Entrevista concedida a la Televisión Soviética al conmemorarse el 60 Aniversario de la Revolución de Octubre
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Entrevista concedida por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, a la Televisión Soviética, al conmemorarse el 60 Aniversario de la Revolución de Octubre, efectuada en el Consejo de Estado, el 3 de noviembre de 1977, “Año de la Institucionalización”.
Periodista.- Compañero Comandante, yo quisiera preguntarle cuál es su opinión sobre la influencia del gran octubre en el proceso revolucionario cubano.
Fidel Castro.- Bueno, la Revolución de Octubre tuvo influencia en todo el mundo, en todos los continentes, en todos los pueblos, y entre ellos —por supuesto— tuvo una gran influencia en Cuba.
Nosotros hacía apenas algunos años que habíamos concluido nuestras guerras de independencia. Pero las guerras de independencia de Cuba no habían culminado en la plena independencia de nuestro pueblo, puesto que se produjo la intervención de Estados Unidos, y como resultado de eso salió una república mediatizada, y se instauró el neocolonialismo en Cuba, los monopolios norteamericanos se apoderaron de nuestras riquezas fundamentales. Como consecuencia de eso había una gran frustración, un gran descontento en nuestro pueblo. Ya las ideas de Marx y de Engels habían tenido divulgación en algunos círculos obreros e intelectuales de nuestro país. De modo que la Revolución de Octubre causó en nuestro pueblo un gran impacto. Podemos decir que la inmensa mayoría de nuestros trabajadores, de nuestros obreros y nuestros campesinos, de nuestros intelectuales, vieron con mucha simpatía y experimentaron una profunda solidaridad hacia la Revolución de Octubre.
Ello despertó un interés mucho mayor por los problemas sociales, incrementó la lucha de clases, el estudio de los textos de Marx y Engels y de Lenin, y dio un gran impulso a la formación del primer Partido Comunista de Cuba. Desde círculos obreros y círculos universitarios se organizaron los primeros grupos marxista-leninistas que ya algunos años después fundaron el primer Partido Comunista de Cuba, que tuvo una influencia muy grande en la lucha de aquellos días que coincidió con una gran crisis económica, la de los años treinta, y que tuvo una gran influencia en la formación de una conciencia revolucionaria en el seno de las clases explotadas de nuestro país.
Esa fue la influencia inmediata. Esa influencia se mantuvo a lo largo de los años, y se ejerció sobre todo después de la consolidación de la revolución y de la construcción del primer Estado socialista. Se ejerció durante décadas.
De modo que las vanguardias, los elementos más conscientes de la clase obrera y de la intelectualidad tuvieron una gran inspiración en la Revolución de Octubre, todos nosotros; no solo en círculos obreros, sino incluso en círculos estudiantiles, en círculos intelectuales. Y podemos decir que las ideas de Marx, Engels y Lenin ejercieron una influencia decisiva en el núcleo revolucionario que organizó la lucha armada contra la tiranía de Batista y contra el neocolonialismo en nuestro país. Por lo tanto, podemos decir que el acontecimiento que más influyó en la Revolución Cubana fue precisamente la gloriosa Revolución de Octubre.
Periodista.- Con toda razón y muchas veces, en el mundo, en la prensa mundial se citan relaciones cubano-soviéticas como un ejemplo del internacionalismo proletario. ¿Qué opina usted sobre eso?
Fidel Castro.- A lo que dije anteriormente, yo debo añadir que sin la Revolución de Octubre habría sido absolutamente imposible, 42 años después, la Revolución Cubana. Porque precisamente la Revolución de Octubre creó las condiciones, y las circunstancias históricas y la correlación de fuerzas que hicieron posible la Revolución Cubana. Es decir, el proceso que se inicia con la Revolución de Octubre, que continúa con la construcción del primer Estado socialista en el mundo, la lucha mil veces heroica del pueblo soviético contra las agresiones imperialistas y contra la agresión fascista, crearon precisamente las condiciones que hicieron posible el triunfo de la Revolución Cubana en 1959.
Ahora, la pregunta que usted me hace está directamente relacionada con esto, porque la Revolución Cubana fue para todo el mundo una gran prueba del espíritu internacionalista de la Unión Soviética, es decir, que aquel espíritu internacionalista con que nace al mundo la Revolución de Octubre, no se había debilitado al cabo de más de 40 años, sino que realmente se había fortalecido.
Pero nosotros somos un país muy pequeño, situado en este lado del Atlántico, al lado de Estados Unidos. Estados Unidos creía que podía aplastar la Revolución Cubana fácilmente, mediante medidas de bloqueo económico primero, y agresiones militares después. Un país pequeño, subdesarrollado. Ellos creían que era cosa fácil.
