XXXIV Período de Sesiones de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas
Discurso a los Jefes de Estado y de Gobierno que son miembros de esta organización a nombre del movimiento de Países no Alineados, el 12 de agosto de 1979 donde les dice que: " El ruido de las armas, del lenguaje amenazante, de la prepotencia en la escena internacional debe cesar. Basta ya de ilusión de que los problemas del mundo se puedan resolver con armas nucleares. Las bombas podrán matar a los hambrientos, a los enfermos, alos ignorantes, pero no pueden matar el hambre, las enfermedades, la ignorancia. No pueden tampoco matar la justa rebeldía de los pueblos y en el holocausto morirán también los ricos, que son los que más tienen que perder en este mundo."