La integración latinoamericana y caribeña tiene en diciembre un mes de particular significación, que invita a resaltar el legado de unidad regional de los comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez, afirmó hoy aquí el embajador venezolano Rafael Ramírez.
 
En entrevista con Prensa Latina, el diplomático recordó el nacimiento de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), en diciembre de 2004, y la cumbre fundacional, en Caracas siete años después, de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
 
'El ALBA fue la vanguardia de ese objetivo, una creación de Fidel y de Chávez; ellos la pensaron y la diseñaron y así apuntamos hacia la Alianza', precisó el representante permanente venezolano ante la ONU, un testigo excepcional de los esfuerzos de los fallecidos líderes revolucionarios por la integración regional.
 
De acuerdo con Ramírez, esa semilla germinó, y le siguieron en 2005 Petrocaribe, en 2007 la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y en 2011 la Celac.
 
Sin lugar a dudas, los comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez fueron los grandes arquitectos de una nueva relación entre los países del área, que más allá de la integración perfiló la unidad, subrayó.
 
El diplomático comentó que los frutos de los sueños y los esfuerzos de ambos líderes, inspirados en próceres como Simón Bolívar y José Martí, están muy presentes.
 
Millones de latinoamericanos y caribeños han visto los beneficios en materia de salud, como la Operación Milagro para recuperar la visión, y de alfabetización.
 
Ramírez destacó la derrota del Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA) en noviembre de 2005 en Mar del Plata, donde los presidentes Chávez, Néstor Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva encabezaron la batalla 'para evitar la imposición por Estados Unidos de ese mecanismo de dominación perverso, que hubiese devastado nuestras economías'.
 
También tenemos la efectividad de la respuesta de la Unasur a los intentos de golpe de Estado en Bolivia, en 2008, y Ecuador, dos años después; y la protección mediante Petrocaribe a los hermanos países caribeños de las asimetrías del mercado petrolero mundial, sobre todo en una época de muy altos precios, dijo.
 
Para el embajador de Venezuela aquí, la integración regional impulsada por Fidel y Chávez constituye una respuesta de América Latina y el Caribe a la necesidad de construir un mundo multipolar, sobre la base de problemas, desafíos e intereses comunes.