decisión de guiarnos siempre por esos principios y actuar en consecuencia con ellos, cada cual en el puesto asignado.