Carta a Almeida
Querido Almeida:
Te mando diez mil balas; son cinco mil de 30-06 [30.06] y cinco mil de M-1. De esas diez mil, le mandas cuatro mil a Hubert [Huber Matos]; dos mil 30-06 [30.06] y dos mil M-1; las otras seis mil las distribuyes entre las columnas 3 y 10. Te doy un consejo y es que esas seis mil balas las guardes para el momento más necesario. Si se las das a la gente las tiran. Es una vieja experiencia. […]
Se está acercando el momento de realizar el plan de que te hablaba en mi anterior instrucción. Yo soy partidario de realizar las operaciones de cerco no en una ciudad o sector determinado, sino en toda la provincia para evitar por completo el envío de refuerzos en la mayor parte de ellos y asegurar su rendimiento. Tienes que ir estudiando tus planes para cuando llegue el momento de iniciar el cerco cerrado de Santiago como parte del plan general. […]
En esencia: hay que estar preparados porque en cualquier momento la Provincia se convierte en una Sierra Maestra en grande.
Tú con un poquito de suerte puedes hasta pescar un general.
Abrazos,
Fdo. Fidel Castro Ruz
Comandante Jefe
Comandante Ángel Ameijeiras: ante ti se cuadran todos los combatientes del Ejército Rebelde