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Fortalecer los sueños y la obra de Fidel y Chávez

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, denunció todas las políticas intervencionistas contra su país. Foto: Juvenal Balán
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, denunció todas las políticas intervencionistas contra su país. Foto: Juvenal Balán

Data: 

14/12/1998

Fonte: 

Periódico Granma

Autore: 

Fortalecer la unión, la solidaridad y la cooperación fue denominador común en las intervenciones de los presidentes, jefes de gobierno y de delegaciones  en la sesión inaugural de la XVI Cumbre ALBA-TCP, desarrollada en el salón de protocolo de El Laguito, a propósito del aniversario 14 de esta estructura integracionista en América Latina y el Caribe.
 
La propuesta de crear una zona de desarrollo económico para la región latinoamericana con un pensamiento integrador, cooperativo y próspero, marcó el discurso de Nicolás Maduro Moros, presidente de la República Bolivariana de Venezuela.
 
«Si estudiamos entre todos y asumimos la propuesta de introducir la criptomoneda u otra moneda de cambio, estoy seguro de que el alba habrá encontrado un instrumento maravilloso para robustecer su banco, ello redundará en el crecimiento económico y en el intercambio comercial entre todas las naciones de la organización», afirmó el mandatario venezolano.
 
Para él, la única forma de salir de las penurias, la pobreza y el subdesarrollo está dada en avanzar hacia la construcción del socialismo creando un sistema económico basado en un pensamiento integrador y latinoamericanista. Para ello, propuso a Bolivia como país conductor en las estrategias económicas, porque ha sabido consolidar una economía eficiente en los últimos años.
 
Hay que retomar el Consejo Económico del alba y que sea guiado por la patria de Evo Morales, nación que ha obtenido un crecimiento económico importante, destacó Maduro. Su discurso tuvo como hilo conductor el reclamo de la unidad para concebir todos los planes sociales que puedan ayudar a los pueblos latinoamericanos. Convocó a continuar con los programas acometidos en educación, salud, cultura y deporte.
 
Recordó el nacimiento del alba-tcp, con el abrazo fundido entre el Comandante en Jefe Fidel Castro y el mandatario venezolano Hugo Chávez en el año 1994 y resaltó que ellos pudieron convertir un sueño en realidad para llevar a los pueblos del sur una visión colectiva y anticapitalista.
 
Reconoció que la Alianza Bolivariana de Nuestra América supo enterrar el Área de Libre Comercio para las Américas (alca), un proyecto colonialista y con mayor dependencia de los países del sur hacia Estados Unidos y que llevaría más calamidades y penurias a los pueblos latinoamericanos.
 
Recordó que el alca nació durante la 1ª Cumbre de las Américas de 1994 en la ciudad de Miami, en Florida, donde participaron todos los países del continente americano, excepto Cuba. Con ese proyecto se abrían las fronteras, se eliminaban aranceles, se incrementaban las privatizaciones y se despojaba a los pueblos de las garantías sociales para una vida plena.
 
«Cuando estamos en las reuniones del alba nos sentimos entre hermanos. Sentimos a Fidel vivo y presente, sentimos la fuerza de la Revolución Sandinista y sus años de resistencia. Sentimos a los 500 años y más de la lucha de los hermanos bolivianos en el sur, de la fuerza del Caribe rebelde de dignidad y valentía. Esa fuerza se ha convertido en la obra concreta y de acción, en las  políticas de nuestros gobiernos», aseveró el mandatario.
 
DEBE RESPETARSE EL DERECHO DE LOS PUEBLOS
 
El primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, apoyó la propuesta de Venezuela en cuanto a proponer nuevas formas de intercambio comercial entre los países miembros de la Alianza, teniendo como sustento un sistema de pago diferente. Lo argumentó teniendo en cuenta que cuando Estados Unidos impone sanciones económicas a la patria de Bolívar perjudica a casi todos los países del Caribe con convenios activos para el suministro de petróleo y otros recursos naturales.
 
Igualmente propuso crear una organización que incluyera a países africanos y varios latinoamericanos que hicieran avanzar los procesos progresistas y se dilucidaran acuerdos comerciales fructíferos para todas las naciones. Esto desarrollaría un frente opositor al capitalismo monopolista de estado instalado en los países desarrollados.
 
«Yo he estado observando la forma en que está el mundo actualmente, la hegemonía del capitalismo monopolista es una ensarta de contradicciones. Los pueblos en esos países desarrollados se han rebelado y no permiten un gobierno a la manera antigua. Esos gobiernos se han visto en la disyuntiva de no poseer ninguna otra forma moderna para gobernar», refirió el mandatario caribeño.
 
