Lo más elocuente aquel 30 de septiembre de 1996, más allá de las profundas reflexiones y sentidas palabras que dedicó Fidel Castro a los villaclareños, estuvo en esa empatía recíproca entre el líder de la Revolución y su pueblo.
 
Era un reencuentro que anhelaban los villaclareños. Por eso solo bastó que desde el programa Patria, de la emisora CMHW, se anunciara: ¡Villaclareños, Fidel está en Santa Clara. Todos, hoy a las cinco de la tarde con nuestro Comandante en Jefe a la Plaza de la Revolución Comandante Ernesto Guevara!
 
Aquello desencadenó el ímpetu concretado en que, en menos de 12 horas, la plaza fue desbordada por una multitud nunca antes vista en ese escenario, donde todavía no reposaban los restos del Comandante Ernesto Guevara.
 
Fue entonces que vino ese gesto que estremeció a la plaza: dando la espalda a la multitud alzó su vista hacia la escultura del Guerrillero Heroico y le rindió homenaje.
 
Un Fidel visiblemente contento empezó su discurso con un elogio a los presentes: «son ustedes demasiado generosos por el calor y el cariño con que me han recibido y por ser capaces de llenar esta gran plaza, aun bajo la lluvia».
 
Esta ciudad deseaba una visita de Fidel desde hacia muchísimo rato. Él, conocedor de esa realidad, le reveló aquel día a la multitud: «Muchos compañeros me hablaban y me decían: «Hace tiempo que no visita Santa Clara (RISAS), y se preguntan que por qué no visita, si estuvo por acá, si estuvo por allá (RISAS). Yo les puedo asegurar, con la sinceridad que me ha caracterizado siempre, que eso no tiene absolutamente nada que ver con el cariño, el respeto y la admiración que yo he sentido siempre y sentiré siempre por Santa Clara y por Villa Clara».
 
Luego relató que cuando Miguel Díaz-Canel Bermúdez, entonces primer secretario del Partido en Villa Clara, le propuso realizar el acto en la plaza estuvo de acuerdo, pero indagó cómo se podía organizar un acto en solo unas horas en ese espacio tan grande.
 
Sí, sí, se organiza, y se llena la plaza, puede estar seguro, le respondieron.
 
El líder de la Revolución habló aquel día, entre otros temas, sobre el desarrollo de Villa Clara, sus aportes en la producción, la ciencia, la salud pública, la construcción, su participación en la lucha revolucionaria; y también del respeto en nuestro en país a los derechos humanos y del implacable, cruel y despiadado bloqueo que nos ha impuesto Estados Unidos.
 
Aquel 30 de septiembre, hace 20 años, resultó una fecha histórica, como la calificó Fidel, quien dijo: «para mí será una fecha que me unirá eternamente en el recuerdo a esta ciudad y a ustedes, que nos colma de orgullo a todos nosotros, que nos llena de confianza y de fuerza».