Rusia denunció hoy el nuevo apretón de tuerca de Estados Unidos al bloqueo impuesto por más de medio siglo a Cuba, al amenazar con la aplicación del capítulo III de la extraterritorial ley Helms-Burton.
 
Washington refuerza el cerco en torno a Cuba al anunciar la posible imposición de demandas contra unas 200 empresas cubanas como parte de la entrada en vigor del capítulo III de una ley aprobada en 1996, comentó la vocera de la Cancillería rusa, María Zajarova.
 
Durante más de 20 años, los mandatarios norteamericanos mantuvieron la moratoria para poner en práctica el referido capítulo, pero parece que, con la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, ello cambió y ahora decide medidas ilegales contra Cuba, señaló la portavoz.
 
Estados Unidos habla todo el tiempo de la crisis económica y hasta humanitaria en Venezuela y la situación en Cuba, declaró la vocera.
 
Pero quisiéramos saber que pasaría con la economía de ese país norteño si se aplicara solo el 10 por ciento de las restricciones que impone el propio Washington a Cuba y Venezuela, se preguntó Zajarova.
 
De seguro la economía norteamericana se hubiera desplomado estrepitosamente, consideró la diplomática rusa en alusión a las pérdidas multimillonarias causadas por el bloqueo norteamericano contra Cuba y la política de sanciones contra Venezuela.
 
Zajarova denunció el doble rasero puesto en práctica por Washington en el caso de Cuba y de Venezuela al hablar de democracia y condiciones humanitarias y reiteró que el cerco económico, comercial y financiero estadounidense contra la isla es una reliquia histórica.
 
Aunque después de varios fracasos en su política hostil contra Venezuela, la estrategia norteamericana en América Latina queda más clara, es decir, deponer a los gobiernos incómodos y recuperar la aplicación de la tristemente célebre Doctrina Monroe, denunció.