Artículos

Perlas de julio en revolución

Fecha: 

16/07/2014

Fuente: 

Boletín Revolución

Autor: 

La asamblea de ganaderos más grande que se ha dado en cuba

Es el primer día de julio de 1959, la nueva Cuba ya tiene seis meses y no hay descanso. Fidel Castro viaja a Camagüey. En el campo deportivo del Sindicato de Plantas Eléctricas de esa ciudad, miles de ganaderos beneficiados por la reforma agraria se reúnen con él. En el encuentro se crea la Asociación de Ganaderos Libres.

El líder revolucionario hace uso de la palabra.

Por lo que estamos presenciando esta tarde aquí vemos que ya las cosas se están poniendo en su lugar. ¿Qué decían que yo no me quería reunir con los ganaderos? ¿Quién dijo? Yo no me quería reunir con los grandes latifundistas explotadores de los ganaderos. Reunirse con ellos, ¿para qué? ¿Para que me vinieran a llorar miseria? ¿Para que me vinieran a decir que el límite que le parecía justo era el de 400 caballerías de tierra? ¿Para pedirme que le concediera un placito de cinco años? En definitiva, era perder el tiempo. Yo conozco bien cómo en general se mueven y actúan ciertos intereses. He visto cómo tanto en los colonos como en los ganaderos como en todos los sectores pasaba exactamente lo mismo, los grandes hablaban en nombre de los chiquitos y en definitiva lo que hacían era defender sus intereses a nombre de los pequeños ganaderos. Además, no reina esa sinceridad, esa sinceridad que por ejemplo hemos visto aquí en la tarde de hoy. Mientras hablaba el Presidente de los ganaderos libres […]

Observaba a este ganadero hablando aquí con su estilo sencillo sin mucha palabrería, diciendo lo que cada cual siente aquí, hablando las verdades que todos ustedes pueden entender perfectamente sin mucho lirismo ni mucha retórica y veía el ambiente de sinceridad que hay en esta asamblea y esta sí que es una asamblea de ganaderos.

Porque los que han visto otras reuniones dicen que esta es la asamblea de ganaderos más grande que se ha dado nunca en Cuba.

La televisión: formidable instrumento de educación

Durante su visita a Camagüey, Fidel Castro inaugura una planta de televisión y con tal motivo hace declaraciones a la prensa.

[…] Con el Ministerio de Educación, precisamente estamos considerando de establecer un sistema, adquirir una planta de televisión […] y organizar una cadena nacional con fines educativos. Estamos considerando la posibilidad de determinados tipos de lecciones, determinados programas semanales, de geografía, de historia, emplear un sistema de enseñanza gráfica. Por ejemplo, el miércoles, o el jueves, por la tarde se va explicar —digamos — de geografía —en general, fue la idea que estuvimos proponiendo allí en el Consejo de Ministros—, las cataratas del Niágara, los mares, los ríos, todos los temas geográficos, muchas veces una materia de botánica, de zoología; en fin, cuánto no hubiéramos disfrutado nosotros si cuando muchachos, en esos días de mitad de semana, que ustedes saben que son los días más duros del estudiante […] en vez de una clase corriente, de rutina, nos hubiesen puesto por televisión películas, sobre todo, aquellas cuestiones históricas. […]

Si la novela enseña historia, imagínense una película histórica […] los conocimientos que puede aportar a los muchachos, no se les olvida nunca […] no tienen más que verla una vez; conocimientos geográficos, conocimientos de la naturaleza. […]

En fin, utilizar la televisión como medio de educación con una estación del Estado —en aquel tiempo el Estado no tenía ninguna estación — del Ministerio de Educación, con televisor en todos los centros y todas las escuelas —lo que hoy tenemos— donde simultáneamente, a la misma hora, en todos los miles de aulas, la película de determinada educación se les lleve a los muchachos. […]

Esta es una idea más que, como la Reforma Agraria y otras muchas reformas, la vamos a llevar en los planes de reforma de la enseñanza para hacer más amenas las clases, […] y poner todos estos medios técnicos al servicio de la educación. […]

Esa no será una empresa comercial, ni será de carácter político […] sino será simplemente de carácter educativo. Naturalmente que el Estado tendrá que afrontar los gastos que signifique, pero que se va a emplear la televisión como ese medio de educación; y habrá otros tipos de programas que podrán ser para la familia, las amas de casa, para el hombre, para el hogar, para, en fin, todas las actividades. Esperamos que la Reforma Agraria tenga también su programa.

