Fidel y la horda de cobardes
Data:
20/12/2011
Fonte:
Aporrea
Autor:
En estos días los “valientes guerreros” de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y los mercenarios de la cloaca de Miami con sus sucursal en Madrid (encabezado por el terrorista Montaner) amanecieron turulatos y atragantados con sus propios excrementos. La noticia salió del Reino Unido y fue divulgada al mundo entero: el líder histórico de la revolución cubana Fidel Castro ingresó al libro de los récords Guinness por ser “la persona a la que más veces se ha intentado asesinar”.
Aunque ellos por ser actores comprometidos en los hechos debieran ser los primeros en acreditar la noticia, “no pueden creerlo”, ¡pensaban que no se sabría sus fechorías! No ha sido el gobierno cubano quien ha informado esos acontecimientos (pues cuando Cuba lo ha hecho, entonces ha sido acusada de hacer publicidad revolucionaria), ha sido la organización Guinness World Records -para nada simpatizante con la revolución cubana-, la que ha afirmado que al Comandante Fidel Castro han intentado asesinarlo 638 veces.
La noticia emitida por Guinness World Records no específica mayores detalles sobre los autores de esos intentos. Otros medios de información se encargaron de señalar -especialmente los diarios cubanos- quiénes fueron esos facinerosos y cuáles los métodos que planearon. Al respecto, desde hace buen tiempo, se han publicado muchos libros (uno de los más significativos es del Fabián Escalante Font: Acción ejecutiva. Objetivo: Fidel Castro) y en la web también circulan videos que tratan el tema, pero como se trata de Cuba, entonces los grandes medios comerciales hacen silencio. Pregunta: ¿Qué hubiera sucedido mediáticamente si tan sólo hubiera habido un par de intentos de asesinato contra algún presidente del llamado primer mundo?
En el documental de Estela Bravo Fidel la historia no contada, le preguntan al Comandante: “¿Cuántos atentados han habido contra usted?”, él responde: “Lo sabré cuando llegue al cielo”. Además de ser una respuesta modesta -porque Fidel no ha vivido alardeando de eso ni haciéndose la víctima-, también es una forma de decir, que han sido muchos y que su seguridad personal sólo ha podido nombrar los que llegaron a detectar.
El 2005 en el programa La noche del 10, en La Habana, Diego Armando Maradona le pregunta: “¿Cuántas atentados sufrió Comandante?”. Fidel responde: “Ninguno, porque no llegaron a disparar. Según los órganos de inteligencia fueron alrededor de 600 veces…Ninguno de esos mercenarios ha muerto nunca en una acción, si ellos tuvieran la decisión de morirse, yo no estaría vivo, no estaría conversando contigo. Mi suerte es que son mercenarios. Y deseaban disfrutar de los placeres que podía darle el dinero que le pagaban. Delante de mí, con cámaras como esas, allá en Chile tuvieron una ametralladora apuntando. No se atrevieron a disparar porque no querían morir. Esa ha sido la historia real.” Como puede verse se trata de una horda de cobardes que durante cinco décadas actuaron ilegalmente por dinero, apoyados y protegidos por las autoridades norteamericanas.
Pero la integridad física de Fidel en todo este tiempo también habla muy bien del profesionalismo de la Seguridad del Estado cubano y especialmente de su guardia personal. Una vez Fidel dijo “En cuanto a la seguridad de nuestra delegación, no albergamos preocupación alguna; está advertida, posee experiencia y es veterana en la lucha contra emboscadas, planes traicioneros y otras agresiones del imperio y sus aliados.” Suelen narrarse anécdotas de los riesgos a los que Fidel se ha expuesto a lo largo de medio siglo, por el estilo de liderazgo sui géneris que ha ejercido, mezclándose entre la gente -dentro y fuera de Cuba-, rompiendo los protocolos y poniendo en apuros a su guardia personal. Al respecto puede verse el libro de Luis Báez Fidel por el mundo.
