16 de noviembre de 1958. Fidel se dirige hacia la zona de Guisa para dirigir el ataque al cuartel de ese poblado, situado cerca de la ciudad de Bayamo.
 
Este día de 1961, ofrece declaraciones en Radio Habana Cuba acerca de la ruptura de relaciones con el gobierno de Rómulo Betancourt, entonces presidente de Venezuela, que se había puesto al servicio de los que atacaban a Cuba.
 
“Nuestra pequeña Patria, con su razón, y con la solidaridad de nuestros hermanos de raza, y de intereses, y de lenguas, sabrá resistir”.  
 
En esta fecha de 1971, Fidel continúa su recorrido por Chile y conversa con los obreros de la Empresa Pesquera Tarapacá. S. A. Visita los astilleros del puerto y el buque pesquero cubano Jagua, fondeado en Iquique.
 
También intercambia con los obreros en la fábrica de baterías Hitachi y habla en un acto de masas en la Plaza Prat, en Iquique. Destaca:
 
“La obra de una revolución no se mide sólo en piedras, no se mide sólo en fábricas. Se mide en eso, pero se mide esencialmente en los factores morales y humanos”.  

 
Un día como hoy en 1996, Fidel llega a Roma, Italia, y habla en la Cumbre Mundial sobre alimentación organizada por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO. Expresa que el hambre es hija de la distribución desigual de las riquezas:
 
“Son el capitalismo, el neoliberalismo, las leyes de un mercado salvaje, la deuda externa, el subdesarrollo, el intercambio desigual, los que matan a tantas personas en el mundo”.
 
“Las campanas que doblan hoy por los que mueren de hambre cada día, doblarán mañana por la humanidad entera si no quiso, no supo o no pudo ser suficientemente sabia para salvarse a sí misma”.
 
En 1999, Fidel pronuncia un discurso en la inauguración de la IX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en el Palacio de Convenciones de La Habana.
 
“La Cumbre no es de Cuba ni para honrar a Cuba; es por encima de todo la Cumbre de los Jefes de Estado y de Gobierno que nos visitan. Nuestro deber es crear las condiciones óptimas para su desarrollo”.
 
Este mismo día de 1999, clausura la IX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno de La Habana. Valora de exitoso el cónclave y manifiesta la esperanza de que cada cumbre será en el futuro mejor.
 
“…Confío en el porvenir”.

 
En el 2007, Fidel elabora su reflexión En honor a Sergio del Valle. Resalta la trascendencia de la vida y labor del fallecido médico, Comandante y dirigente revolucionario.
 
“Tus lecciones y tu ejemplo perdurarán. Rindo tributo a tu memoria”.
 
En el 2008, Fidel redacta la reflexión El parto de los montes. Muestra algunos pasajes de la recién concluida cumbre del G-20 realizada en Washington.
 
Denuncia el deseo del imperio de lograr más poder hegemónico a costo de poner en riesgo el futuro de la humanidad y sobre la declaración final del encuentro subraya:
 
“Desde mi punto de vista, no fueron rozados ni con el pétalo de una flor los privilegios del imperio. Si se dispone de la paciencia necesaria para leerlo desde el principio hasta el final, podrá apreciarse cómo se trata simplemente de una apelación piadosa a la ética del país más poderoso del planeta, tecnológica y militarmente, en la época de la globalización de la economía, como quienes ruegan al lobo que no se devore a la Caperucita Roja”.