Eso, para explicarles a ustedes la extraordinaria ventaja que es la televisión, el formidable instrumento de educación, de divulgación de las ideas […], cómo se llega a miles y a millones de personas por el procedimiento fácil de la televisión.

El cubano tiene una materia prima especial

El 2 de julio. Fidel Castro comparece en el programa de televisión Ante la prensa. El espíritu de unidad que se va apreciando en el pueblo de Cuba es uno de los temas sobre los que dialoga:

Sería bueno conocer qué porcentaje de seres humanos es absolutamente egoísta, absolutamente ambicioso, […] que no tienen en su ánimo un ápice de generosidad para los demás, y qué porcentaje de los seres humanos es capaz de estar de acuerdo con las cosas que se hacen bien. A mí me parece que es muy grande el porcentaje de seres humanos que está de acuerdo con las cosas que se hacen bien.

¿Qué porcentaje del país necesita mejorar su situación? Un 95. Estamos haciendo un esfuerzo por mejorar materialmente, espiritual y culturalmente a este 95 por ciento que lo necesita. Con eso no estamos más que cumpliendo un propósito y el ideal martiano de que la Patria debe ser de todos y para el bien de todos.

A veces nos dejamos llevar por ciertos criterios absolutamente egoístas y bien pudiéramos hacer algo por cambiar esa mentalidad y despertar en el hombre una mayor generosidad, sobre todo, si tenemos una materia prima como es el cubano, todos estamos de acuerdo en que el cubano tiene una materia prima especial, un material humano muy bueno, un sentido de la justicia extraordinario, además, es un pueblo vivo. No es como otros pueblos indiferentes a su tragedia. […]

Aquí todo el mundo tiene entusiasmo político. […]Porque es un pueblo sensible a la cosa pública y preocupado por la cosa pública. Esas son las cualidades de nuestro pueblo y nosotros tenemos que aprovechar esas cualidades para hacerlas mejores. […] el cubano está muy consciente de que esta es una oportunidad única, que no se puede perder. Quiénes pueden desear que esto fracase, sino exclusivamente el insensato, el egoísta, el ciego, el que no se da cuenta que hay una cosa por el medio, que humanamente esto no puede ser vencido. La derrota de la Revolución es la derrota de todo el mundo aquí y por eso el pueblo se agrupa en este momento, esta sensación es la que se experimenta.

Fidel: Spiheechie Meeke

El 16 de julio Fidel recibe a W. A. Raifford, jefe de la tribu Pájaros Blancos de los indios creeks, de Estados Unidos. La prensa informó al día siguiente:

El Premier de la República, doctor Fidel Castro, recibió el día 16, en horas de la tarde, la investidura como Gran Jefe Guerrero, de manos de un jefe de la tribu de los indios Creeks, pieles rojas norteamericanos, quien también le hizo entrega de la famosa pipa de la paz. Esta investidura, que ha sido recibida únicamente por destacados estadistas de la nación norteña, se ofrece por primera vez a un líder latinoamericano, y ello es una demostración más del arraigo popular que nuestra Revolución ha alcanzado no sólo en nuestro continente, sino en el mundo entero.

El jefe indio que entregó esa investidura al doctor Fidel Castro es también un famoso predicador de la Iglesia Evangelista, el reverendo W. A. Raiford, quien con simpática expresión bautizó al doctor Castro con el nombre indio de “Spiheechie Meeke” que quiere decir Gran Jefe Guerrero.