“Lo que reclamamos, y por lo que debemos luchar, es que la globalización inevitable que por ley de la historia hoy se desarrolla, sea la globalización de la fraternidad y la cooperación entre todos los pueblos, del desarrollo sostenible, de la justa distribución y el uso racional de las abundantes riquezas materiales y espirituales que con sus manos y su inteligencia es capaz de crear el hombre, condición indispensable para la patria común ineludible de una humanidad que puede y debe perdurar”.
Referencia al texto original:
Discurso pronunciado en la Reunión Especial de Jefes de Estado y de Gobierno del Cariforo, 21 de agosto de 1998