13 de mayo de 1962. Fidel habla en Ciudad Libertad, en La Habana, en un encuentro con madres de jóvenes becados. Señala que mañana nuestra Patria tendrá lo que no tiene hoy, nuestro pueblo tendrá lo que no tenemos hoy.
 
“Nosotros en este caso estamos trabajando principalmente para el porvenir, nosotros sabemos que el presente es de trabajo, sabemos que el presente es de lucha, sabemos que el presente es de sacrificio; no estamos recogiendo hoy los frutos, sino que hoy estamos sembrando la semilla, estamos arando sobre la tierra de la Patria y estamos sembrando el mañana de la nación cubana”.  

Al año siguiente en esta fecha, Fidel pronuncia un discurso en el estadio de Bratsk, en la Sibería, Unión Soviética.
 
“Hemos venido desde un país distante. Hemos recorrido un largo trecho para llegar hasta Bratsk”.
 
Señala que Bratsk es el punto más oriental de ese gran país donde había llegado en el recorrido que hacía por el territorio soviético y resalta que bien valía la pena haber andado tan largo trecho para conocer Bratsk y apreciar el trabajo que allí se realizaba.
 
“Nosotros habíamos oído muchas cosas acerca del trabajo que ustedes están haciendo, pero de ninguna manera era igual que poder verlo con nuestros propios ojos”.

El 13 de mayo de 1969, Fidel clausura el Primer Congreso del Instituto de Ciencia Animal, en el Salón de Embajadores del Hotel Habana Libre. Destaca la trascendencia que tiene ese evento tanto en Cuba como en el extranjero.
 
Seguidamente hace referencia a cómo surgió y las características del Instituto de Ciencia Animal.
 
“¿Cómo se organiza y por qué? Las causas eran obvias: a nuestro pueblo se le planteaba el problema que genéricamente se llama desarrollo, y que más concretamente tenía que ver con la necesidad fundamental de vivir, en ciertas ocasiones incluso de sobrevivir, de enfrentarse a serios problemas alimenticios derivados tanto de nuestro subdesarrollo como de circunstancias exteriores que impusieron a nuestro país un bloqueo de tipo económico”.
 
“Fue así como surgió la idea inicial de un centro para investigar las cuestiones relacionadas con la nutrición animal y el desarrollo de la ganadería”.  
 

Expone consideraciones sobre la política y la ciencia.
 
“Creo sinceramente, que la política puede estar al servicio del bien o del mal. Si está al servicio del bien es una política revolucionaria, como la ciencia también puede estar al servicio del bien o del mal. Si está al servicio del bien, puede decirse que es una ciencia humana, noble, revolucionaria, como también si la ciencia se pone —como se ha puesto muchas veces— al servicio del mal, de la guerra, de la destrucción, habrá que llamar a esa ciencia, ciencia al servicio de la política, y de la peor política, ciencia al servicio del crimen”.
 
En este día en el 2002, Fidel habla con motivo de la visita del expresidente norteamericano James Carter, a la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas. Resalta:
 
“Qué hermoso espectáculo ver aquí unidos, estudiando juntos, a estudiantes de toda América Latina y a estudiantes norteamericanos”.