Ahora, nosotros recibimos la solidaridad de la Unión Soviética. Desde los primeros momentos —hay que decirlo— ellos crearon un mercado para los productos que nosotros exportábamos a Estados Unidos y que Estados Unidos no quería comprar. Los soviéticos nos suministraron de materias primas fundamentales, de maquinarias, combustibles, alimentos; nos suministraron de los armamentos necesarios para la defensa del país, y ello hizo posible la supervivencia de la Revolución Cubana.
Fue una prueba extraordinaria del espíritu internacionalista, que a su vez, sembró en nuestro pueblo el espíritu internacionalista que nosotros practicamos hoy, porque esta es una especie de cadena.
Yo puedo decir realmente así, con toda la fuerza que dan los hechos y que da la realidad y la verdad, que las relaciones entre la Unión Soviética —un país grande, poderoso, desarrollado— con nuestro país, son relaciones ejemplares en todos los sentidos. Y siempre, en todas las tribunas en todas partes del mundo, nosotros señalamos estas relaciones como un ejemplo, y como el tipo de relaciones que deben existir entre los pueblos desarrollados y los pueblos subdesarrollados. Nosotros no tenemos una sola queja de la forma en que han marchado esas relaciones, que hoy, al cabo de casi 20 años de revolución, se han consolidado extraordinariamente. Yo creo que esto quedará en la historia, en realidad, como un ejemplo de internacionalismo y como un ejemplo de las relaciones que deben existir entre los pueblos.
Periodista.- Yo quisiera pedirle también que usted hablara un poco sobre la influencia del gran octubre en el proceso revolucionario universal.
Fidel Castro.- Ha sido una influencia realmente decisiva.
Mire, es imposible expresar en breves minutos todo lo que ha significado para el mundo la Revolución de Octubre. Sin la Revolución de Octubre, sin la visión genial de Lenin, sin el partido revolucionario que él forjó, sin la claridad de sus ideas —que supo analizar, interpretar y ver en el momento preciso, en la hora precisa, en las condiciones precisas, que había llegado la oportunidad de la revolución—, la revolución socialista en el mundo se habría tardado decenas de años. Sin la Revolución de Octubre el fascismo y el imperialismo habrían dominado el mundo durante mucho tiempo; sin la Revolución de Octubre y el esfuerzo heroico que ulteriormente realizó el pueblo soviético, no habría surgido lo que hoy es la poderosa comunidad socialista; sin la Revolución de Octubre no se habría iniciado este colosal movimiento de liberación nacional, que dio al traste con el colonialismo y trajo la independencia a casi cien nuevas naciones en el mundo. Sin la Revolución de Octubre habría sido imposible que países como Cuba, aislado en este hemisferio, hubiesen podido hacer la revolución socialista; habría sido imposible que países como Angola, como Mozambique, como Etiopía, como Viet Nam y otros muchos, estuvieran hoy construyendo el socialismo. Sin la Revolución de Octubre la humanidad no habría podido tener jamás una verdadera esperanza de paz, puesto que el capitalismo y el imperialismo se caracterizaron por las guerras de rapiña y por los repartos del mundo.
Hay que decir que después de la Revolución de Octubre y la consolidación del Estado soviético y la derrota del fascismo, por primera vez en la historia de la humanidad han cesado esas guerras de rapiña y se ha creado una verdadera posibilidad de paz. Por tanto, podemos decir que sin la Revolución de Octubre actualmente no existirían, ni siquiera, las posibilidades de supervivencia de la humanidad.
Periodista.- Bueno, y por último yo le ruego algunas palabras para el pueblo soviético en estos días de fiesta.
Fidel Castro.- Bueno, en primer lugar, queremos decir que si todos los países tenemos nuestras fiestas nacionales, la gloriosa fecha de la Revolución de Octubre constituye una fecha universal. Por eso nosotros en nuestro país, al igual que en todo el mundo, hemos conmemorado con el máximo de entusiasmo y de alegría el 60º Aniversario de la Revolución de Octubre.
Todas las civilizaciones, todas las épocas, tienen su gran fecha. La civilización occidental cristiana tuvo su fecha tradicional, las Navidades. Para nosotros, la civilización socialista, la etapa o la era del socialismo tiene su gran fecha anual, y su fecha decenal —y será en el futuro la fecha no solo anual y decenal, sino también centenaria—, que es la Revolución de Octubre.
A los soviéticos, en este instante, deseamos expresarles toda nuestra admiración, nuestro cariño, nuestra simpatía, nuestro reconocimiento y nuestra alegría por sus éxitos.