Ejemplificó con la fuerza adquirida por los movimientos sociales dentro de Estados Unidos, Francia e Inglaterra, que han impedido el avance del neoliberalismo, con la introducción de leyes que empeoran la vida de los pueblos en las naciones desarrolladas. Reconoció que entre los éxitos del alba también está el haber impedido que se produjera una intervención militar en Venezuela, porque el gobierno de la Casa Blanca no logró el consenso ansiado en la Cumbre de la Organización de Estados Americanos, desarrollada en Cancún, México, en el año 2016.
 
Además transmitió la convicción de que el pueblo de Venezuela resolverá sus problemas internos, mediante sus instituciones, sin ningún tipo de intervención militar o de otra índole. Añadió que se debe respetar el derecho de los pueblos de elegir sus gobiernos, de conformidad con sus propios deseos e intereses, aunque no sean del agrado de los países imperiales o hegemónicos.
 
En varias partes de su intervención recordó el legado de Fidel Castro y de Hugo Chávez, quienes transmitieron una visión futurista, generando iniciativas que pudieron beneficiar a los desposeídos del continente. «Hay cosas sencillas que podemos implementar. Fidel nos enseñó con el proceso construido en Cuba y tuvo éxito, porque era un visionario y era práctico», aseveró Gonsalves.
 
Igualmente propuso encontrar fórmulas para unificar los recursos que posee cada país que puedan funcionar para el bien común de los demás, como es el caso de la transportación marítima y aérea. «No podemos comerciar en bienes y servicios hasta que mejoremos esos renglones.
 
«Actualmente es imposible ampliar los intercambios porque hay desconexión  entre las áreas geográficas, ello influye en la separación entre lo político y lo económico», por tanto llamó a que cada gobierno de la organización ponga a disposición de otros los bienes que puedan intercambiar.
 
«Debemos buscar algunos vínculos sustantivos y unir nuestras mentes. Debemos informar de los recursos a utilizar eficientemente, principalmente los barcos y aviones», agregó el mandatario granadino y agradeció que pueda producirse un consenso para una posible candidatura de esa nación caribeña como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la onu.
 
EL CAPITALISMO NO CONCIBE LA SOLIDARIDAD
 
Por su parte, la intervención del embajador haitiano Lesly Luis Merino se enfocó en agradecer a Cuba y Venezuela por la ayuda desinteresada brindada a su país, después del terremoto ocurrido en enero del 2010 y para combatir la grave epidemia de cólera que azotó a esa población.

«En Haití nunca hemos visto una cooperación tan maravillosa para el pueblo. Con ella hemos realizado programas que benefician al pueblo haitiano», enfatizó el diplomático.
 
Entretanto, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, hizo un recuento de la historia de los grandes conflictos de la humanidad ocasionados por el egoísmo del capitalismo, que no concibe el significado de la palabra solidaridad. «Este encuentro, en el aniversario 14 del alba, nos trae lo que es un valor que ha estado presente en la lucha de los pueblos a lo largo de la historia de la humanidad, luchando por la libertad y la justicia, que en definitiva es una lucha por la paz», recalcó el mandatario nicaragüense.
 
Recordó que el principio de la solidaridad está presente en todas las etapas heroicas de la humanidad, incluso en las batallas de los gladiadores en la antigua Roma, y mencionó que en estos tiempos en que no ha desaparecido la esclavitud y se impone la tiranía del capitalismo global continuarán levantándose las prácticas de los pueblos de extender y recibir ayuda.
 
«El capitalismo no cree en la solidaridad, es por naturaleza egoísta. En esa actitud egoísta hace lo que sea para acaparar, dominar y expandirse. Incluso se matan entre ellos», apuntó el mandatario, quien añadió que ante esa actitud globalizada solo es posible la cohesión militante de las organizaciones, partidos y gobiernos.
 
Ortega Saavedra denunció que todas las políticas intervencionistas contra Venezuela, Bolivia y Cuba son actos criminales de lesa humanidad y en particular mencionó el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, a pesar de las resoluciones aprobadas por la inmensa mayoría de los miembros de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que demandan la suspensión de esa unilateral política.
 
Manifestó que la celebración de esta cumbre ratifica los valores solidarios emanados desde el continente a lo largo de los años de lucha de los pueblos por la justicia y la paz. En tal sentido calificó a Fidel Castro y a Hugo Chávez como los espartacos de nuestros tiempos frente a la esclavitud que impone el capitalismo moderno global.
 
Tras destacar el valor de la soberanía y el respeto al Derecho Internacional, significó que las acciones y ataques lanzados en el mundo por ee. uu. y sus aliados no tienen ningún sostén jurídico legal y son crímenes de guerra, atentan contra la estabilidad y la seguridad para construir un mundo de paz.
 
«Y cuando se lanzan en estos tiempos a una política abiertamente injerencista e intervencionista contra, por ejemplo, Venezuela, estamos viendo una acción de prepotencia y de irrespeto al Derecho Internacional por parte de una potencia que no puede coexistir, cohabitar con el Derecho Internacional, y que incluso pasa por encima de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la onu», advirtió el mandatario nicaragüense.
 
