“Como tantos otros de mis compatriotas tuve la suerte de nacer en la Cuba de Fidel, de modo que él ha estado presente durante toda mi vida y ha sido siempre mi máxima inspiración como revolucionario, como combatiente internacionalista en Angola, como antiterrorista infiltrado en los Estados Unidos, y sencillamente como ser humano”.
 
“Fidel nos enseñó, entre otras cosas, a pensar en este planeta como nuestra casa, en la humanidad como nuestra gran familia, y a hacer nuestros los problemas y sufrimientos de los demás. Durante los años de prisión Fidel nos ayudó a resistir con sus enseñanzas, con su ejemplo y también con su apoyo. Además de su histórico “Volverán!”, conservamos un mensaje de su puño y letra en el que nos decía: “René, Antonio, Gerardo, Fernando, Ramón: Venceremos la monstruosa injusticia!”. ¡Y así fue! El regreso de Los Cinco a Cuba fue una victoria de todos, pero muy especialmente fue una victoria de Fidel”.
 
“Todavía uno no se acostumbra a que Fidel no esté físicamente entre nosotros, porque su presencia se siente en todo momento. No ha sido un año de lamentaciones sino de reafirmación revolucionaria. Un año en el que nuestro pueblo una vez más ha echado por tierra los planes, las elucubraciones, y la propaganda del imperio, y ha demostrado su apoyo a la Revolución y a las ideas de Fidel”.