Conversaciones con Fidel Castro: Los Peligros de una Guerra Nuclear
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Entre el 12 y el 15 de octubre de 2010 el reconocido académico canadiense Michel Chossudovsky sostuvo amplias y fructíferas conversaciones con el Comandante en Jefe Fidel Castro relacionadas con los peligros de una guerra nuclear, la crisis económica mundial y el carácter del Nuevo Orden Mundial. Dichas reuniones dieron lugar a una entrevista sobre temas diversos.
Michel Chossudovsky.—Estoy muy honrado de tener esta oportunidad de intercambiar, de tener esta conversación sobre cuestiones que son tan fundamentales, que afectan la sociedad humana en su conjunto. La noción que usted ha presentado en sus últimos textos de amenaza al Homo sapiens, me parece fundamental ¿Cuál es esa amenaza, el peligro de guerra nuclear y la amenaza a los seres humanos, al Homo sapiens?
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Desde hace bastante tiempo —yo diría que años—, pero especialmente desde hace varios meses, empecé a preocuparme sobre la inminencia de una peligrosa y probable guerra que rápidamente se tornaría nuclear.
Antes había concentrado los esfuerzos en el análisis del sistema capitalista en general, los métodos que la tiranía imperial ha impuesto a la humanidad. Estados Unidos aplica al mundo las violaciones de los derechos más elementales.
Durante la guerra fría no se hablaba de la guerra, ni se hablaba de las armas nucleares; se hablaba de una aparente paz, es decir, estaba garantizado entre la URSS y Estados Unidos el famoso MAD, la "destrucción mutua asegurada". Parecía que el mundo iba a disfrutar las delicias de una paz prolongada por tiempo ilimitado.
Michel Chossudovsky.—Esa noción de "destrucción mutua" se acabó con la guerra fría y después se reformuló la doctrina nuclear, porque en realidad nunca pensamos en una guerra nuclear durante la guerra fría. Bueno, evidentemente había un peligro —como lo dijo incluso Robert McNamara en una época. Pero después de la guerra fría se empezó a reformular la doctrina nuclear, y, en particular, después del 11 de septiembre 2001.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Usted me preguntó cuándo es que comenzamos a darnos cuenta del inminente peligro de guerra nuclear, y esto se inicia en el período que le dije, hace apenas seis meses; sobre todo, una de las cosas que más nos llamó la atención sobre tal peligro de guerra, fue el hundimiento del Cheonan en una maniobra militar. Era el buque insigne de la armada sudcoreana, sumamente sofisticado. Fue en aquellos días cuando nosotros encontramos en Global Research, el artículo del periodista que ofrecía una información clara y verdaderamente coherente del hundimiento del Cheonan, que no podía ser obra de un submarino de más de 60 años fabricado en la URSS, con vieja tecnología, que no necesitaba equipos sofisticados para detectarlo por el Cheonan, en una maniobra conjunta con las más modernas naves de Estados Unidos.
La provocación contra la República Democrática de Corea se sumaba a nuestras preocupaciones con relación a una agresión a Irán, que venían de atrás. Estábamos siguiendo de cerca el proceso político de ese país. Conocíamos perfectamente lo ocurrido en la década del 50 cuando Irán nacionalizó a las propiedades de la British Petroleum en Irán, cuando aquello se llamaba Anglo Persian Oil Company.
Las amenazas contra Irán, a mi juicio, se vuelven inminentes para mí, con la Resolución 1929 del 9 de Junio 2010, en que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condena a Irán por las investigaciones que lleva y la producción de pequeñas cantidades de uranio enriquecido al 20%, y acusándola de constituir una amenaza para el mundo. En esa reunión se conocen las posiciones de cada miembro del Consejo de Seguridad: por 12 votos a favor, entre ellos los 5 con derecho a veto; 1 abstención, y 2 en contra, que fueron Brasil y Turquía. Después que se adopta esa resolución, la más agresiva de todas, casi de inmediato cruzan por el Canal de Suez un portaaviones de Estados Unidos en un grupo de combate, un submarino nuclear con la cooperación del gobierno egipcio; unidades navales de Israel se suman destino al Golfo Pérsico y los mares cercanos a Irán.
La sanción, impuesta por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN a Irán, es absolutamente abusiva e injusta. No puedo comprender la razón por las cuales Rusia y China no vetaron la peligrosa Resolución 1929 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, a mi juicio, eso ha complicado tremendamente la situación política y pone al mundo al borde de una guerra.
Recordé los antecedentes de los ataques israelitas a los centros de investigaciones nucleares árabes. Primero atacaron y destruyeron el de Iraq en junio de 1981, no le pidieron permiso a nadie, no hablaron con nadie, los atacaron y los iraquíes tuvieron que soportar el golpe.
En el año 2007 volvieron a repetir esa operación contra un Centro de Investigación que estaba construyendo Siria. Hay algo en ese episodio que yo realmente no comprendo bien: para mí no está clara la táctica, lo que sea, o las razones por las que Siria no denunció el ataque israelí a ese Centro de Investigación, en el que indiscutiblemente hacían algo, trabajando en algo que como se conoce recibían la colaboración de Corea del Norte, es legal, no cometían ninguna falta.
Yo lo digo aquí con toda franqueza que no comprendo por qué no se denunció, porque habría sido, a mi juicio, importante denunciar eso, son dos antecedentes muy importantes.
Hay muchas más razones, a mi juicio, para pensar que trataran de hacer lo mismo con Irán: destruir sus centros de investigación, o a los Centros de Producción Energética de ese país. Como se sabe, el residuo del uso del uranio en la producción eléctrica es materia prima del plutonio.
Michel Chossudovsky.—Es cierto que esa Resolución del Consejo de Seguridad en cierta forma está anulando el programa de cooperación militar que Rusia y China tienen con Irán, en particular Rusia tiene cooperación en el Sistema de Defensa Aérea con su sistema S-300.
Yo me acuerdo que justo después de la decisión del Consejo de Seguridad, con el aval de China y Rusia, el Ministro de Asuntos Exteriores de Rusia dice: "Bueno, no hemos aprobado esa Resolución y eso no va a invalidar nuestra cooperación militar con Irán", eso fue en junio 2010; pero unos meses después, el gobierno de Moscú confirmó que se iba a congelar esa cooperación militar, de tal forma que Irán ahora está en una situación tremendamente grave, porque necesita la tecnología rusa para mantener su seguridad, digamos, su defensa aérea.
