Al triunfo de la Revolución, Fidel era el líder reconocido por el pueblo, pero no ocupó cargos de Gobierno hasta su nombramiento como Primer Ministro, el 16 de febrero de 1959, cuando era presidente provisional Manuel Urrutia Lleó. Cinco meses después, el 16 de julio, Fidel renunció para denunciar los obstáculos que ponía el Presidente a la marcha de la Revolución. Este hecho provocó una gran reacción popular que llevó a la renuncia de Urrutia el día 18, y su sustitución por Osvaldo Dorticós Torrado. La presión del pueblo determinó que el 26 de julio, en acto conmemorativo, Fidel retomara el cargo de Primer Ministro. En 1976, a partir de la vigencia de la Constitución aprobada, se inició el proceso electoral y se llegó a la inauguración de la Asamblea del Poder Popular. Esto último ocurrió el 2 de diciembre de ese año. Ese fue el momento en que Fidel fue electo Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, responsabilidad que asumió junto con la condición de Primer Secretario del PCC.