Al pueblo soviético deseamos felicitarlo por los extraordinarios avances alcanzados en estos años, por su Constitución —su nueva Constitución—, que es la más perfecta, la más justa, la más avanzada de todas las constituciones del mundo.
En ninguna época de la historia, en tan breve período de tiempo, ninguna comunidad humana ha alcanzado los éxitos del pueblo soviético. Pienso mucho en esto y me admiro cada vez más de la forma tan inteligente, tan sabia con que resolvieron el problema de las nacionalidades y crearon la unión de los pueblos, de las naciones que hoy constituyen la Unión Soviética, estableciendo un verdadero modelo de lo que deben ser las relaciones en el mundo de mañana.
La Unión Soviética es hoy el baluarte de la seguridad de los pueblos, de la paz en el mundo. La Unión Soviética es un baluarte de la ciencia, del progreso social, de la sociedad igualitaria y justa que marcha, podemos decir que rápidamente, hacia la desaparición de las clases, hacia el comunismo, como lo establece la Constitución, que es la máxima aspiración de la sociedad humana.
Hay todavía problemas grandes en el mundo. Está el problema fundamental y esencial de salvaguardar la paz, por la cual tanto ha luchado el Estado soviético y a lo cual personalmente ha consagrado sus mejores energías nuestro querido compañero Leonid Ilich Brezhnev.
Hay problemas relacionados con una gran parte del mundo todavía pobre, hambriento, inculto, subdesarrollado. Hay todavía pueblos que luchan por su liberación. Hay todavía problemas y tensiones que es preciso superar.
Pero, precisamente, lo que se ha alcanzado en estos 60 años nos llena a todos de fe, de optimismo y de entusiasmo en la lucha, y de confianza y seguridad en que la sociedad humana será capaz de vencer estos obstáculos; y que por encima de las fuerzas de la reacción y del imperialismo, la justicia, la igualdad, la fraternidad entre los hombres y el comunismo, triunfarán. Y esa será una eterna deuda de gratitud de toda la humanidad hacia la Revolución de Octubre, hacia Lenin y hacia el pueblo soviético.
Periodista.- Compañero Fidel Castro: el período pre revolucionario en la Unión Soviética, el período de la misma revolución y posterior a sus 60 años, confirmaron el papel dirigente del Partido Comunista de la Unión Soviética. El desarrollo de los últimos 60 años, sobre todo el desarrollo mundial en los últimos decenios, confirmó aún más la importancia de los partidos en los cuales no se puede tratar de construir una nueva sociedad, de hacer revoluciones de obreros y campesinos y de los trabajadores.
Fidel Castro.- Mira, una de las cosas que yo más admiro de la obra de Lenin fueron sus ideas y sus concepciones de lo que debe ser un verdadero partido revolucionario. Los partidos existían desde hacía mucho tiempo, incluso en la Revolución Francesa había partidos, el partido de los jacobinos, el partido de los girondinos; después se desarrollaron partidos liberales burgueses, partidos obreros, partidos socialistas.
Pero Lenin nos legó dos grandes enseñanzas: primero, la necesidad de mantener la pureza de la doctrina, y a la vez interpretarla y desarrollarla; segundo, la necesidad de un verdadero partido revolucionario, de una vanguardia perfectamente pertrechada de las ideas revolucionarias, y con una concepción de su estructura y de su organización, sin las cuales era absolutamente imposible la tarea de llevar adelante la revolución.
Por eso, aparte de los aportes teóricos de Lenin, de su genial interpretación del marxismo, está la idea del Partido, y de cómo debe ser un partido marxista de vanguardia, que hoy se llama Partido Marxista Leninista.
Periodista.- Partido de la clase obrera.
Fidel Castro.- Cómo debe ser el partido de la clase obrera, cómo debe estar organizado y cómo debe estar preparado para hacer la revolución. Son dos extraordinarios aportes de Lenin, entre los muchos que hizo.
Pero, además, hay que tener en cuenta no solo eso, Lenin no solo consagró casi 20 años a la creación de ese Partido, sino que supo interpretar de una manera muy correcta el momento en que ese partido debía pasar a la acción, de acuerdo con la lucha de clases, de acuerdo con las leyes de la historia. Pero es precisamente en la interpretación de estos principios en que los hombres pueden cometer errores, y Lenin no cometió ningún error, Lenin decidió el momento preciso, exacto, en que el Partido tenía que lanzarse a la toma del poder. Y hay que decir que en el seno del Partido Bolchevique fue la voz de Lenin y los argumentos de Lenin los que en dura lucha lograron prevalecer y sin los cuales no se habría producido la Revolución de Octubre; después, el papel del Partido en la construcción del socialismo.