Pero yo creo que las amenazas a Rusia y a China tienen por objetivo que estos dos países no se metan en la cuestión de Irán. Es decir que si hay una guerra con Irán, los demás poderes, que son China y Rusia, no van a intervenir de ninguna manera, congelan su cooperación militar con Irán, y, por lo tanto, esto es una manera para Estados Unidos y la OTAN de extender la guerra en el Medio Oriente sin que haya una confrontación con China y Rusia, y yo creo que esto es un poco el escenario ahora.
Las amenazas a Rusia y China son múltiples en distintas fronteras. El hecho de que las fronteras de China están militarizadas, el mar del sur de China, el mar Amarillo, la frontera con Afganistán, el estrecho de Taiwán también, es en cierta forma una amenaza para disuadir a China y Rusia de desempeñar un papel de potencia en la geopolítica mundial, y preparar el terreno y el consenso, incluso, para una guerra a Irán, que ocurre bajo condiciones de debilitamiento del sistema de defensa aérea; hay una expresión en inglés que se dice un pato sentado —a sitting duck—, que Irán es un pato sentado desde el punto de vista de sus posibilidades de defenderse a nivel del sistema de defensa aérea.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—En mi modesta y sincera opinión esa Resolución debió ser vetada porque, a mi juicio, ha complicado todo en varios sentidos.
En un sentido militar, por lo que usted explica con relación, por ejemplo, a que había el compromiso y se había hecho un contrato para el suministro de los S-300 a Irán, son armas antiaéreas muy eficientes, en primer lugar.
Hay otras cosas que se relacionan con los suministros de combustible, que son muy importantes para China, porque es el país que más crece económicamente, su creciente economía genera mayor demanda de petróleo y de gas. Aunque existen acuerdos con Rusia para los suministros de petróleo y gas, desarrollan también la energía eólica y otras formas de energía renovable, poseen enormes reservas de carbón, la energía nuclear no crecerá mucho, ascenderá solo a un 5% durante muchos años; es decir, la necesidad de gas y petróleo de la economía China es muy grande, y no concibo, realmente, cómo se podrá obtener esa energía y a qué precio si el país donde tienen importantes inversiones es destruido por Estados Unidos. Pero el riesgo peor es una guerra de ese tipo en Irán. Irán es un país musulmán que posee millones de combatientes entrenados y fuertemente motivados.
Hay decenas de millones de personas que están bajo la instrucción, siendo educados políticamente y entrenados, hombres y mujeres, millones de combatientes entrenados y decididos a morir. Son gente que no se van a intimidar y que a la fuerza no los van a hacer cambiar. Por otro lado están los afganos —están siendo asesinados por los aviones sin piloto—, estarían paquistaníes, iraquíes, que han visto morir de uno a dos millones de compatriotas como consecuencia de la guerra antiterrorista inventada por Bush. No se puede ganar una guerra contra el mundo musulmán, es una locura insólita.
Michel Chossudovsky.—Es cierto, las fuerzas convencionales de Irán son tremendas. Ellos pueden movilizar de un día a otro varios millones de efectivos militares y están en la frontera con Iraq, están en la frontera con Afganistán, y aun cuando haya una guerra de Blitzkrieg, Estados Unidos no puede evitar una guerra convencional muy cerca de sus bases militares en esa región.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Pero es que perdería esa guerra convencional. El problema es que nadie puede ganar una guerra convencional contra millones de gente, no van a concentrar en un lugar a una multitud para que los norteamericanos los maten, todo un país.
Bueno, yo fui guerrillero y recuerdo que tuve que pensar mucho cómo usar las fuerzas que teníamos y nunca habría cometido el error de concentrar, porque mientras más concentradas estén las fuerzas mayores serán las bajas que ocasionen las armas de destrucción masiva.
Michel Chossudovsky.—Usted lo ha mencionado anteriormente, que era muy importante la cuestión, que en la decisión de China y Rusia en el Consejo de Seguridad, su apoyo a la Resolución 1929, el daño es para ellos porque, primero, Rusia no puede exportar armas, de tal forma que la principal entrada de divisas a Rusia ya está congelada. Irán era uno de los principales clientes o compradores de armas rusas, y eso era una entrada de divisas importante que sostiene a la economía de consumo y las necesidades de la población.
Y, por otro lado, China necesita acceso a fuentes de energía, que usted ha mencionado. En realidad el hecho de que China y Rusia hayan aceptado el consenso en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas es como decir: "Aceptamos que maten nuestra economía, en cierta forma, a nuestros convenios comerciales que tenemos con Irán..." Esto es muy grave, porque no es solamente el daño para Irán, es el daño para estos dos países, y yo supongo —aunque no soy político— que debe haber divisiones tremendas dentro del liderazgo, tanto en Rusia como en China, para que eso acontezca, para que Rusia acepte no expresar su veto en el Consejo de Seguridad.
A mí me han dicho, estuve conversando también con periodistas rusas, que eso no era un consenso del gobierno como tal, era un lineamiento. Pero hay gente dentro del gobierno que tiene otro punto de vista en cuanto a los intereses de Rusia y su comportamiento dentro del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. ¿Cómo lo ve?
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—¿La situación general cómo la veo? La alternativa en Irán —lo voy a decir así— la guerra convencional la perdería Estados Unidos y la nuclear no es alternativa para nadie.
Por otro lado, la guerra nuclear se convertiría inevitablemente en una guerra nuclear global. De ahí la peligrosidad que a mi juicio tiene la actual situación en Irán, tomando en cuenta las razones que usted está exponiendo y otros muchos datos más que me llevan a la conclusión de que la guerra adquiriría un carácter nuclear.
Michel Chossudovsky.—Es decir que como Estados Unidos y sus aliados son incapaces de ganar la guerra convencional, van a utilizar el arma nuclear, pero tampoco esa guerra la pueden ganar, porque lo vamos a perder todo.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—La perderían todos, es una guerra que todos la perderíamos. ¿Qué ganaría Rusia si allí se desata una guerra nuclear? ¿Qué ganaría China? ¿Qué carácter tendría esa guerra, cómo reaccionaría el mundo, qué efecto tendría en la economía mundial? Usted lo explicó en la universidad, cuando habló del sistema de defensa centralizado elaborado por el Pentágono. Parece ciencia ficción, no se parece en nada a la última guerra mundial. Lo otro es muy importante, el intento de convertir las armas nucleares en armamentos tácticos convencionales.
