Oriundo de Pinar del Río, la tierra más occidental de la Isla, Eliodoro Pérez Reyes tiene una licenciatura de Educación en Agronomía y más de una década de experiencia como dirigente político y estudiantil. Considera que el mayor compromiso de la juventud cubana está en inmortalizar el pensamiento de Fidel Castro.
 
— ¿De qué manera está presente Fidel en la juventud cubana?
 
— Durante la historia de la Revolución, han sido infinitas las muestras de admiración, cariño y respeto de los jóvenes cubanos por Fidel. Recuerdo un mensaje que le mandamos en el 2007 y en su respuesta Fidel dijo que estaba convencido de que la juventud cubana no le fallaría. Hablo de ese momento especial porque creo que así ha sido y será. Siempre hemos respondido a su llamado, incluso hoy, que no está físicamente.
 
«En noviembre del 2016, cuando recibimos la noticia de su desaparición física, el mundo tuvo la mayor muestra de amor de la juventud por Fidel. Los jóvenes se movilizaron solos entonces. Había que ver la escalinata de la Universidad de La Habana y otros importantes espacios públicos llenos de jóvenes que lloraban y llevaban una foto suya, demostrando el dolor por su partida.
 
«Sin embargo, Fidel vive en nosotros y tenemos la responsabilidad de inmortalizar su pensamiento. Eso es lo más importante. Sabíamos que naturalmente él tendría que partir un día, pero sabíamos también que tendríamos que no dejarlo morir. Fidel ha quedado en nosotros. No hay un lugar donde no se hable de él, donde no se recuerde lo que fue y nos legó. Ese es el líder indiscutible de nuestra Revolución, aunque no solo él hiciera la Revolución. Es y será nuestro Comandante en Jefe».
 
— ¿Qué han heredado los jóvenes de Fidel como ser humano?
 
— Su sacrificio e incondicionalidad, así como su capacidad para confiar en que el ser humano puede hacer lo que se proponga. Además, su ejemplo como líder natural y hombre culto, capaz de trascender en Cuba y el mundo.
 
«Lo que más nos enorgullece es que siempre haya creído en nosotros, nos atendiera de cerca y nos hablara claramente. Esa es una de las cosas que podremos transmitirle a nuestros hijos, nietos, a las generaciones que físicamente no lo conocerán, que sabrán de él a través de la historia, la misma historia que debemos continuar escribiendo nosotros».
 
El otrora primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en su provincia natal, Pinar del Río, y actual jefe de la sección ideológica del Comité Nacional de esa organización, defiende que de «la firmeza ideológica depende el preservar las conquistas de la Revolución Cubana, las conquistas que hoy disfrutamos y a las cuales debemos darle continuidad».
 
Al recordar que hoy existen en la Mayor de las Antillas unos 2 900 000 jóvenes entre 14 y 35 años de edad, de los que 360 000 son miembros de la juventud comunista, el funcionario deja claro que «la UJC es responsable de la conducción política de los procesos que tienen que ver con todos los niños, adolescentes y jóvenes, no solo con sus militantes».
 
 
 
— ¿En qué se centra el trabajo de la UJC actualmente?
 
— En el X Congreso de la UJC, celebrado en julio del 2015, se tomaron 59 acuerdos y alrededor del 81% de ellos fueron netamente ideológicos. En medio de la actualización del modelo económico cubano, la UJC se centra esencialmente en la organización de la juventud en la Isla.
 
«Trazamos la línea político-ideológica que define el sistema de preparación de nuestros cuadros, dirigentes de organizaciones juveniles y movimientos estudiantiles. Además, atendemos el Movimiento Juvenil Martiano, las brigadas técnico-juveniles y la de Instructores de Arte José Martí, la Asociación Hermanos Saíz y las complejidades que en el orden ideológico puedan darse en el país».
 
— ¿Cómo han asumido la atención a los jóvenes que trabajan en el sector no estatal?
 
— No se nos ha quedado detrás el apoyo a los jóvenes cuentapropistas. En el 2016, nos reunimos con los trabajadores del sector no estatal en los diferentes territorios del país, en un proceso que derivó de los acuerdos del X Congreso y dejó claro qué debíamos hacer para transformar el escenario en el que se desempeñan esos jóvenes.
 
«Tenemos muchos militantes de la UJC en el sector no estatal y cuentapropistas que integran comités municipales o provinciales de la UJC, pero también muchos que no son militantes y a los que tratamos de llegar mediante la Oficina Nacional de Administración Tributaria, la Central de Trabajadores de Cuba, etc.
 
«Aunque todavía hay muchísimas insatisfacciones porque no logramos que participen masivamente en todos los escenarios con que cuenta la juventud, trabajamos para integrarlos. Ellos tienen un peso real y positivo en nuestra economía y sus preocupaciones son procesadas y analizadas por un sistema único de información que tiene nuestro organismo».
 
— ¿Qué valores potencian en cualquier niño, adolescente o joven?
 
— Hay valores esenciales que debemos mantener fortalecidos siempre: la responsabilidad, la laboriosidad y el antimperialismo. Son claves que, como jóvenes cubanos y como organización, no debemos perder de vista. Ponderamos la unidad, que según nos ha demostrado la historia, es lo que permite vencer.
 
— ¿Qué se han propuesto para conmemorar el aniversario 91 del cumpleaños de Fidel, el primero en que no estará físicamente?
 
— El cumpleaños de Fidel se une con otras conmemoraciones, como es la del Día Internacional de la Juventud, pero este año tenemos un doble sentimiento de alegría y tristeza porque lo pasaremos sin Fidel, pero con la felicidad de tenerlo presente. Los niños, adolescentes y jóvenes cubanos no renunciamos a celebrar su día, pero lo haremos como un encuentro con la historia, a través de conversatorios, diálogos generacionales, rutas, visitas y acampadas a lugares históricos. Así, se le recordará en diversos puntos del país. Ese es el caso de Holguín, que acogerá una tradicional acampada a Birán, donde nació el Comandante.
 
«También coincide el 13 de agosto con el aniversario 60 del asesinato de los jóvenes hermanos Saíz, revolucionarios víctimas de la tiranía batistiana. Esa jornada cerrará con la acostumbrada escalada al Pico Turquino, que organiza la Asociación Hermanos Saíz, así como un amplio programa de actividades en las provincias de Santiago de Cuba, Granma y Pinar del Río.
 
«Hemos organizado un gran concierto de Pablo FG y los finalistas del concurso Sonando en Cuba, que será este 11 de agosto. Se trata de un concierto que se ha hecho en todas las provincias del país y que cerrará en La Habana. El 12 se hará la premiación del concurso de fotografía Jóvenes en el lente, que auspicia el Centro de Estudios sobre la Juventud».