Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y jefe de la delegación cubana a la Conferencia de la ONU sobre Financiación al Desarrollo, reveló que el regreso del Comandante en Jefe Fidel Castro a Cuba se debió a brutales presiones norteamericanas sobre el Gobierno mexicano.  

En una conferencia de prensa aquí, Alarcón explicó que "personas muy autorizadas del Gobierno de México nos comunicaron antes de la conferencia las presiones de que eran objeto de parte del Gobierno de los Estados Unidos para que Cuba no participase en la Conferencia y para que, específicamente, no estuviese encabezada por Fidel".  

Dijo que Cuba rechazó esos planteamientos y exigió su derecho a participar, por lo que se tuvo que admitir que el Presidente cubano viniera, pero a la vez solicitándole y pidiéndole personas muy autorizadas de México que se marchara después del almuerzo del jueves.  

Puntualizó que Cuba mantuvo una postura constructiva en el afán de encontrar una solución honorable, "que ya es imposible porque está teniendo lugar lo que se llama el retiro" (reunión a la que asisten solo jefes de Estado o Gobierno, no jefes de delegaciones).   

Destacó que la postura cubana estuvo acompañada por otras delegaciones, en particular del Caribe, que no asistieron a la cena oficial del jueves como expresión de solidaridad con Cuba. Asimismo denunció la existencia de un documento en inglés que se maneja en el llamado retiro, reunión que calificó de discriminatoria, lo cual agrega un elemento adicional de incorrección a la forma en que se adoptó el llamado Consenso de Monterrey, aprobado este viernes, al concluir la Cumbre.  

Se trata de un documento en el que estarían reflejadas las posiciones respecto a las condiciones que el mundo rico impone para una política de financiación al desarrollo, y para el cual no fue consultada la mayoría de las naciones representadas en el evento, organizado por la ONU.  Mientras tanto, en diversas latitudes continúa la repercusión del discurso de Fidel y su retirada de lo que muchos llaman la Cumbre de la Pobreza.   

Toda la prensa mexicana destaca la posición asumida por el gobernante cubano en la Conferencia, y en la que hizo oír las voces de los pueblos, y su regreso a Cuba, impedido de continuar en ese evento.  Fidel es la voz de la dignidad, fue la sentencia del presidente venezolano Hugo Chávez. Desde Nicaragua llegó una opinión parecida: "Gran suerte la del género humano: Tiene voz. La voz de Fidel", declaró en exclusiva a Granma el comandante sandinista Tomás Borge, en referencia a las palabras del Presidente cubano. "Será, sin duda, un discurso clásico. Cuando nadie se acuerde de Bush, la historia se acordará de Fidel y de sus palabras", añadió.  

En la propia patria de Sandino, en Colombia, Brasil, España y otras naciones, la prensa se refiere a los pronunciamientos de denuncia del Comandante en Jefe y sus reclamos de hacer un mundo posible de justicia y desarrollo para los desposeídos.