Fidel
Soldado de las Ideas
En su voz, la voz de otros, el rostro de otros, el viaje –para muchos sin regreso– de La Habana hacia Santiago de Cuba, el sobresalto a la entrada de la granjita Siboney; luego, el ataque al Moncada, el tableteo de las ametralladoras, el frenazo salvador.
Nunca antes el mes de diciembre había sido tan rebelde como aquel de 1958. Porque lo dictaba la ofensiva guerrillera desatada por las fuerzas del Ejército Rebelde, al mando de Fidel, contra la dictadura batistiana, poco a poco la libertad bajó de las montañas; poco a poco en pueblos y ciudades la bandera cubana salió a ondear en balcones y fachadas de las casas. Por fin, ondeaba la Revolución en las calles.