Sobre eso mismo hoy, día 13 de octubre, estuve leyendo en un despacho noticioso que los ciudadanos de Hiroshima y Nagasaki estaban formulando enérgicas protestas por el hecho de que Estados Unidos acababa de realizar pruebas nucleares subcríticas. Las llaman nucleares subcríticas, que significa el empleo del arma nuclear sin desplegar toda la energía que pueda alcanzarse con la masa crítica.
Dice: "Indignación en Hiroshima y Nagasaki por una prueba nuclear de Estados Unidos."...
"Las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki que sufrieron un ataque nuclear al término de la Segunda Guerra Mundial, deploraron hoy la prueba nuclear efectuada por Estados Unidos en septiembre pasado, denominada subcrítica porque no desata reacciones nucleares en cadena.
"El ensayo, el primero de este tipo en ese país desde 2006, tuvo lugar el 15 de septiembre en un centro de Nevada, Estados Unidos. Fue confirmado oficialmente por el Departamento de Energía de ese país, informó el diario Japan Times."
¿Qué dijo ese diario?
"Lo deploro profundamente porque esperaba que el presidente Barack Obama asumiera el liderazgo en la eliminación de armas nucleares", declaró hoy el gobernador de Nagasaki, Hodo Nakamura, en una rueda de prensa.
Luego siguen una serie de noticias con relación a eso.
"El ensayo ha provocado también protestas entre los ciudadanos de Hiroshima y Nagasaki, incluida la de varios supervivientes de las bombas atómicas que asolaron ambas ciudades en agosto de 1945.
"No podemos tolerar una acción de Estados Unidos que traiciona la promesa del presidente Barack Obama de avanzar hacia un mundo sin armas nucleares, dijo el subdirector del Consejo de Víctimas de la Bomba Atómica de Hiroshima Yukio Yoshioka.
"El gobierno declaró que no tiene intención de protestar." Deja a la esfera social la protesta y entonces dice: "Con ello se elevan a 26 las pruebas nucleares subcríticas efectuadas por Estados Unidos desde julio de 1997, cuando tuvo lugar la primera de ellas."
Ahora dice:
"Washington considera que estas pruebas no violan el Tratado para la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares, CTBT, ya que no desatan reacciones en cadena, y por tanto no expiden energía nuclear, por lo que pueden considerarse ensayos de laboratorios."
Estados Unidos dice que tiene que hacer esas pruebas porque son necesarias para mantener la seguridad de su arsenal nuclear", es decir, como que tenemos grandes arsenales nucleares, lo hacemos para tener seguridad.
Michel Chossudovsky.—Volvemos a la cuestión de la amenaza a Irán, porque usted dijo que Estados Unidos y sus aliados no pueden ganar una guerra convencional. Eso es cierto; pero el arma nuclear podría ser utilizada como una alternativa a una guerra convencional, y esto evidentemente es una amenaza a la humanidad, como usted lo ha subrayado en sus escritos.
La cuestión que a mí me preocupa es que después de la Guerra Fría se desarrolló esa noción del arma nuclear con cara humanitaria diciendo que realmente no es un arma peligrosa, que no daña a los civiles, y en cierta forma cambiaron la etiqueta del arma nuclear. Por lo tanto, según sus criterios, el arma nuclear no es distinta del arma convencional, y ahora en los manuales militares dicen que el arma nuclear táctica es un arma que no tiene daños para los civiles.
Por lo tanto podríamos tener una situación donde incluso los que deciden atacar a Irán con el arma nuclear no se dan cuenta de las consecuencias que podría tener para el Medio Oriente, Asia Central, pero también para la humanidad en su conjunto, porque van a decir: "Bueno, según nuestros criterios, esa arma nuclear es distinta de la de la guerra fría, y, por lo tanto, la podemos utilizar en contra de Irán como un arma que asegura la seguridad mundial.
¿Cómo ve eso? Eso es tremendamente peligroso, porque ellos mismos creen en su propia propaganda. Es una propaganda interna dentro de las fuerzas armadas, dentro del aparato político.
En la desclasificación que se hizo en el 2002, 2003 del arma nuclear táctica, incluso el senador Edward Kennedy dijo en esa época que esa era una manera de trastocar las fronteras entre las armas convencionales y las nucleares. Pero estamos en esto, estamos en una época donde el arma nuclear no es distinta de la Kalashnikov, estoy exagerando, pero en cierta forma es parte de la caja de herramientas —es la palabra que ellos utilizan, "caja de herramientas"—, y ahí se selecciona el tipo de armamento que se va a utilizar, de tal forma que el arma nuclear podría ser... utilizada en el teatro de guerra convencional, llevándonos hacia lo que es impensable, que sería un escenario nuclear a nivel regional, pero también con las repercusiones que podría tener a nivel planetario.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Yo escuché lo que usted afirmó en la Mesa Redonda de que tales armas, supuestamente inofensivas para los vecinos en las proximidades donde se utilizaran, podrían tener un rango equivalente que iba desde un tercio de la que usaron en Hiroshima hasta seis veces el poder de esa arma, y se conoce hoy perfectamente bien su terrible daño, una sola bomba mató instantáneamente a 100 000 personas. Imagínense una bomba que tenga seis veces el poder de aquella, o dos veces, o un poder igual, o el 30% de ese poder. Es absurdo.
También lo que usted expuso en la universidad sobre el intento de presentarla como un arma humanitaria, que además podría estar a disposición de las tropas en operaciones. De modo que en un momento determinado podría ser facultad del comandante de la zona de operaciones emplear esa arma como más eficiente que las demás, lo cual sería su deber dentro de las doctrinas militares y de las enseñanzas que le dan en las academias militares.
Michel Chossudovsky.—En ese sentido, no creo que esta arma nuclear se va a utilizar sin el aval, digamos, del Pentágono o del Comando centralizado; pero sí pienso que podría ser tomado sin el aval del Presidente de Estados Unidos y del Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, que es el Presidente de Estados Unidos; es decir que no es la lógica de la guerra fría, donde estaba el teléfono rojo...
