La representante permanente de Cuba ante la ONU, Anayansi Rodríguez, afirmó hoy que nunca deben tomarse las operaciones de mantenimiento de paz como sustituto para abordar y solucionar las causas profundas de los conflictos.
 
De hecho -resaltó-, los llamados cascos azules deben facilitar la creación de un marco de seguridad que permita aplicar una estrategia a largo plazo hacia un desarrollo sostenible.
 
Para mejorar la seguridad del personal de las operaciones de mantenimiento de paz se necesitan aplicar medidas que sean consultadas con los Estados Miembros y con la debida consideración de los órganos pertinentes, como la Asamblea General, recordó la diplomática cubana.
 
El establecimiento y despliegue de ese equipo debe realizarse, además, bajo lo establecido en la Carta de la ONU, especialmente lo referido al respeto a la soberanía, la integridad territorial, la independencia política de los Estados, y la no intervención en sus asuntos internos, subrayó.
 
Justo en el contexto actual cuando aumentan los riesgos de las operaciones de mantenimiento de paz, resulta más importante que nunca respetar esos preceptos, recalcó Rodríguez.
 
La diplomática cubana también abogó por el cumplimiento de los principios básicos establecidos para el desarrollo de las operaciones de paz, tales como el consentimiento de las partes, la imparcialidad y el no uso de la fuerza, excepto en casos de legítima defensa.
 
Cuba lamentó las pérdidas de vidas de cascos azules y expresó preocupación por el incremento del número de bajas de ese personal durante el año pasado.
 
Pero la representación de la isla no está convencida de que la aprobación por el Consejo de Seguridad de operaciones que contemplen un mayor uso de la fuerza puedan contribuir a mejorar la eficacia de las misiones ni su seguridad, indicó la embajadora.
 
Según dijo, un mayor uso de la fuerza tiene implicaciones políticas y conllevaría a situaciones imprevistas, entre ellas, la de incrementar el riesgo de amenazas y ataques contra el personal de la ONU.
 
'Por su composición y carácter, las fuerzas de paz no están destinadas ni equipadas para operaciones de lucha contra el terrorismo.'
 
Asimismo, Rodríguez reiteró que los esfuerzos en materia de protección de los civiles deben concebirse en apoyo a, y no como sustituto de, los esfuerzos de las autoridades nacionales.
 
Este miércoles se realizó un debate abierto de alto nivel en el Consejo de Seguridad bajo el tema 'Acción colectiva para mejorar las operaciones de mantenimiento de paz de la ONU'.