¿Cómo no sentirlos hoy presentes en todas partes, juntos como lo hicieron para conquistar una patria nueva que los ha visto entregar todas sus energías a la felicidad del pueblo?
 
¿Cómo no verlos codo a codo en las marchas de este Primero de Mayo, ellos que han elevado el valor del trabajo, como el motor impulsor de nuestra prosperidad y bienestar y han sido paladines de la unidad que es el el secreto de la fortaleza y la resistencia de los cubanos ante las más duras pruebas?
 
Porque Fidel sigue viviendo en cada uno de los agradecidos que lo continuaremos acompañando,  e inspirados en sus hazañas  construiremos una nación próspera  con el esfuerzo de todos, defenderemos los valores que nos inculcó al precio de cualquier sacrificio y enarbolando como divisas aquellas que él señaló en su concepto de Revolución:  la modestia, el desinterés el altruismo, la solidaridad y el heroísmo..
 
Porque Raúl ha mantenido en alto las banderas de lucha en condiciones difíciles y ha reiterado a los que reclaman transformaciones en nuestra patria que haremos cambios sí, pero siempre para un mejor socialismo.
 
Porque el Che, que perdimos  físicamente hace ya medio siglo, permanece entre nosotros, vivo como no lo querían sus enemigos, entregando su ejemplo de constructor, de ministro-trabajador, de hombre capaz de demostrar con hechos sus ideas.
 
Fidel, Raúl y el Che  están  hoy junto a  los trabajadores, a su pueblo, a los jóvenes que en marcha compacta proclaman que en sus manos está seguro el futuro.