"No cambiaremos la primogenitura revolucionaria, que nos da el hecho de ser la primera revolución socialista en el hemisferio occidental, por un plato de lentejas. También como los cristianos, podemos decir, que no solo de pan vive el hombre”.
"No cambiaremos la primogenitura revolucionaria, que nos da el hecho de ser la primera revolución socialista en el hemisferio occidental, por un plato de lentejas. También como los cristianos, podemos decir, que no solo de pan vive el hombre”.