¿Por qué tanto interés del imperio en asesinar al líder revolucionario? A Fidel y a Cuba el imperio no le tolera la rebeldía, no le perdona el ejemplo internacional de independencia y soberanía, no acepta que sea un paradigma de la solidaridad de los pueblos, de resistencia y lucha por un mundo más justo, más libre y más humano. El presidente dominicano Leonel Fernández definió a Fidel en 1998 como “Una fuerza histórica viviente, que ha servido para canalizar las aspiraciones de justicia y bienestar de millones de seres humanos, no solo de América Latina sino también de otras naciones del llamado Tercer Mundo”. Fidel y Cuba son un símbolo de la dignidad y la resistencia latinoamericana en contra del imperialismo. En 1996 en Italia después de su breve discurso en la Cumbre Mundial de la Alimentación, organizada por la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), se dijo de él: “Es un extraterrestre que defiende al planeta del hambre”.
En 1998 después de la VIII Cumbre Iberoamericana en Oporto, Portugal, estando en Extremadura, España, llegó la noticia del arresto de Pinochet (adalid del anticomunismo y aliado incondicional de los Estados Unidos), entonces un periodista se atrevió a preguntarle “¿Tiene miedo de que algún día le pudiese ocurrir los mismo que a Pinochet?”, Fidel respondió contundentemente: “¿A mí? No, porque no somos dos casos iguales…he recorrido el mundo en medio de la cacería que han organizado a lo largo de muchos años para eliminarme físicamente y no tengo temor de ir a cualquier parte. Se pueden contar por centenares los planes de atentado que contra mí han tratado de llevar a cabo y aquí estoy entre ustedes, feliz, en la mañana de hoy. Además pertenezco a la estirpe de los que difícilmente puedan ser arrestados en ninguna parte, no solo por la moral que tengo, la convicción que tengo, sino por la historia de toda mi vida, la que conozco bien, bastante bien, y no es la que han escrito nuestros enemigos. Se podría hacer una enciclopedia para marcar las diferencias”.
El hecho de que la organización Guinness World Records haya registrado en este año 2011 al Comandante Fidel Castro como la persona a la que más veces han intentado asesinar en la historia, es una manera de desenmascarar al imperio y sus brazos tenebrosos que son la CIA y los grupos terroristas conformado por batistianos cubanoamericanos; pero es también una forma de registrar el rotundo fracaso de ellos en sus propósitos de acabar con la vida de Fidel. La historia ya consigna la grandeza del Comandante y la miseria de sus enemigos.
Aunque ellos por ser actores comprometidos en los hechos debieran ser los primeros en acreditar la noticia, “no pueden creerlo”, ¡pensaban que no se sabría sus fechorías! No ha sido el gobierno cubano quien ha informado esos acontecimientos (pues cuando Cuba lo ha hecho, entonces ha sido acusada de hacer publicidad revolucionaria), ha sido la organización Guinness World Records -para nada simpatizante con la revolución cubana-, la que ha afirmado que al Comandante Fidel Castro han intentado asesinarlo 638 veces.
La noticia emitida por Guinness World Records no específica mayores detalles sobre los autores de esos intentos. Otros medios de información se encargaron de señalar -especialmente los diarios cubanos- quiénes fueron esos facinerosos y cuáles los métodos que planearon. Al respecto, desde hace buen tiempo, se han publicado muchos libros (uno de los más significativos es del Fabián Escalante Font: Acción ejecutiva. Objetivo: Fidel Castro) y en la web también circulan videos que tratan el tema, pero como se trata de Cuba, entonces los grandes medios comerciales hacen silencio. Pregunta: ¿Qué hubiera sucedido mediáticamente si tan sólo hubiera habido un par de intentos de asesinato contra algún presidente del llamado primer mundo?
En el documental de Estela Bravo Fidel la historia no contada, le preguntan al Comandante: “¿Cuántos atentados han habido contra usted?”, él responde: “Lo sabré cuando llegue al cielo”. Además de ser una respuesta modesta -porque Fidel no ha vivido alardeando de eso ni haciéndose la víctima-, también es una forma de decir, que han sido muchos y que su seguridad personal sólo ha podido nombrar los que llegaron a detectar.