Se refirió a la utilización por Washington de la tristemente célebre Organización de Estados Americanos (oea) para amparar intervenciones militares en la región, como fue el caso de República Dominicana.  Indicó que las tropas norteamericanas fueron acompañadas por soldados del régimen dictatorial de Anastasio Somoza. Hizo referencia al golpe de estado propinado en Honduras a Manuel Zelaya: «ee. uu. no quiere entender que el mundo entró en fase de cambio multipolar y quiere seguir con el mundo unipolar, agudizándose las contradicciones incluso con sus propios aliados».
 
En otro momento de sus palabas señaló que el alba-tcp nació con el objetivo de luchar por la vida, y que a pesar de las arremetidas contra esa organización, el alba no se ha desintegrado, no se ha rendido, no se ha vendido, «y eso es lo que tiene desesperado al imperio norteamericano», sentenció.
 
«Donde han estado presentes Cuba y Venezuela han brindado solidaridad, no han estado para usurpar, anexionar u ocupar», agregó para cerrar su intervención diciendo: «Rendimos homenaje a esos dos grandes gladiadores de la paz y la justicia: Fidel y Chávez. También está Raúl y todo el pueblo cubano valiente y glorioso».
 
LOGROS DEL ALBA
 
Roossevelt Skerrit, primer ministro de la mancomunidad de Dominica, enfatizaba en su intervención acerca de los logros de este mecanismo de integración regional en sus 14 años de constituido, acicate para redoblar «los compromisos de seguir trabajando juntos para que cuando el batón pase a las futuras generaciones, dejemos una organización sólida. Se lo debemos a Fidel y a Chávez, a nuestros pueblos, no podemos permitir que el legado a la humanidad de estos dos grandes hombres se desvanezca».
 
Manifestó su acuerdo con los presidentes Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel de fortalecer el alba y la colaboración y solidaridad, pues en caso contrario corremos el riesgo de fracasar.
 
Había comenzado su intervención manifestando su respeto a la soberanía de Venezuela y el reconocimiento a la legitimidad del gobierno del presidente Nicolás Maduro, próximo a iniciar su segundo mandato en enero del venidero año.
 
Recordó que su nación pertenece al alba-tcp desde el 2006 y reiteró que no hay ninguna otra entidad comparable a este sistema de integración, en gran medida por la dirección visionaria de los mandatarios Fidel Castro y Hugo Chávez, quienes no solo velaron por el Caribe y América Latina, sino por todos los pueblos del mundo.
 
Esta institución se contrapone a otras entidades dedicadas a crear maquinaciones y socavar a los gobiernos progresistas y revolucionarios, negando la oportunidad económica del alba, la cual ha sido capaz no solo de soportar todos los ataques, sino también de trazar estrategias a favor de los marginados y oprimidos, de unir a un grupo de países latinoamericanos y del Caribe, subrayó.
 
Roossevelt destacó el trabajo de este sistema integracionista y de Petrocaribe, que va más allá de ser un mecanismo económico, sino también de fraternidad y solidaridad.
 
Contrapuso esos objetivos a los de la Organización de Estados Americanos, cuyos objetivos fundacionales hablan de fomentar la paz y el respeto por la soberanía de los países, sin embargo su actuación es totalmente contraria a esos enunciados y ejemplificó sus actuaciones en contra del gobierno y pueblo venezolanos y otras naciones como Dominica, Antigua y Barbuda, y San Vicente y las Granadinas, que han defendido la soberanía de la patria de Hugo Chávez  «no solo por amistad, sino además por cuestión moral y legal, y porque mañana nos puede pasar lo mismo.

Es una posición de principios y pienso que tenemos que ser muy cuidadosos para no temblar cuando alguien hable, que no cambiemos nuestras posiciones porque alguien nos grite o amenace», sentenció.
 
Nuestros predecesores, dijo, lucharon por la independencia y no podemos renunciar a eso porque alguien no está interesado en nuestro bienestar o porque digan que tenemos que ir por un camino específico.
 
LA PAZ ES NUESTRO MÁS IMPORTANTE PATRIMONIO
 
Con la sabiduría de sus ancestros y la experiencia al frente del Estado plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma  intervino para hacer reflexionar acerca de la importancia de mantener la paz o actuar para garantizarla sobre la base de la justicia social, lo cual no ocurre bajo el sistema capitalista.
 
Expresó que hoy los golpes de estado no son como hace medio siglo, ahora hay nuevas formas de intervencionismo y alertó sobre el papel disuasivo y desestabilizador que desempeñan los grandes medios de comunicación, y lo que llamó la guerra digital.
 
