Artículos

Noviembre y los recuerdos de un Domingo Rojo

Fuente: 

Periódico Girón de Matanzas

Autor: 

A María Luisa Delgado no le gusta que le pregunten la edad, sin embargo, no le apena decir que tenía 16 años cuando el Comandante en Jefe Fidel Castro visitó la Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) Arturo Suárez, pionera de su tipo en la provincia de Matanzas.  

Llega noviembre y como siempre los recuerdos afloran. Aunque múltiples almanaques ya quedaron atrás desde el dos de noviembre de 1980, a los moradores de Diana, comunidad rural del municipio de Jovellanos que debe su nombre a unos de los más importante ingenios del siglo XIX, no les parece distante aquel inolvidable Domingo Rojo.

“…siempre un minuto para (…) estrechar manos y preguntar, porque todo lo quiere saber Fidel al detalle. Desde la salud de los obreros y campesinos, la de sus hijos, hasta los planes de estudio y de producción.” Así relata la prensa de la época la estancia del líder histórico de la Revolución en Cuba.

Entonces se interesó por los Jardines de Diana, otrora sitio de esparcimiento del Conde Juan Soler, y al conocer la historia propuso convertir el espacio en lo que hoy constituye, un círculo de recreación de los cooperativistas y la comunidad, explica Félix Roberto Lorenzo, presidente de la CPA.  

La palabra de Fidel hay que respetarla, asegura el guajiro, de 61 años de edad, que conversa mientras sostiene un machete embarrado de tierra, por eso a más de tres décadas del suceso revitalizar la instalación es prioridad de los lugareños.

El aula de capacitación y la mini industria de la CPA, el consultorio médico, el terreno de béisbol, parques y la vía de acceso, se incluyen también entre las áreas vivificadas por los agricultores pequeños y otros vecinos de la localidad, mediante vigorosas jornadas que evocan al más memorable trabajo voluntario realizado en Diana.

Cuando otra vez el dos de noviembre en el almanaque coincide con el domingo, María Luisa Delgado se mira junto a Fidel en desgastadas páginas del periódico Girón, y entonces recuerda los atinados versos de Silvio Rodríguez que dictan:  Este domingo es especial domingo,/ la vida lo colmó de actividad./ Hoy todos los relojes sonaron a las cinco,/ la cuadra es un trajín que viene y va.