El 2005 en el programa La noche del 10, en La Habana, Diego Armando Maradona le pregunta: “¿Cuántas atentados sufrió Comandante?”. Fidel responde: “Ninguno, porque no llegaron a disparar. Según los órganos de inteligencia fueron alrededor de 600 veces…Ninguno de esos mercenarios ha muerto nunca en una acción, si ellos tuvieran la decisión de morirse, yo no estaría vivo, no estaría conversando contigo. Mi suerte es que son mercenarios. Y deseaban disfrutar de los placeres que podía darle el dinero que le pagaban. Delante de mí, con cámaras como esas, allá en Chile tuvieron una ametralladora apuntando. No se atrevieron a disparar porque no querían morir. Esa ha sido la historia real.” Como puede verse se trata de una horda de cobardes que durante cinco décadas actuaron ilegalmente por dinero, apoyados y protegidos por las autoridades norteamericanas.
Pero la integridad física de Fidel en todo este tiempo también habla muy bien del profesionalismo de la Seguridad del Estado cubano y especialmente de su guardia personal. Una vez Fidel dijo “En cuanto a la seguridad de nuestra delegación, no albergamos preocupación alguna; está advertida, posee experiencia y es veterana en la lucha contra emboscadas, planes traicioneros y otras agresiones del imperio y sus aliados.” Suelen narrarse anécdotas de los riesgos a los que Fidel se ha expuesto a lo largo de medio siglo, por el estilo de liderazgo sui géneris que ha ejercido, mezclándose entre la gente -dentro y fuera de Cuba-, rompiendo los protocolos y poniendo en apuros a su guardia personal. Al respecto puede verse el libro de Luis Báez Fidel por el mundo.
¿Por qué tanto interés del imperio en asesinar al líder revolucionario? A Fidel y a Cuba el imperio no le tolera la rebeldía, no le perdona el ejemplo internacional de independencia y soberanía, no acepta que sea un paradigma de la solidaridad de los pueblos, de resistencia y lucha por un mundo más justo, más libre y más humano. El presidente dominicano Leonel Fernández definió a Fidel en 1998 como “Una fuerza histórica viviente, que ha servido para canalizar las aspiraciones de justicia y bienestar de millones de seres humanos, no solo de América Latina sino también de otras naciones del llamado Tercer Mundo”. Fidel y Cuba son un símbolo de la dignidad y la resistencia latinoamericana en contra del imperialismo. En 1996 en Italia después de su breve discurso en la Cumbre Mundial de la Alimentación, organizada por la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), se dijo de él: “Es un extraterrestre que defiende al planeta del hambre”.
En 1998 después de la VIII Cumbre Iberoamericana en Oporto, Portugal, estando en Extremadura, España, llegó la noticia del arresto de Pinochet (adalid del anticomunismo y aliado incondicional de los Estados Unidos), entonces un periodista se atrevió a preguntarle “¿Tiene miedo de que algún día le pudiese ocurrir los mismo que a Pinochet?”, Fidel respondió contundentemente: “¿A mí? No, porque no somos dos casos iguales…he recorrido el mundo en medio de la cacería que han organizado a lo largo de muchos años para eliminarme físicamente y no tengo temor de ir a cualquier parte. Se pueden contar por centenares los planes de atentado que contra mí han tratado de llevar a cabo y aquí estoy entre ustedes, feliz, en la mañana de hoy. Además pertenezco a la estirpe de los que difícilmente puedan ser arrestados en ninguna parte, no solo por la moral que tengo, la convicción que tengo, sino por la historia de toda mi vida, la que conozco bien, bastante bien, y no es la que han escrito nuestros enemigos. Se podría hacer una enciclopedia para marcar las diferencias”.
El hecho de que la organización Guinness World Records haya registrado en este año 2011 al Comandante Fidel Castro como la persona a la que más veces han intentado asesinar en la historia, es una manera de desenmascarar al imperio y sus brazos tenebrosos que son la CIA y los grupos terroristas conformado por batistianos cubanoamericanos; pero es también una forma de registrar el rotundo fracaso de ellos en sus propósitos de acabar con la vida de Fidel. La historia ya consigna la grandeza del Comandante y la miseria de sus enemigos.