18 de noviembre de 1959. Fidel pronuncia un discurso en la apertura en La Habana del IX Congreso Nacional de la Central de Trabajadores de Cuba. Señala que es de importancia vital que la clase obrera comprenda que tiene en sus manos el porvenir de la patria.
 
Destaca que al pueblo cubano lo une la justicia, la defensa de la soberanía y el ideal patriótico y puntualiza:
 
“…Sólo cabe una táctica correcta: agruparnos los obreros, agruparnos los campesinos, agruparse el pueblo para defender la Revolución…”
 
Este día de 1971, Fidel realiza en Chile un recorrido por las minas de carbón de Lota y Coronel. Después habla en un acto en Playa Blanca, Lota, Concepción. Expresa su admiración por los mineros que durante décadas trabajan arriesgando sus vidas y resalta que la clase obrera está llamada a escribir la historia revolucionaria de los tiempos contemporáneos.  
 
"El futuro no es de los reaccionarios. ¡El futuro es del pueblo! ¡El futuro es de los trabajadores!"
 
En ese mismo día sostiene un encuentro con estudiantes de la Universidad de Concepción. Comenta:
 
“…La revolución es el arte de unir fuerzas: la revolución es el arte de aglutinar fuerzas para librar las batallas decisivas contra el imperialismo”.

 
También en esa fecha habla en un acto en la Plaza Arturo Pratt en Tomé, Chile. Afirma que el objetivo de la Revolución cubana es el hombre, el pueblo.
 
“Y no se puede luchar por una causa más justa, no se puede luchar por una causa más noble. Y en aras de esa causa, todos debemos estar dispuestos a dar nuestra energía, nuestro tiempo, nuestro sudor, y si es necesario también nuestras vidas”.
 
Además en ese día y año Fidel viaja en el remolcador Meteoro que atraviesa la bahía de Concepción desde Tomé hasta Talcahuano y se traslada en avión hacia Puerto Puerto Montt, Llanquihue. Allí pronuncia un discurso en un acto frente al hotel Pérez Rosales.
 
En el año 2000, Fidel interviene en la Reunión de Trabajo de la X Cumbre Iberoamericana. Expresa que no hay respuesta a las necesidades crecientes de las inmensas mayorías del mundo.
 

“…No marchemos sobre nubes de ilusiones y engaños; busquemos en el injusto orden político y económico impuesto al mundo la gran causa real y fundamental de que carezcamos de los ansiados recursos con los que quisiéramos hacer más humano el destino de todos nuestros niños”.
 
En el 2007, redacta su reflexión El diálogo con Chávez. Señala que escuchó por una emisora privada de televisión al servicio del imperio, una declaración elaborada por la embajada norteamericana, tras el valiente y patriótico discurso de Chávez en la Cumbre Iberoamericana y los incidentes ocurridos ante la actitud del Rey de España de mandarlo a callar.
 
“¡Qué hueco y ridículo sonaba todo frente al discurso vibrante de Chávez en el debate! ¡Gloria al Bravo Pueblo que el yugo lanzó!”
 

En el 2009, Fidel elabora la reflexión La Revolución Bolivariana y la Paz. Cita un injurioso editorial publicado por un periódico colombiano titulado Tambores de guerra en el cual se trata con desprecio a Chávez y se reafirma sus intenciones de invadir a Bogotá.
 
Destaca que, coincidiendo con esta publicación, el presidente venezolano publicó su artículo semanal Las líneas de Chávez en el que enjuicia la concesión a Estados Unidos de 7 bases militares en territorio colombiano.
 
“Chávez es un verdadero revolucionario, pensador profundo, sincero, valiente e incansable trabajador".