Trabajadores de la misión diplomática de Cuba en Panamá rindieron hoy homenaje a los mártires del sabotaje perpetrado el 6 de octubre de 1976 a una aeronave de Cubana de Aviación.
 
Durante el acto de recordación del mundialmente conocido crimen de Barbados, el agregado de prensa de la embajada, Michel Rivero, dijo que a 40 años de ese abominable atentado terrorista, el hecho aún sigue impune.
 
Recordó como su autor intelectual, Luis Posada Carriles, viajó en noviembre de 2000 a esta capital con el propósito de asesinar al entonces presidente cubano Fidel Castro, mientras se dirigía a miles de estudiantes, profesores y simpatizantes de la Revolución cubana en el Paraninfo de la Universidad de Panamá.
 
En aquella ocasión, el plan consistía en volar el lugar con explosivos de alto poder destructivo, delito que junto a otros y a las pruebas contundentes presentadas por los abogados llevaron a Posada a la prisión.
 
Sin embargo, en agosto de 2004 la entonces presidenta Mireya Moscoso lo indultó, pese a que el proceso no había concluido, y según las leyes panameñas el acusado no contaba con ese privilegio, precisó Rivero.
 
Cabe señalar que el intento de asesinato contra Fidel fue fraguado con el apoyo de la Fundación Nacional Cubano Americana, durante la X Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.
 
Como resultado de la explosión en pleno vuelo de la aeronave de Cubana de Aviación, frente a las costas de Barbados, murieron 73 personas, entre ellos los tripulantes, 11 guyaneses, cinco coreanos y los integrantes del equipo nacional de esgrima, que ganó todas las medallas de oro en el centroamericano de ese deporte celebrado en Venezuela.
 
El acto de homenaje estuvo presidido por el embajador de Cuba en Panamá, Antonio Miguel Pardo y la presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, Kenia Serrano, quien asiste al Encuentro Regional de Solidaridad con la nación caribeña, a celebrarse mañana y el sábado en la ciudad de Chitré.