Cuando la Medicina es abrazo
Amarilis Noda y su hija Darlinys llegaron a Brasil, exactamente al estado de Río Grande del Sur, en mayo de este año. Esta era la primera misión de ambas, y estar juntas resultaba un bálsamo, tanto como volver, también juntas, a su tierra avileña.
De todo lo vivido, a Amarilis le quedará grabado, quizá para siempre, su último día de trabajo. «Los pacientes que ya sabían de su partida, más que a atenderse, como de costumbre, llegaban a la consulta con otro pedido: Doctora, ¿puedo darle un abrazo?».
Y a estas alturas, deben ser pocos los que duden sobre la elocuencia de dos manos tratando de asirse al milagro.
También su hija guarda una anécdota de cada día en medio de tanta población humilde, olvidada, lastre de una pobreza que empieza a ser más desde su regreso.
De todas las historias, prefiere contar la de aquel joven que llegó a sus manos en medio de la recuperación de 16 heridas de bala. «Cuando lo examiné todavía tenía 6 proyectiles en su cuerpo. Con mucho esfuerzo logramos sanarlo y, poco a poco, alejarlo de su adicción a las drogas. Su mamá, que siempre lo acompañaba a las consultas, no sabe bien cómo agradecerle a Cuba y a sus médicos. Ella hoy, simplemente, nos llora».
Y como ella, unos 75 000 habitantes han quedado allí sin atención sanitaria, pues el cuidado de esa población estaba en manos de Amarilis, su hija, y otro médico holguinero. Ninguno de los tres estará más.
Ya casi a su salida, camino a casa, Amarilis sigue hablando de la hospitalidad del pueblo brasileño, del cariño, del agradecimiento de las autoridades locales, y también del dolor, porque ya estaban obligados a cerrar, por falta de personal, el único hospital que les quedaba allí.
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Al recibimiento de los primeros 203 colaboradores acudió Joel Queipo, miembro del Comité Central del Partido, acompañado por otros funcionarios de Gobierno y del Ministerio de Salud Pública. Entretanto, los 217 profesionales que arribaron posteriormente fueron recibidos por Alpidio Alonso, ministro de Cultura y otros directivos del Partido y el Gobierno.
En sus palabras de bienvenida, el viceministro de Salud, Alfredo González Lorenzo, recordó que, como parte del Programa Más Médicos, nuestros profesionales asumieron las plazas no cubiertas por médicos brasileños, o de otras nacionalidades, en los lugares más difíciles, lo que indica su valor, capacidad para enfrentar adversidades, así como la preparación en lo profesional, lo ético y lo humano.