Fidel
Soldado de las Ideas
Hay un país pequeño que se baña en las aguas del Caribe. Un país tan pequeño como David pero con el mismo coraje a la hora de enfrentar gigantes. Hay un país pequeño que ha luchado y lucha. Hay un país pequeño que viste de verde olivo.
A este país le han nacido hijos, hijos que combaten detrás de un microscopio. Hijos de batas blancas.
Quizá su sitio vital siempre estuvo en el futuro. Por eso sabía dibujar el camino, desbrozar el sendero, construir un porvenir. Incluso, cuando pensé que se había equivocado en alguna solución, según una percepción anclada a la altura de mi nariz, el tiempo, ese juez sabio, terminó por darle la razón.