Cuba tiene derecho a vivir sin bloqueo económico de Estados Unidos, afirmó el canciller Bruno Rodríguez al anunciar que en noviembre su país volverá a presentar el proyecto de resolución para poner fin a esa política.
 
En un video en su cuenta de Twitter el ministro precisó que por 30 ocasión la nación caribeña llevará a la Asamblea General de las Naciones Unidas la propuesta de poner fin a ese cerco, que solo en los primeros 14 meses del gobierno de Joseph Biden causó afectaciones por valor de seis mil 364 millones de dólares.
 
Ello dificulta nuestro desarrollo y priva al país de ingresos que podrían destinarse al bienestar de nuestro pueblo, remarcó Rodríguez, quien subrayó que Washington persiste en ignorar el reclamo de la comunidad internacional y recrudeció el bloqueo a niveles sin precedentes.
 
“Ha sido una política fallida en el objetivo de subvertir el orden constitucional en Cuba, pero provoca carencias, dolor y sufrimientos injustificables a las familias cubanas, al limitar el acceso a alimentos, medicamentos, combustibles y otros bienes de primera necesidad”, enfatizó el titular de exteriores de la isla.
 
Añadió que causa un daño real y significativo a los derechos humanos de los cubanos y de terceros países.
 
Al respecto comentó que la designación unilateral y fraudulenta de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo refuerza el impacto disuasivo e intimidatorio de esta política de asfixia económica, cuyo marcado carácter extraterritorial afecta los vínculos legítimos que establecen gobiernos, entidades, bancos y empresarios con la nación caribeña y a sus ciudadanos residentes en el exterior.
 
El canciller denunció también que el Gobierno de Estados Unidos acompaña este atropello con operaciones de desinformación y desestabilización hacia la mayor de las Antillas.
 
El bloqueo pone al país norteño en un profundo aislamiento internacional, le genera descrédito y concita el profundo rechazo de los pueblos del mundo, remarcó el ministro.
 
La presentación del proyecto de resolución está prevista para los días 2 y 3 de noviembre, y será la 30 ocasión que la comunidad internacional se pronuncie sobre el tema, una votación que siempre ha resultado favorable.