Cuba cumple hoy con todos los protocolos para el tratamiento del cáncer infanto-juvenil, a pesar de las trabas impuestas por el gobierno de Estados Unidos para impedir la entrada de medicamentos a la Isla.
 
Así lo confirmó en Ciego de Ávila, el doctor Juan Carlos Arranz, durante el Encuentro de Oncología Pediátrica, que congregó a especialistas de
esta y otras provincias de la región centro-oriental del país.
 
La cita devino en fructífero intercambio para afrontar ese padecimiento que afecta a un gran número de niños y adolescentes cubanos.
 
Si bien son muy costosas y se dificulta la compra de medicinas en el exterior, a ningún infante en Cuba le han faltado los fármacos cuando lo
requieren, pues el sistema de salud garantiza todo el tratamiento a los niños enfermos de forma gratuita, apuntó el galeno.
 
Los especialistas coincidieron en que la batalla contra el cáncer se vence con un diagnóstico precoz para identificar los factores de riesgos
y un cambio de los estilos de vida, en aras de evitar el progreso de la enfermedad.
 
Asimismo reconocieron el proyecto Por quien merece amor, desarrollado en la provincia avileña, cuyo propósito es promover educación entre los familiares y la población para fortalecer el programa contra el cáncer infanto-juvenil y mejorarle la salud a los enfermos.
 
La doctora Norma Pérez, experta en oncología pediátrica en Ciego de Ávila, señaló a Prensa Latina que el programa involucra a estudiantes de Medicina, especialistas de la rama, pacientes y sus familiares con el propósito de generar alegría a los pequeños enfermos y a sus familiares.
 
Agregó que aunque se dificultan los medicamentos, debido al bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, médicos y trabajadores de la salud pública se empeñan en lograr una alta sobrevivencia en los enfermos y mejorar la calidad de sus vidas.
 
El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba no solo perjudica a la salud pública, sino que frena el
desarrollo de económico-social de la nación y constituye una violación de los derechos humanos del pueblo cubano.