“(…) la solidaridad con Cuba crece y es evidente en muchos campos, y no podemos defraudar jamás las esperanzas que han puesto en nosotros tantos millones de personas en el mundo. Nuestra responsabilidad es muy grande no solo con nuestro propio pueblo, sino con todos los pueblos del mundo y, especialmente, con los pueblos del Tercer Mundo”.
Referencia al texto original:
Discurso Pronunciado en el Acto de Abanderamiento del Contingente de Macheteros Primero De Mayo, 23 de noviembre de 1992