El Concejo municipal de Turín otorgó hoy la ciudadanía honoraria de esa ciudad capital de la región de Piamonte al doctor Julio Guerra, jefe de la brigada médica cubana que ayudó a enfrentar allí la Covid-19.
 
El presidente del órgano municipal de control y dirección político-administrativo, Francisco Sicari, y la alcaldesa, Chiara Appendino, encabezaron la ceremonia de entrega del título honorífico en la cual participaron, además, otras autoridades y representantes de instituciones y organizaciones locales.
 
Presentes también colegas italianos que laboraron con los cubanos, el embajador de la isla en Italia, José Carlos Rodríguez Ruiz, el ministro consejero, Jorge Luis Alfonzo, y el jefe de la sección consular de la misión diplomática en Roma, Félix Lorenzo.
 
El agradecimiento a Cuba y los miembros de la Brigada Henry Reeve, junto con el reconocimiento a su calidad profesional y humana, generosidad y altruismo fue el denominador común en las intervenciones de Sicari, Appendino y los profesionales italianos de la salud presentes.
 
Por su parte, el embajador destacó la relación forjada entre los profesionales de la salud de ambos países y subrayó el sentido de responsabilidad y la cosmovisión, compartida por todos los cubanos sobre 'lo que debemos ofrecer al mundo', inspirados en el concepto proclamado por José Martí de que patria es humanidad.

El Concejo concedió el reconocimiento al médico cubano de 44 años especialista en Medicina General Integral y Nefrología, 'en virtud de los méritos alcanzados, el coraje, altruismo, humanidad demostrados en el importante esfuerzo prodigado a la población turinesa y de toda Italia'.
 
En estos casi tres meses de labor en Turín, señaló el texto del acuerdo, el doctor Guerra Izquierdo dirigió su equipo con voluntad, profesionalidad y absoluta dedicación, además de una extraordinaria humanidad señalada repetidamente en las cartas de agradecimiento escritas por pacientes dados de alta.
 
La disposición añadió que los miembros de la Brigada Henry Reeve realizaron, gracias al constante compromiso y dedicación, más de cuatro mil 300 prestaciones, y desarrollaron una encomiable relación con médicos y paramédicos italianos, voluntarios y todo el personal sanitario, aportando competencia y experiencia.
 
Al recibir el galardón, Guerra expresó el orgullo 'de representar en este acto a un grupo de médicos y enfermeros cubanos con una alta capacidad profesional y una vocación humanista puesta a prueba en diferentes escenarios del mundo', 14 de los cuales combatieron el virus del Ébola en tres naciones de África occidental.
 
Esta distinción otorgada a la Brigada Henry Reeve a través de mi persona, apuntó, simboliza la profunda amistad sellada en estos días trágicos y sin embargo hermosos entre Italia y Cuba, entre Piamonte y Cuba, entre Turín y Cuba.
 
La víspera, la presidencia del Consejo Regional de Piamonte confirió una condecoración por méritos civiles a los 38 colaboradores cubanos de la salud quienes regresarán a casa en los próximos días con la satisfacción del deber cumplido.