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Yo comprendo, profesor, lo que usted dice con relación al empleo de esa arma como facultad de las autoridades superiores del Pentágono, y me parece correcto que usted haga esa aclaración para que no le vayan a imputar la responsabilidad de exagerar el peligro de esa arma.
Pero, fíjese, después que uno sabe el antagonismo y las discusiones del Pentágono con el Presidente de Estados Unidos, realmente no le quedan muchas dudas de cuál sería la decisión del Pentágono si el jefe del teatro de las operaciones solicita el uso de esa arma porque la considera necesaria o imprescindible.
Michel Chossudovsky.—Hay otro elemento también, es que el despliegue de armas nucleares ahora, a mi entender, es por varios países europeos miembros de la OTAN que incluyen todo ese despliegue del arma nuclear táctica, ahí está Turquía, Italia, Alemania, Belgica, Holanda; de tal forma, hay montones de estas pequeñas bombas nucleares muy cerca del teatro de guerra, y por otro lado está Israel.
Ahora bien, no creo que Israel va a iniciar una guerra por su cuenta, eso es una imposibilidad en términos estratégicos y decisionales. En la guerra moderna con la centralización del sistema de comunicación, de logística, es una decisión centralizada; pero Israel podría actuar en el sentido que Estados Unidos le dé la luz verde y después Israel es el que hace el primer ataque. Eso no está fuera de lo posible, aunque hay algunos analistas que ahora dicen que la guerra a Irán va a empezar en el Líbano y Siria con una guerra fronteriza convencional, y luego eso dará un pretexto para una escalada de las operaciones militares.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Ayer 13 de octubre una multitud de personas recibió a Ahmadinejad en el Líbano como héroe nacional de ese país. Estuve leyendo un cable sobre eso esta mañana.
Además, se conoce también las preocupaciones de Israel con relación a eso, por el hecho de que los libaneses es gente muy combativa, poseen tres veces el número de proyectiles reactivos que disponía en el anterior conflicto Israel y el Líbano, lo cual constituye una gran preocupación para Israel, porque necesitan —afirman los técnicos israelitas— la aviación para combatir esa arma. De modo, afirman, que solo podrían estar un número de horas, no tres días atacando a Irán, porque deberían prestarle atención a tal peligro. Es por ello, desde esos puntos de vista, que cada día que pasa se preocupan más, porque esas armas forman parte del arsenal de armamentos convencionales de los iraníes. Ellos entre los armamentos convencionales, por ejemplo, tienen cientos de lanzadores de cohetes contra buques de superficie en esa área del Caspio, se conoce, desde las guerras de las Malvinas, que un buque de superficie puede defenderse de uno, dos o tres proyectiles; pero imagínense cómo se puede proteger una nave de guerra, con bastante dimensión, contra una lluvia de armas de ese tipo. Son naves rápidas operadas por gente bien entrenada, porque los iraníes llevan 30 años preparando la gente y han desarrollado armas convencionales eficientes.
Usted mismo lo conoce y conoce lo que ocurrió en la última Guerra Mundial, antes de que aparecieran las armas nucleares, habían muerto ya 50 millones de personas por el efecto destructor de las armas convencionales.
Una guerra hoy no es una guerra como en el siglo XIX, antes de que aparecieran las armas nucleares, la guerra era ya sumamente destructiva. Las armas nucleares aparecieron en el último minuto, porque Truman quiso usarlas, hacer la prueba con la bomba de Hiroshima, creando la masa crítica a partir del uranio, y otra con plutonio en Nagasaki. Las dos mataron a alrededor de 100 000 personas de forma inmediata. No se sabe la gente que hirieron e irradiaron, que morirían después o sufrirían durante largos años sus efectos. Además, una guerra nuclear crearía el invierno nuclear.
Le estoy hablando de los peligros que significaría una guerra por el daño inmediato. Basta un número limitado, las armas que tiene una de las dos potencias menos poderosas, India y Paquistán, y su estallido sería suficiente para crear un invierno nuclear del cual no sobreviviría, sería imposible, ningún ser humano, que duraría de 8 o 10 años. En pocas semanas no se vería la luz del sol.
El hombre tiene menos de 200 000 años, hasta ahora todo era normalidad, las leyes de la naturaleza se cumplían, las leyes de la vida se desarrollaban en el planeta Tierra desde hace más de 3 000 millones de años. El hombre, el homo sapiens, el ser inteligente no existía cuando habían transcurrido las 8 décimas partes de un millón, según todos los estudios. Hace 200 años todo virtualmente se ignoraba. Hoy se conoce las leyes que rigen la evolución de las especies. Los científicos, los teólogos, incluso, los más sinceros religiosos, que inicialmente se hacían eco de la campaña de las grandes instituciones eclesiásticas contra la teoría de Darwin, aceptan hoy las leyes de la evolución como reales, sin que eso haya impedido el ejercicio de sinceras creencias religiosas, en las que muchas veces, las personas encuentran una compensación a sus más sentidas penas.
Pienso que nadie en el mundo desea que la especie humana desaparezca. Y es por ello que sostengo el criterio de que deben desaparecer, no solo las armas nucleares, sino también las armas convencionales. Hay que ofrecerles garantía de paz a todos los pueblos sin distinción, lo mismo a los iraníes, que a los israelitas, y que los recursos de la naturaleza deben ser distribuidos, ¡deben ser!, no quiero decir que lo van a hacer, tampoco que sea fácil lograrlo; pero no habría otra alternativa para la humanidad, en un mundo limitado en extensión, y en determinados recursos, aún cuando se desarrollen todas las fuerzas científicas para crear fuentes de energía renovables. Hay casi 7 000 millones de habitantes, luego hace falta una política de población, hacen falta muchas cosas, y cuando usted las coloca todas juntas y se hace la pregunta, ¿será el ser humano capaz de comprender eso y superar todas esas dificultades? Realmente, únicamente el entusiasmo puede conducir a una persona a decir que se va a enfrentar y resolver fácilmente semejante problema.
Michel Chossudovsky.—Lo que usted ha dicho es sumamente importante, cuando habló de Truman. Truman había dicho que Hiroshima era una base militar y que no había daños para los civiles.
