“No hay duda de que el trabajo de los maestros es un factor principalísimo y fundamental, eso no se puede cuestionar en absoluto; pero tampoco hay duda de que el trabajo de los padres es una cuestión de gran importancia, una cuestión también fundamental”.
Referencia al texto original:
Discurso en la clausura del XI Seminario nacional de educación media, 5 de febrero de 1987