EL esperado discurso del Presidente cubano, Fidel Castro, en esta XIII Cumbre de Países No Alineados, terminó con un llamado a luchar y la decisión de que lucharemos porque nadie, dijo, lo hará por nosotros.

Fueron siete minutos en los que nadie se movió, la sala parecía congelada para atrapar la imagen de un dirigente que habla con la autoridad que le confiere no haber cejado en su empeño de construir un mundo mejor, no solo para su pueblo, sino para todos los pueblos del mundo.

El Presidente Mahatir, como no había hecho hasta ahora con ningún otro dignatario, lo felicitó por su "breve y sustancioso" discurso a lo que la sala, respondió con un cálido aplauso.

Fidel caminó hacia su escaño acompañado por la mano de muchos mandatarios que con ese gesto le transmitían callada y respetuosamente la admiración que inspira por haber dicho siempre lo que piensa y hacerlo no como un ejercicio oratorio, sino con la decisión de que el mundo necesita cambiar.

Otro hubiera pasado por alto aquella despreciativa y humillante frase lanzada por el emperador Bush de que las fuerzas armadas norteamericanas deben estar listas para atacar en cualquier "oscuro rincón del mundo".

Fidel, no. La dignidad, el orgullo, el sentimiento de pertenencia a esa parte explotada y humillada del planeta, no lo dejaría. No sin razón, como diría un día Neruda, los pueblos le agradecen "palabras en acción y hechos que cantan".

CONCLUYE HOY XIII CONFERENCIA CUMBRE DEL MNOAL

Con la aprobación de la Declaración de Kuala Lumpur, el Documento Final, las declaraciones especiales sobre Iraq y Palestina y la aceptación de Cuba como próximo presidente del MNOAL, concluirá esta noche la XIII Conferencia Cumbre. Se anunció igualmente, que al caer el mayete, cerrando los trabajos del encuentro, se realizará una conferencia de prensa de la troika del Movimiento, en la que estarían los presidentes de Sudáfrica, Malasia y Cuba en sus condiciones de presidentes saliente, actual y futuro.

Durante la primera jornada de este segmento al más alto nivel, intervinieron más de treinta jefes de Estado, primeros ministros y algún que otro canciller que vino en representación de su país.

Más allá de alguna referencia a situaciones internas de sus países, o divergencias con segundos, lo que primó en las intervenciones fue un llamado contra la guerra, particularmente la que se gesta  contra Iraq, a hacer cumplir las resoluciones de Naciones Unidas sobre el derecho inalienable del pueblo palestino a su integridad territorial, a revitalizar el Movimiento con vistas a que sea su legítimo representante en la arena internacional y a hacer avanzar la cooperación Sur-Sur en busca de la prosperidad y el desarrollo de nuestros pueblos.

DECLARACIÓN DE KUALA LUMPUR

Cuando esta edición circule aún no se habrá clausurado la XIII Conferencia Cumbre, no obstante ya circula entre los periodistas una copia de la Declaración de Kuala Lumpur, documento que recoge una síntesis de los debates a nivel ministerial dirigidos a la revitalización y el fortalecimiento del Movimiento.

En el texto se reconoce el papel jugado por el Movimiento en cuanto a la descolonización, la lucha contra el apartheid, la situación palestina y el Oriente Medio, el desarme, la erradicación de la pobreza y el desarrollo económico y social, al tiempo que subraya los enormes retos y vicisitudes que ha afrontado.

Sin embargo, reconoce que después de 40 años de su fundación, ha llegado el momento de llevar a cabo una revisión general de su papel, estructura y métodos de trabajo.
Para traducir el discurso en acción, y reiterar el compromiso con los propósitos y objetivos del MNOAL, los jefes de Estado y de Gobierno acordaron encaminar los esfuerzos, entre otros, a los siguientes objetivos:

Fortalecer la unidad básica en los intereses comunes, y en una historia de luchas compartidas, perseverar en los esfuerzos para que estos intereses sean promovidos continuamente y las preocupaciones de nuestros pueblos sean atendidas plenamente.

Promover y fortalecer el proceso multilateral como vehículo indispensable en la salvaguardia de los intereses de los estados miembros del MNOAL, así como aquellos de las Naciones Unidas.

Asimismo, la declaración llama a fortalecer las capacidades nacionales, la cooperación Sur-Sur, a establecer una relación más dinámica y cooperativa con los países industrializados y desarrollados, basada en un compromiso constructivo, una amplia asociación y beneficios mutuos.

De la misma forma, acordaron, pasos concretos para, junto al objetivo de revitalizar el Movimiento, hacer todos los esfuerzos hacia la promoción de un mundo multipolar a través del fortalecimiento de las Naciones Unidas, como la organización internacional indispensable para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, la promoción de los derechos humanos, el desarrollo económico y social y el respeto al derecho internacional.