Esa noción de daños colaterales, parece ser parte de una continuidad en la doctrina nuclear desde el año 1945 hasta la fecha, es decir, no a nivel de realidad pero a nivel de doctrina y de propaganda; es decir que en 1945 se dijo: Vamos a salvar la humanidad matando a 100 000 personas y negando el hecho de que Hiroshima era una ciudad poblada, que era una base militar. Pero hoy en día esa falsificación es mucho más sofisticada, más generalizada, y el arma nuclear es más avanzada. De tal forma que, en la medida en que estamos tratando del futuro de la humanidad y la amenaza de una guerra nuclear a nivel planetario, la cuestión de la mentira, la cuestión de la ficción dentro del discurso político y militar, que nos lleva a una catástrofe planetaria sin que los políticos entiendan sus propias mentiras.
Entonces, usted dijo que los seres humanos inteligentes existen desde hace 200 000 años, pero esa propia inteligencia traducida a nivel de instituciones, de la prensa, de los servicios de inteligencia, de las Naciones Unidas, viene a ser el elemento que nos va a destruir; porque uno cree en sus mentiras y llega a la guerra nuclear, sin darse cuenta de que esta es la última guerra, como lo decía Einstein claramente: Que una guerra nuclear no puede llevar a una continuación de la humanidad, es la amenaza mundial.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Son muy buenas esas palabras, profesor. El daño colateral, en este caso, puede ser la humanidad. La guerra es un hecho criminal, y no hace falta ninguna ley nueva, porque desde Nuremberg la guerra estaba considerada ya como un crimen, el más grande crimen contra la humanidad y contra la paz, el más horrible de todos los crímenes.
Michel Chossudovsky.—Los textos de Nuremberg lo dicen claramente: "La guerra es un acto criminal, es el acto supremo de guerra en contra de la paz." Ha sido muy citado ese texto de Nuremberg. Los aliados después de la Segunda Guerra Mundial lo querían utilizar en contra de los vencidos, y no digo que no tiene validez; pero los crímenes que ellos cometieron, incluso los crímenes que cometieron en contra de Alemania y Japón, de eso no se habla.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Con el arma nuclear, en el segundo caso.
Michel Chossudovsky.—En fin, es un tema para mí tremendamente importante y si estamos hablando de una contraalianza por la paz, la criminalización de la guerra me parece fundamental. Es la abolición de la guerra, es un acto criminal que hay que eliminar.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Bueno, a los principales criminales. ¿Quién los juzga?
Michel Chossudovsky.—El problema es que ellos controlan también las cortes de justicia, entonces los jueces son criminales también, ¿qué podemos hacer?
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Yo digo que esto forma parte de la batalla de ideas.
Ahora, se trata de exigir que el mundo no sea conducido a una catástrofe nuclear, se trata de preservar la vida. No sabemos, pero presumimos que si el hombre toma conciencia de que su existencia, la de su pueblo, la de los seres más queridos, hasta los mismos jefes militares de Estados Unidos estarían conscientes del resultado, aunque los hayan educado en la vida para cumplir órdenes, no pocas veces genocidas como el empleo de armas nucleares tácticas o estratégicas, porque es lo que les enseñaron en las academias.
Como todo eso es una locura, ningún político está exento del deber de trasmitir a la población estas verdades. Hay que creer en ellas, de lo contrario no habría nada por lo cual luchar.
Michel Chossudovsky.—Yo creo que lo que usted está diciendo es que en el momento actual, el gran debate histórico de la humanidad debe enfocarse en el peligro de una guerra nuclear que amenaza el futuro de la humanidad, y que cualquier debate que hagamos sobre necesidades básicas o sobre economía exige que podamos impedir la guerra e instalar una paz mundial para que se pueda, justamente, planificar el nivel de vida a nivel mundial basado en necesidades básicas; pero si no solucionamos el problema de la guerra, el capitalismo tampoco subsiste, es cierto, ¿no?
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—No, no puede subsistir, por todos los análisis que hemos hecho no puede subsistir. El sistema capitalista y la economía de mercado que le insufla vida, no va a desaparecer de la noche a la mañana, pero el imperialismo basado en la fuerza, en las armas nucleares y las armas convencionales de tecnología moderna, tienen que desaparecer si deseamos que la humanidad sobreviva.
Ahora, hay un hecho real que está ocurriendo en este momento y demuestra la enorme desinformación que sufre el mundo y es el siguiente: En Chile quedaron atrapados a 700 metros de profundidad 33 mineros, y en el mundo hay júbilo por la noticia de que 33 mineros han sido salvados. Bueno, pues sencillamente, qué hará el mundo si toma conciencia de que hay seis mil 877 millones 596 mil 300 habitantes que hay que salvar, si 33 han creado un júbilo universal y todos los medios masivos no hablan más que de eso en estos días, ¿por qué no se salvan los casi 7 000 millones de habitantes atrapados por el terrible peligro de perecer, en una muerte tan horrible como las de Hiroshima o Nagasaki?
Michel Chossudovsky.—Mire, esto es también, visiblemente, la cuestión de la cobertura mediática que se hace de distintos eventos y de la propaganda que emana.
Yo pienso que fue una operación humanitaria tremenda lo que hicieron los chilenos; pero es cierto que si hay una amenaza a la humanidad, como usted lo plantea, eso debería estar en primera página en todos los diarios del mundo, porque es la totalidad de la sociedad humana que ... podría ser la víctima de una decisión tomada, incluso, por un general de tres estrellas, que no conoce las consecuencias, pero ahí estamos hablando de la manera en que los medios de comunicación, en particular en occidente, están escondiendo la cuestión más grave que afecta potencialmente el mundo actual, que es el peligro de una guerra nuclear y debemos tomarlo en serio, porque tanto Hillary Clinton, como Obama han dicho que ellos tenían la idea de utilizar el arma nuclear en una llamada guerra preventiva en contra de Irán.
Bueno, ¿cómo contestamos? ¿Qué le dice usted a Hillary Clinton y Barack Obama por las declaraciones que han hecho respecto al uso unilateral del arma nuclear en contra de Irán, un país que no representa ningún peligro para nadie?
