El 13 de septiembre de 2004 marcó a Francisco Camero, quien hoy rememora los instantes en los que un dibujo sirvió para guiar a Fidel ante el paso del huracán Iván por el sur cubano.
 
En ese tiempo, Camero presidía la asamblea municipal del Poder Popular (gobierno) en Guane, localidad de la occidental provincia de Pinar del Río, hasta donde viajó el líder histórico de la Revolución cubana.
 
Su primera pregunta estuvo relacionada con la cantidad de evacuados que teníamos y los alimentos y la atención médica que recibían, por el estado de ánimo de todos, recuerda el hombre.
 
Empeñado en llegar hasta el propio ojo del huracán, que avanzaba por el mar Caribe occidental con fluctuantes categorías de cuatro y cinco en la escala Saffir-Simpson, Fidel solicita un mapa.
 
Ante la imposibilidad de ubicarse geográficamente, explica Camero pide a María del Carmen Concepción -entonces principal autoridad política en la provincia de Pinar del Río y hoy ministra de la Industria Alimentaria y la Pesca- haga un croquis sobre la región que pretendía recorrer en el municipio de Guane.
 
Con su criollo humor, cuenta, el Comandante se burla y le dice a Carmita que el mapa parecía un 'perrito' pero que le servía para guiarse.
 
Así el papel, destinado a desaparecer, fue rescatado por Camero para, con la icónica firma, devenir en escudo de amor de un pueblo que con orgullo confiesa haber vivido el tiempo de Fidel.