El alba-tcp es sinónimo de integración y liberación y nuestro patrimonio es la paz, tenemos mucha moral para defenderla con justicia social y si estas no existen, si no se respeta la equidad no hay paz, subrayó.
 
Igualmente se refirió al enfrentamiento a los ataques del imperialismo por los movimientos sociales y el pueblo organizado, quienes lo hacen «con mucha claridad ideológica y programática, basada en la soberanía económica, política, social y cultural».
 
Enfatizó acerca de la obligación de seguir avanzando en la liberación de los pueblos, legado que dejaron Fidel y Hugo al fundar el alba e hizo referencia al principio de solidaridad promulgado por el líder histórico de la Revolución Cubana, «quien nos enseñó a ser solidarios y una vez me dijo: “Evo, hay que compartir lo que tenemos, no las sobras”».
 
En ese sentido mencionó programas como el de la Misión Milagro, gracias al cual en Bolivia fueron operadas 700 000 personas de manera gratuita. «eso son políticas sociales, eso la gente no lo olvida».
 
Otro representante que expresó su apoyo al gobierno y pueblo venezolanos fue Peter Davis, ministro de Relaciones Exteriores de Granada. Reconoció la importancia de organismos integracionistas como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y el alba, y anunció que en breve se sumarán al banco de esta última institución.
 
Exhortó a garantizar que el alba continúe mejorando la vida de los caribeños.
 
Everly Paul, ministro de Relaciones Internacionales, Comercio e Integración de Antigua y Barbuda, aseveró que el alba representa la mayor esperanza para la paz mundial, y mencionó aspectos que vinculan los pronunciamientos en el encuentro de este viernes con la Declaración de Managua, durante la xlviii Reunión Ordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de la Integración Centroamericana en diciembre del 2016.
 
Entre ellos citó lo indispensable de la solidaridad para salvar obstáculos que limitan el desarrollo en este continente y la necesidad de seguir avanzando en cuanto a la integración.
 
Antes del alba casi no existían relaciones entre los países de América Latina y el Caribe, o se intentaron o no llevaron a nada, lo cual no ocurre ahora, cuando se palpa la ampliación del concepto de ideal latinoamericano, en lo cual se trabaja por primera vez mancomunadamente, subrayó.
 
Si bien reconoció que «nos hemos fortalecido contra los aliados del imperio, estamos siendo sitiados y amenazados por un terrorismo económico, mientras el alba declara que debe haber un orden mundial justo, con reconocimiento de soberanía e igualdad de los estados y de respeto mutuo, con lo cual nos declaramos partidarios».
 
Por su parte, Michael Powell, representante de San Cristóbal y Nieves, refirió que apoyan los esfuerzos de integración de la región, de ahí que desde hace cuatro años se hayan sumado al alba. Se manifestó en favor de la unidad y en continuar colaborando activamente.
Marciano Edgar Armaketo, embajador de Surinam en Cuba, agradeció la invitación para participar en este foro de intercambio de temas de interés mutuo, que permiten comprender mejor la situación política y los desafíos en la región, declarada como zona de paz en enero del 2014, durante la reunión de jefas y jefes de Estado y de Gobierno de la Celac.
 
Precisó que reuniones como la de este viernes permiten identificar soluciones concretas a favor de nuestros pueblos, y fomentar la solidaridad en función de ofrecerles mejor calidad de vida.
 
TRABAJAR POR UNANUEVA ARQUITECTURA FINANCIERA
 
El boliviano David Choquehuanca, secretario general del alba-tcp hizo una amplia reflexión acerca  de la necesidad de la paz, la integración y la soberanía, así como de dignificar nuestras identidades.
 
Fue otro de los oradores que mencionó a Fidel y a Chávez, quienes, aseguró, «nos señalaron el camino a seguir», por eso «el desafío que hoy tenemos es grande: consolidar los principios plasmados en los documentos del alba-tcp», organización que, aseguró, se convierte poco a poco en el alma y el espíritu de la integración, de la armonía, en el alma de la unidad.
 
Exhortó a trabajar por una nueva arquitectura financiera, porque funcionen el consejo de movimientos sociales y se consolide el consejo económico del alba, que se fortalezcan programas como la Misión Milagro, el de alfabetización, las acciones de solidaridad, la constitución de una verdadera estrategia comunicacional, que se reúnan los intelectuales del alba y los ministros de Comunicación, para discutir las estrategias de cómo enfrentar la mentira con la verdad.
 
Igualmente llamó a crear mecanismos de cooperación con otros países como Rusia, China e Irán, e informó que Turquía acreditó oficialmente a su embajador en Venezuela como su representante ante el alba y existe el interés de otros gobiernos, así como de otros movimientos sociales en Suiza y Alemania.

Evo Morales Ayma intervino para hacer reflexionar
acerca de la importancia de mantener la paz. Foto: Juvenal Balán