Los presidente de Cuba y Brasil, Raúl Castro y Luiz Inácio Lula da Silva, respectivamente, encabezaron las conversaciones oficiales entre las delegaciones de ambas naciones.

Efectuado en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno brasileño, como parte de la visita que realiza el primer mandatario cubano al país sudamericano, el intercambio fue franco, ameno y fraterno, refiere hoy el periódico Granma.

Los Presidentes expresaron su alegría y satisfacción por el avance sostenido de las relaciones bilaterales en todos los campos, especialmente en el político y económico, y sobre todo por las claras perspectivas de que continuarán desarrollándose de manera acelerada.

Entre los temas de carácter regional abordados destacó el de la integración y el desarrollo de América Latina y el Caribe.

Raúl felicitó a Lula por la reunión cumbre que con dicho objetivo se llevó a cabo esta misma semana en Costa de Sauípe, estado brasileño de Bahía, donde también tuvieron lugar las cumbres del Mercado Común del Sur, de la Unión de Naciones del Sur y del Grupo de Río.

Encomió el papel que desempeñan Brasil y su Presidente en el logro de estos trascendentales propósitos, de los que depende en gran medida el futuro de la región.

Lula, por su parte, manifestó su satisfacción por recibir a su homólogo cubano en tierra brasileña y reiteró su alegría por el ingreso de Cuba como miembro pleno al Grupo de Río, a lo que se une el hecho de que ese histórico acontecimiento ocurriera precisamente en Brasil.

Ratificó igualmente el rechazo del pueblo y gobierno de Brasil al bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba, y la decisión de trabajar en todos los foros para aunar aún más los esfuerzos del subcontinente hasta lograr la eliminación de esa criminal medida.