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Sí, conozco dos cosas: lo que se discutió, que ha sido revelado en estos días, las tremendas discusiones en el seno del Consejo de Seguridad de Estados Unidos. Es el valor que le daba al libro que escribió Bob Woodward, porque revelaba cómo fueron todas esas discusiones. Se sabe cuál fue la posición de Biden, de Hillary, de Obama y, en realidad en esas discusiones el que se mostró más firme en contra de la extensión de la guerra, que fue capaz de discutir con los militares, fue Obama, eso es un hecho real, estoy escribiendo la última reflexión, en realidad, sobre eso. El único que allí llegó y le dio un consejo, había sido adversario suyo por su pertenencia al Partido Republicano, fue Colin Powell, le recordó que era el Presidente de Estados Unidos, un consejo alentador.
Creo que hay que hacerles llegar a todos este mensaje, de lo que hemos hablado; creo que muchos leen en Global Research los artículos que usted ha publicado, ... Creo que se debe divulgar, y en la medida en que hemos tenido estas conversaciones y albergamos la idea de divulgarlas, me alegra mucho cada vez que usted argumenta, razona y plantea estos problemas, ya que sencillamente, a mi juicio, existe un verdadero déficit de información por las causas que usted explica.
Ahora, nosotros debemos inventar, ¿cuáles serán las formas de hacer que esto se conozca? En la época de los doce Apóstoles, eran 12 nada más, y se dieron a la tarea de divulgar las enseñanzas que un predicador les trasmitió. Claro, tenían cientos de años por delante, nosotros, en cambio, no los tenemos, pero estaba viendo la lista de personalidades, son más de 20 las personalidades que han estado trabajando con Global Research, gente prestigiosa, planteando las mismas cosas; pero no disponen de cientos de años, sino, bueno, de muy poco tiempo.
Michel Chossudovsky.—El movimiento anti-guerra en Estado Unidos, Canadá y Europa esta muy dividido. Algunos piensan que la amenaza viene de Irán, otros dicen que son los terroristas, y hay mucha desinformación dentro del mismo movimiento antiguerra.
Además, en el Foro Social Mundial la guerra nuclear no es parte del debate entre gente de izquierda o progresistas. Durante la Guerra Fría sí se habló del peligro de un conflicto nuclear, y la gente tenía esa conciencia.
En la última reunión que se celebró en Nueva York sobre la no proliferación, bajo las Naciones Unidas, el énfasis era la amenaza nuclear de entidades no estatales, de terroristas.
El presidente Obama decía que la amenaza viene de Al Qaeda, que tiene el arma nuclear; además si uno lee los discursos de Obama, se va insinuando que el terrorismo tiene capacidad de fabricar bombas nucleares pequeñas, a lo que llaman la bomba sucia. Bueno, es una manera de cambiar totalmente el énfasis.
Cmdte.Fidel Castro Ruz—Es lo que le dicen a él, es lo que le dicen su propia gente y se lo hacen creer.
Fíjese, ¿qué yo hago con las reflexiones? Las distribuyo en las Naciones Unidas, se las envío a todos los gobiernos —las reflexiones, por supuesto, que sean cortas, para mandárselas a todos los gobiernos—, y sé que hay mucha gente que las lee. El problema es si usted está diciendo una verdad o no. Claro que cuando uno reúne toda esta información con relación a un problema más concreto, porque también las reflexiones están diluidas en muchos temas, pero yo creo que hay que concentrarse, por nuestra parte más, en la divulgación de cosas esenciales, no puede abarcarse todo.
Michel Chossudovsky.—Quisiera hacerle una pregunta, porque hay una cuestión fundamental relativa a la historia de la Revolución Cubana. Considero que ese debate sobre el futuro de la humanidad también es parte del discurso revolucionario. Si la sociedad en su conjunto podría ser amenazada por una guerra nuclear, es necesario, en cierta forma, tener una revolución del pensamiento y de las acciones en contra de ese acontecimiento.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Hay que decir, repito, que la humanidad está a 800 metros de profundidad y que hay que sacarla, hay que hacer una operación de salvamento. Es el mensaje que tenemos que trasmitir a un número de gente. Si mucha gente lo piensa, mucha gente va a hacer lo que usted está haciendo y van a apoyar lo que ustedes están apoyando, ya no depende de quiénes son los que lo digan, que lo diga alguien.
Hay que inventar cómo se llega a las masas más conscientes. La solución no está en los diarios. Internet existe, Internet es más económico, Internet es más asequible. Yo me acerqué a ustedes por la vía de Internet buscando noticias, no a través de las agencias noticiosas, no a través de los órganos de prensa, de la CNN, sino buscando noticias a través de un boletín que recibo diariamente con artículos publicados en Internet. Más de 100 páginas todos los días.
Ayer ustedes estaban razonando que en Estados Unidos hace un tiempo dos terceras partes de la opinión pública estaba contra la guerra en Irán, y hoy el cincuenta y tanto por ciento era partidario de acciones militares contra Irán.
Michel Chossudovsky.—Lo que pasó, incluso en los últimos meses, es que se dijo: "Sí, la guerra nuclear es muy peligrosa, es una amenaza; pero la amenaza viene de Irán", y hubo carteles en Nueva York diciendo: "Di no a Irán nuclear", y el mensaje de estos carteles era presentar a Irán como una amenaza a la seguridad mundial, aun cuando la amenaza no existía porque ellos no tienen el arma nuclear. En fin, estamos en esto, y The New York Times a comienzos de esta semana publicó un texto que dice que sí, que los asesinatos políticos son legales.
Entonces, cuando tenemos una prensa que nos presenta cosas de ese estilo, con la distribución que ellos tienen, es tremendo el trabajo. No tenemos posibilidad de revertir este proceso con la distribución de los medios alternativos. Además de que ahora muchos de estos medios alternativos están financiados por el poder económico.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Y sin embargo tenemos que luchar.
Michel Chossudovsky.—Su mensaje que había dado ayer, es que en el caso de una guerra nuclear, el daño colateral sería la humanidad en su totalidad.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Sería la humanidad, la vida de la humanidad.
Michel Chossudovsky.—Es cierto que Internet debe seguir funcionando como un instrumento de divulgación para que esa guerra no ocurra.
