La embajadora cubana en ONU, Ana Silvia Rodríguez, aseguró que poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra la isla sería una acción a favor de la paz.
 
Según destacó la representante cubana, la Asamblea General de Naciones Unidas ha señalado esto a través de una resolución anual adoptada por una abrumadora mayoría durante 28 años.
 
No hay cultura de paz cuando Washington lanza una nueva campaña de calumnias para desacreditar a Cuba como parte de su política de creciente hostilidad contra el país caribeño, indicó.
 
Esa campaña está motivada por el fracaso político al intentar poner de rodillas a los cubanos al fortalecer el bloqueo económico y al implementar medidas para privarnos de combustible, dada la probada capacidad de resistencia de nuestro pueblo, apuntó.
 
Rodríguez denunció las acciones de la embajada de Estados Unidos en Cuba, desde las cuales se guían y financian mercenarios, que son incitados a la violencia, la perturbación de la paz y la falta de respeto a los agentes del orden, refiere Prensa Latina.
 
Esas nuevas agresiones fracasarán, al igual que la política de bloqueo de 60 años ha fallado, los cubanos reafirmamos nuestro compromiso con la paz y con la promoción de una cultura de paz, expresó.
 
Vivimos en un contexto global marcado por conflictos armados en varias regiones; por un aumento del odio, el discurso racista y xenófobo, incluso por altos funcionarios del Estado, señaló.
 
Hay un aumento de la pobreza y la desigualdad, algunos Estados quieren cerrar puertas y construir muros en lugar de construir puentes y fomentar el entendimiento entre las naciones y las culturas, observó.
 
En todo el mundo se fabrican más balas al año que libros impresos, agregó; en tanto, la disuasión nuclear se usa como método para contener la guerra, los seres humanos no disfrutarán de una cultura de paz.
 
'Cuba observa con preocupación que la profunda brecha que divide a la sociedad humana en ricos y pobres y la disparidad cada vez mayor entre el mundo desarrollado y el mundo en desarrollo representan una gran amenaza para la prosperidad, la paz y la seguridad y la estabilidad mundiales.'
 
No puede haber paz sin el pleno respeto de la soberanía de los Estados; no puede haber paz sin respeto por la autodeterminación de los pueblos y la integridad territorial de los Estados, subrayó.
 
El uso de medidas coercitivas unilaterales como herramienta de política exterior debe cesar, se debe poner fin a la violencia, se debe respetar la vida, se debe considerar el diálogo y la cooperación, y se debe hacer hincapié en la educación y la transmisión de valores para la paz, continuó la diplomática cubana.
 
'Al promover y desarrollar una cultura de paz es necesario condenar todos los actos, métodos y prácticas de terrorismo, incluido el terrorismo de Estado, y tomar medidas concretas para combatir este flagelo.'