De modo que ha quedado establecido de una manera clara y definitiva la imposibilidad de la revolución socialista, sin un partido de vanguardia. Aquellos que sueñan con que se puede hacer la revolución sin un partido, son utopistas, son ilusos; y no solo hacer la revolución, construir el socialismo, sin un partido es absolutamente imposible.
Periodista.- Es una tarea más difícil en la misma revolución.
Fidel Castro.- Es más difícil, nosotros lo sabemos por experiencia propia. Pero el Estado solo no podría hacer la revolución, porque el Estado se ocupa de la construcción económica, de la administración de todas esas tareas.
Periodista.- Necesita una fuerza directora.
Fidel Castro.- Pero necesita una fuerza dirigente, directora, necesita... yo podría decir, incluso que necesita una fuerza espiritual. El partido es la fuerza espiritual, es la fuerza moral, la sabiduría y la ciencia de la dirección del proceso revolucionario. Nosotros, de acuerdo con estos principios leninistas, hemos actuado precisamente de esa forma.
Incluso, en el caso de Cuba, la Revolución se gesta en un momento determinado, en medio de muchas fuerzas fraccionadas. Una de esas fuerzas —la que nosotros organizamos— llegó a adquirir potencial suficiente, para derrocar la tiranía de Batista con el apoyo del pueblo, aplicando los principios marxista-leninistas de la lucha de clases, de la participación de las masas. Pero inmediatamente del triunfo de la Revolución nos consagramos a la tarea de reunir a todas esas fuerzas y crear el Partido.
Desde el momento en que ya la Revolución triunfa, el Partido se crea y empieza a actuar como dirigente de la sociedad, es absolutamente imposible la derrota de la Revolución. De modo que la Revolución necesita del Partido, no solo para conquistar el poder; lo necesita para consolidarse, lo necesita para construir el socialismo, lo necesita, en definitiva, para evitar la derrota.
Periodista.- Y eso lo demuestra todo el proceso de los 60 años de la Unión Soviética.
Fidel Castro.- Bueno, el proceso de la Unión Soviética, ¿cómo se podría concebir sin la existencia del Partido Comunista; cómo se habría podido concebir la Revolución en la URSS, la construcción del socialismo en la URSS, la lucha contra el fascismo y la derrota del fascismo e la URSS, la creación de la comunidad socialista y lo que hoy es la Unión Soviética?
De modo que, no sé si habrá todavía en el mundo alguien que crea que se puede hacer una revolución o se puede hacer el socialismo sin Partido; no solo es necesario el Partido, sino que el Partido juega el rol y el papel fundamental en la construcción del socialismo en la revolución.
Periodista.- Y desde ese punto de vista, los Partidos Comunistas de la Unión Soviética, de todos los países del mundo, juegan un papel principal en el desarrollo mundial, en la construcción del socialismo y el fortalecimiento del socialismo en los países donde ya están estableciéndose regímenes socialistas, y en la lucha por el socialismo en otros países del mundo.
Y desde ese punto de vista, yo creo que tiene gran importancia la unidad y la cohesión de todos los Partidos Comunistas y obreros del mundo. Desde ese punto de vista, yo creo que esos festejos del 60 Aniversario de la Revolución de Octubre, esa sesión solemne del Comité Central del Consejo Supremo de la URSS, el Soviet Supremo de la URSS, y donde se reunieron los dirigentes, prácticamente de todos los Partidos Comunistas y obreros del mundo, se confirma esa unidad de hoy día. A pesar de todos los intentos del imperialismo, del revisionismo de todo tipo, de debilitar al movimiento comunista, el movimiento comunista se fortalece, se crece y no hay fuerza que pueda destruirlo. Y esa confirmación, eso es reflejo del 60 Aniversario.
Fidel Castro.- Mira, yo pienso que no debemos olvidar que la consigna histórica fundamental de Marx y de Engels en el Manifiesto Comunista, fue aquella de “Proletarios de todos los países uníos”. Los partidos son esenciales —ya hemos hablado sobre esto—, la unidad es esencial, independientemente de la diferencia de condiciones históricas, de condiciones objetivas concretas de cada país, independientemente de la necesidad de que cada Partido elabore sus tácticas y sus estrategias en cada país, con relación a lo cual nadie está en desacuerdo. La unidad es esencial para el movimiento comunista internacional, porque la reacción internacional está unida. Existe la solidaridad del imperialismo y de los países reaccionarios, la solidaridad de los opresores, de los capitalistas. Frente a eso solo se puede oponer una fuerza, que es la unión más estrecha y la solidaridad de todos los revolucionarios. No hay pretexto para dividir el movimiento comunista internacional, ni lo habrá jamás. Todo intento de división del movimiento comunista internacional es una traición al marxismo-leninismo.
