Cuando este viernes abra sus puertas la XVIII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL), en Bakú, Azerbaiyán, al recuerdo de muchos llegará la imprescindible figura del Comandante en Jefe Fidel Castro, quien desde esa tribuna alzó su voz para defender las causas justas y colocar a Cuba como protagonista dentro de esa organización internacional.
 
La nación caribeña figura entre las fundadoras del MNOAL en 1961, año en el cual los cubanos, solo cinco meses antes y en menos de 72 horas, derrotaron al imperialismo yanqui en las arenas de Playa Girón, recibiendo el reconocimiento mundial de los demás integrantes de la recién nacida instancia.
 
Cuba ha apoyado las causas de las naciones miembros del MNOAL según su política de solidaridad con los oprimidos y de respeto a la soberanía, entre ellas se encuentran la resistencia del Líbano, Palestina y las naciones árabes contra la agresión foránea y ha sido partícipe de otras iniciativas impulsadas por el movimiento como la eliminación de las Armas Nucleares.

 
Igualmente, el MNOAL ha levantado su voz en rechazo al bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno norteamericano contra La Habana, durante casi 6 décadas.
 
Por ello, la nación se ha desempeñado como presidente del movimiento en dos períodos y por lo tanto ha sido sede de la reunión de jefes de Estados y de gobierno también en dos ocasiones, la primera en la VI Cumbre en 1979 y la segunda en la VI Cumbre, en el año 2006.
 
Sin embargo, uno de los más emotivos recuerdos del Comandante Fidel fue su intervención en la IV Cumbre, celebrada en Argel en 1973, cuando después de ser presentado por el presidente argelino Houari Boumedien como el representante de la Isla de la Libertad, expresó en su discurso del 7 de septiembre:
 
“El éxito y el porvenir del movimiento no alineado estará en no dejarse penetrar, confundir ni engañar por la ideología imperialista. Solo una alianza estrecha entre todas las fuerzas progresistas del mundo nos dará la fuerza necesaria para vencer las todavía poderosas fuerzas del imperialismo, el colonialismo, el neocolonialismo y el racismo y luchar exitosamente por las aspiraciones de justicia y de paz de todos los pueblos del mundo”.
 
Más de cuatro décadas después de aquellas palabras, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en representación del pueblo y gobierno de la mayor de las Antillas, ha reiterado a través de su perfil en Twitter, el compromiso de Cuba con la preservación de la unidad del MNOAL y su importante papel en la esfera internacional, como mecanismo de concertación política de los países del Sur.
 
Una vez más, ahora desde Azerbaiyán, el Comandante en Jefe estará presente en la voz de Díaz-Canel y de la delegación cubana, y sus palabras continuarán tan vigentes como aquel septiembre hace 46 años cuando exclamó:
 
“Nuestra verdadera unidad no depende de un no alineamiento circunstancial, sino de una identidad más profunda y permanente, de iguales en los principios revolucionarios, en el común programa antiimperialista que es la aspiración a sustanciarlo en definitivas transformaciones sociales.”