Cmdte. Fidel Castro Ruz.—Bueno, es la única manera que podemos impedirla. Si creamos la opinión mundial, es como el ejemplo que mencioné: hay casi 7 000 millones de personas a 800 metros de profundidad; debemos utilizar el fenómeno de Chile para divulgar estas cosas.
Michel Chossudovsky.—La comparación que usted hace con el rescate de los 33 mineros, diciendo que hay 33 mineros por debajo del suelo que hay rescatar, que se hizo una cobertura mediática, y usted dice que tenemos casi 7 000 millones de habitantes que están por debajo de 800 metros y no entienden lo que está pasando, pero tenemos que rescatarlos, porque la humanidad en su conjunto está amenazada por el arma nuclear de Estados Unidos y de sus aliados, porque son ellos los que dicen que están dispuestos a utilizarla.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Y la van a utilizar si no hay oposición, si no hay resistencia. Están engañados, están endrogados con la superioridad militar y la tecnología moderna y no saben lo que están haciendo.
No entienden las consecuencias, creen que eso puede mantenerse. Es imposible.
Michel Chossudovsky.—O creen que esto es simplemente un arma convencional cualquiera.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Sí, están engañados y creen que se puede seguir usando esa arma. Están confundiendo una época, no recuerdan lo que dijo Einstein: no sabía con qué armas se pelearía la tercera guerra mundial, pero la cuarta sería con palos y piedras. Yo le añadí ahí: "...solo que no existirá quienes manejen los palos y las piedras". Esa es la realidad; lo tengo ahí escrito en el mismo discursito breve que usted me sugirió elaborara.
Michel Chossudovsky.—El problema que yo veo es que el uso del arma nuclear no va necesariamente a llevar al fin de la humanidad de un día para otro, porque el impacto radiactivo es un proceso acumulativo.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Repítame, repítame por favor.
Michel Chossudovsky.—Que el arma nuclear tiene varias consecuencias: una que es la explosión y la destrucción en el teatro de guerra, que es el fenómeno de Hiroshima; y la otra es la radiación que va expandiéndose.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Sí, el invierno nuclear, digamos. El prestigioso investigador norteamericano, profesor emérito de la Universidad de Rutgers, de New Jersey, Alan Robock, demostró de forma irrebatible que el estallido de una guerra entre dos de las ocho potencias nucleares que menos armas de ese tipo poseen provocaría un "invierno nuclear".
Realizó ese descubrimiento al frente de un grupo de investigadores que utilizaron modelos ultra científicos de computación.
Bastaría el estallido de 100 armas nucleares estratégicas de las 25 mil que poseen las ocho potencias mencionadas para provocar temperaturas por debajo del punto de congelación en todo el planeta, y una larga noche que duraría alrededor de ocho años. Es algo tan terrible, exclama el profesor Robock, que las personas caen en "estado de negación, no quieren pensar en eso, es más fácil simular que esto no existe". Me lo contó personalmente, en una conferencia internacional que ofreció, donde tuve el honor de conversar con él.
Bien, yo parto de una tesis: Si se desata una guerra en Irán, esta se torna nuclear global inevitablemente. Por eso ayer estábamos diciendo que no fue correcto permitir ese acuerdo en el Consejo de Seguridad, porque lo facilitó todo, ¿se da cuenta?
Una guerra de ese tipo hoy en Irán no puede ser local, porque los iraníes no se plegarán ante la fuerza. Si mantuviera su carácter convencional, sería una guerra que Estados Unidos y Europa no pueden ganar, y sostengo que se tornaría nuclear rápidamente. Si Estados Unidos cometiera el error de usar armas nucleares tácticas, en el mundo se produciría una gran conmoción y el control de los acontecimientos escaparía de sus manos.
Si Obama ha tenido que discutir fuertemente con el Pentágono lo que debe hacerse en Afganistán, imagínense la situación de Obama con los soldados norteamericanos e israelitas combatiendo contra millones de combatientes iraníes. Los sauditas no van a luchar en Irán, ni los paquistaníes u otros soldados árabes o musulmanes. Lo que puede ocurrir es que los yankis tengan serios conflictos con las tribus paquistaníes a las que están atacando y matando con sus aviones sin pilotos, y ellos lo saben. Cuando dan un golpe contra esas tribus, primero atacan y después se lo avisan al gobierno, no se lo dicen antes; es una de las cosas que más irritan a los paquistaníes. Hay un antinorteamericanismo fuerte allí.
Es un error pensar que los iraníes se rendirán si usan contra ellos las armas nucleares tácticas, y el mundo se conmocionaría de verdad, cuando tal vez sea ya demasiado tarde.
Michel Chossudovsky.—Ellos no pueden ganar una guerra convencional.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—No la pueden ganar.
Michel Chossudovsky.—Y eso lo vemos en Iraq; en Afganistán pueden destruir un país, pero no pueden ganar desde el punto de vista militar...
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Pero para destruirlo a qué precio, a qué precio ante el mundo, a qué costo económico de todo tipo, en la marcha hacia la catástrofe. Los problemas que usted menciona se agravan, hasta el pueblo norteamericano reaccionaría; porque el pueblo norteamericano aunque muchas veces reacciona tardíamente, termina reaccionando. El pueblo norteamericano reacciona a las bajas, a los muertos.
Al gobierno de Nixon lo apoyaba mucha gente cuando la guerra en Vietnam, incluso sugirió a Kissinger emplear el arma nuclear en ese país y este lo disuadió de dar ese criminal paso. Estados Unidos se vió obligado por el propio pueblo norteamericano a ponerle fin a la guerra, tuvo que negociar y tuvo que entregar el sur. Irán tendría que renunciar al petróleo de la zona. ¿En Vietnam qué entregaba? Un gasto. Al fin y al cabo ahora están otra vez en Vietnam, comprando petróleo, negociando. En Irán se perderían muchas vidas, y tal vez las instalaciones petroleras en gran parte de la zona quedarían destruidas.
En una situación como la actual, es muy probable que no entiendan nuestro mensaje. Si la guerra estalla, mi opinión es que ellos y el mundo nada ganan. Si fuera únicamente convencional, lo que es muy poco probable, la perderían irremisiblemente, y si se torna en una guerra nuclear global, la perdería la humanidad.
Michel Chossudovsky.—Irán tiene fuerzas convencionales que son significativas.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Millones.