La traición puede tener sus efectos, puede producir cierta confusión, cierto daño durante cierto tiempo. Pero la historia está demostrando que a pesar de las deserciones, de las traiciones que ocurrieron siempre, también en el siglo pasado —a raíz de la Revolución de Octubre hubo deserciones y hubo revisionismo en determinados partidos que se llamaban comunistas, y aún hoy día pues se observan ciertos fenómenos de revisionismo de derecha, de izquierda—; en realidad la impresión que uno tiene, es que a pesar de esas traiciones, dentro de las cuales la número uno, la más importante, la más grave es la traición de la dirigencia china, hoy día, el campo socialista, el movimiento revolucionario, en el cual participan los países socialistas, los partidos comunistas, la clase obrera del mundo capitalista y el movimiento de liberación nacional, han creado una posición para el campo revolucionario mucho más fuerte de lo que han existido nunca.
Y la conmemoración del 60 Aniversario lo demuestra con hechos palpables, puesto que nadie se ha atrevido a negar la importancia del 60 Aniversario de la Revolución de Octubre, en ninguna parte del mundo. Los imperialistas lo tienen que tomar en cuenta. Y gente que tiene discrepancia y tiene problemas han tenido que tomarla en cuenta.
Es justo decir que esta fecha del 60 Aniversario ha servido para comprobar en la práctica la enorme fuerza del campo socialista y del movimiento revolucionario mundial. No creo que nadie intente negar eso, y no creo que nadie pueda hacer absolutamente nada para disminuir la importancia de esta fecha y de ese hecho.
Si tú quieres que yo diga algo más.
Periodista.- Yo no estaba aquí cuando tú hablaste, contestando al compañero en las primeras preguntas, porque como se trata de esa fecha, de la Revolución de Octubre.
Fidel Castro.- Ya yo hablé de eso, hablé de la importancia, hablé de...
Periodista.- ¿Qué cree que es necesario subrayar?
Fidel Castro.- Yo diría que hay que subrayar la sabiduría del Partido Comunista Soviético, y hay que subrayar la sabiduría y la madurez de la dirección del Partido Comunista Soviético, que se caracterizan por su firmeza, por su seriedad.
De modo que hoy todos los pueblos del mundo sabemos que la Unión Soviética sigue una política consecuente siempre. Es la que ha seguido durante estos 60 años. Y eso inspira una gran confianza. Ningún Partido, ningún Estado que se caracterice por virajes en una dirección, virajes en otra dirección, hacer una cosa hoy y hacer otra cosa mañana, ganará jamás la confianza de los pueblos ni la confianza de la humanidad.
Y yo podría sintetizar mi opinión, diciendo que el Partido Comunista de Lenin ha seguido una misma línea, desde la Revolución de Octubre hasta hoy. Y eso inspira una gran confianza. Es decir que en la línea estratégica general del Partido Bolchevique, el Partido Comunista de la Unión Soviética, ha sido la misma en estos 60 años. Y eso crea una gran confianza en todos los dirigentes revolucionarios y en todos los pueblos.
Yo deseo destacar el papel importante de la actual dirección soviética, del Buró Político del Partido Comunista de la Unión Soviética, y en especial del compañero Brezhnev, que han hecho mucho por consolidar esta confianza, esta fe que los pueblos tienen hoy en el Partido Comunista de la Unión Soviética.
____________.- Su política interna y su política externa...
Fidel Castro.- Se ha caracterizado por el espíritu científico, tanto en la política interna como en la política externa. En la política interior los éxitos se pueden apreciar en las cifras de los datos estadísticos de los grandes avances de la URSS en los últimos años. Y en la política exterior —digamos—, la influencia creciente de las ideas en favor del desarme y en favor de la paz, que se aprecia en el mundo.
Y el hecho real de que por primera vez en la historia de la humanidad se han podido evitar las guerras mundiales. El hecho real de que la paz empiece a ser reconocida como una necesidad, no solo por todos los revolucionarios, sino por la opinión pública de todo el mundo, e incluso por los propios enemigos del socialismo; no habría sido posible eso sin la Unión Soviética y sin la política exterior de paz que ha seguido la Unión Soviética, aunque la paz hoy, digamos que, ya no es solo un resultado de la persuasión, sino un resultado de la fuerza objetiva, tremenda, de la comunidad socialista.
Periodista.- Yo creo, Comandante, que...
Fidel Castro.- Puedes escoger eso y lo otro.
Periodista.- Sí, sí.