Arribamos al 2020 y los cubanos tenemos doble motivo para celebrar. El advenimiento de un nuevo año y con él una nueva etapa en nuestras vidas; el privilegio de celebrar el aniversario 61 del triunfo de la Revolución cubana. Una Revolución que como dijo Fidel está hecha por los humildes y para los humildes.

Conmemorar el nuevo aniversario de la Revolución cubana es un privilegio para los que habitamos esta isla, pues es esta una fecha que   nos convoca a rememorar hechos y a recordar hombres que   tienen historia y que hacen la historia. Es llegar al enero victorioso, mantener viva la llama de la libertad y recordar a un Fidel que vino en el Granma y subió a la Sierra para hacer una Revolución.

Decir Revolución es decir humanidad .Es   recordar al gigante que mantuvo encendida la llama de la libertad. Es apreciar a Fidel multiplicado con su barba verde olivo entregado a la lucha por su pueblo y junto a su pueblo.

Por eso tenemos presente hoy más que nunca sus palabras cuando expresó” Esta Revolución es la Revolución de nuestro pueblo. Juntos la hicimos. Juntos la defendemos. Somos la misma cosa y no podemos dejar jamás de serlo”, así lo planteaba el Comandante y así tenemos la responsabilidad de cumplir con su legado.

Con la misma fuerza y dignidad que Fidel y sus barbudos hicieron esta Revolución hace 61 años, su pueblo responde desde cada trinchera a esa conquista.  Recibamos el nuevo aniversario del triunfo de la Revolución, como hombres y mujeres agradecidos y dignos de esta tierra que siempre será como dijo Raúl en Santiago de Cuba, libre, independiente y dueña de su destino.