Michel Chossudovsky.—Fuerzas de tierra, pero también cohetes y también tiene posibilidades de defenderse.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Mientras haya un hombre con un fusil es un enemigo que tendrán que derrotar.
Michel Chossudovsky.—Y ahí hay varios millones con fusiles.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Millones, y tendrían que sacrificar muchas vidas de norteamericanos, desgraciadamente sería entonces que los norteamericanos reaccionarían, si no reaccionan ahora reaccionarían después cuando sería demasiado tarde; hay que escribir, hay que divulgar en la medida de nuestras posibilidades. Recuerde que a los cristianos los perseguían, los llevaban a las catacumbas, los asesinaban, se los lanzaban a los leones, estuvieron siglos sin renegar de sus creencias, y después eso era lo que le hacían a los musulmanes, sin que estos jamás se plegaran.
Hay una guerra real contra el mundo musulmán. ¿Por qué se olvidan esas lecciones de la historia? He leído muchos de los artículos que usted escribió sobre los riesgos de esa guerra.
Michel Chossudovsky.—Volvemos a la cuestión de Irán. Lo que creo que es muy importante es que la opinión mundial entienda el escenario de guerra. Usted plantea claramente que ellos pierden la guerra, la convencional, la están perdiendo en Iraq y Afganistán, Irán tiene fuerzas convencionales mucho más que la OTAN.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Mucho más experimentada y motivada. Ellos están ahora en conflicto con las de Afganistán y las de Iraq y una que no mencionan: los paquistaníes de la misma etnia que los de la resistencia en Afganistán. Y esa guerra ellos la dan por perdida en las discusiones que se sostienen en la Casa Blanca, es lo que nos cuenta el libro "Las guerras de Obama", de Bob Woodward, que ellos afirman. Imagínese que a eso le añadan la guerra para liquidar lo que quede después de los golpes iniciales que den en Irán.
Entonces se verían o en una situación de guerra convencional que no pueden ganar, u obligados a una guerra global nuclear, lo empleo ya, en condiciones de que se va a producir una conmoción mundial muy grande. Yo no sé quién podrá justificar el tipo de guerra que tienen que hacer; para destruir tienen señalados 450 objetivos en Irán, y de los cuales algunos, según ellos, tendrían que atacarlos con cabezas nucleares tácticas, por su ubicación en zonas montañosas y la profundidad en que están. Moriría en eso mucha gente del personal ruso y de otras nacionalidades que están colaborando con ellos.
¿Cuál será la reacción de la opinión mundial frente a ese golpe, que hoy irresponsablemente los medios han promovido con el apoyo de muchos norteamericanos?
Michel Chossudovsky.—Una cuestión, Irán, Iraq, Afganistán, son todos países vecinos, en cierta forma. Irán tiene frontera con Afganistán, tiene frontera con Iraq, y Estados Unidos y la OTAN tienen instalaciones militares en los países que ellos ocupan. ¿Qué va a pasar? Las tropas de Irán van a pasar la frontera de inmediato, supongo.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Bueno, no sé qué táctica seguirán ellos, pero si uno estuviera en su lugar, lo más aconsejable no es concentrar las tropas, porque concentradas las tropas serían más víctimas del ataque con armas nucleares tácticas. Es decir que, tal y como está pintada la amenaza, lo mejor sería que ellos usen una táctica parecida a la nuestra en el sur de Angola cuando sospechamos que Sudáfrica disponía de armas nucleares; creamos grupos tácticos de 1 000 hombres con poder de fuego terrestre y antiaéreo. Las armas nucleares nunca tendrían a su alcance una masa de soldados. La cohetería antiaérea y otras armas similares apoyaban nuestras fuerzas. Las armas y el terreno cambian y las tácticas deben cambiar constantemente.
Michel Chossudovsky.—Dispersos.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—Dispersos, pero no son hombres aislados, eran alrededor de 1 000 hombres con las armas adecuadas, el terreno era arenoso, a dondequiera que ellos llegaban tenían que escarbar y protegerse bajo tierra, manteniendo siempre la mayor distancia entre los componentes. Nunca se ofreció al enemigo la oportunidad de asestar un golpe decisivo contra los 60 mil soldados cubanos y angolanos en el Sur de Angola.
Lo que nosotros hicimos en ese país hermano es lo que, con criterios tradicionales, habría seguido un ejército de cientos de miles. Bueno, nosotros no éramos 100 mil, en el sur de Angola había 60 000 hombres, entre cubanos y angolanos, debido a los requerimientos técnicos los grupos tácticos estaban constituidos principalmente por cubanos, porque manejaban los tanques, los cohetes, las antiaéreas, las comunicaciones, pero la infantería estaba formada por soldados cubanos y angolanos, con gran espíritu de lucha, que no vacilaron un instante en enfrentar al ejército blanco del Apartheid apoyados por Estados Unidos e Israel. ¿Quiénes manejaban las numerosas armas nucleares que mantenían en ese momento?
En el caso de Irán, por ahí llegan noticias de que están escarbando en el suelo, y cuando les preguntan dicen que están haciendo cementerios para enterrar a los invasores... No sé si será una ironía, pero creo que realmente tienen que escarbar bastante para proteger sus fuerzas del ataque con que los amenazan.
Michel Chossudovsky.—Irán tiene la posibilidad de movilizar varios millones de tropas.
Cmdte.Fidel Castro Ruz.—No sólo las tropas, sino también los puestos de mando son decisivos. A mi juicio, la desconcentración es muy importante. Los atacantes tratarán de impedir la transmisión de órdenes. Cada unidad de combate debe conocer de antemano lo que debe hacer en cada circunstancia. El atacante tratará de golpear y desarticular la cadena de mando con sus armas radioelectrónicas. Todos esos factores deben tenerse en cuenta. El hombre no ha conocido nunca semejante experiencia.
En cualquier circunstancia, lo de Afganistán es una bobería y lo de Iraq otra, comparado con lo que se van a topar en Irán: el armamento, el entrenamiento, la mentalidad, el tipo de soldado... Si hace 31 años, en 1979, los combatientes iraníes limpiaban los campos de minas avanzando sobre éstos, serán, sin duda, los adversarios más temibles con los que se enfrentaría Estados Unidos.