Desfile militar y cívico en Cuba, momentos de historia y continuidad
Como si navegara en un mar de infantes que agitaban sus pañoletas azules, recorrió hoy la Plaza de la Revolución el yate Granma, símbolo del inicio de la última etapa de las luchas libertadoras de Cuba.
Imponente por el contenido histórico que lo acompaña, esta réplica del yate, en el que llegara a costas de la isla Fidel Castro encabezando un grupo de 82 expedicionarios, desfiló rodeado de una representación de las más jóvenes generaciones de cubanos.
En tanto los cerca de tres mil pioneros vitoreaban la consigna de "Yo soy Fidel" retumbaba la letra de la canción La Lupe, compuesta por el Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque, en ocasión de la despedida desde Tuxpán, México.
Los primeros momentos de la revista militar devino remembranza de pasajes significativos de la historia de Cuba: la caballería mambisa, en recordación a las luchas insurreccionales contra el colonialismo español; cuatro columnas, representativas de las que formó el Ejército Rebelde que luchara contra la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959).
En las columnas desfilaron combatientes de aquella etapa en la que se gestó la Revolución.
Otro momento de recordación en esta revista militar fue para la Campaña de Alfabetización, que recientemente arribó a los 40 años de haberse cumplido con la declaración de Cuba como Primer Territorio Libre de Analfabetismo de América Latina. Unos 90 estudiantes de la Universidad de Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona vistieron el uniforme y portaron los faroles que iluminaron de conocimientos la isla.
Ineludible a la memoria estuvo presente, en la representación de jóvenes cubanos y combatientes internacionalistas, la participación de la isla en las luchas independentistas de varios pueblos de África el pasado siglo.
Cerró esta parte de la revista la alegría de la Compañía de Teatro Infantil La Colmenita que contagió a los presentes con la dulzura de la miel de sus sonrisas y algarabía.
Marchas e himnos militares, voces de mando de infantería acompañaron el lúcido desfile de bloques de oficiales y soldados de las diferentes fuerzas que junto al pueblo constituyen la defensa de la patria.
El pueblo, en marcha apretada, colmó la Plaza de Revolución y una vez más fue momento de reafirmación y respaldo al proyecto de la Revolución. El bloque unido de cubanos que enarbolaron miles de banderas nacionales fue colofón de esta jornada de historia y continuidad.