Querido amigo Amadou Mahtar M’Bow, director de la UNESCO;

Distinguidos invitados;

Compañeros dirigentes del Partido, del Estado, de la Juventud;

Queridos pioneros:


No hace mucho tiempo nos reunimos en las proximidades de esta zona, para celebrar el Día de los Niños. Hoy nos volvemos a reunir aquí con algunas cosas nuevas; en este día, además de ese hermoso centro de exploradores de pioneros que se inaugura, tenemos el honor de contar entre nosotros con nuestro muy estimado amigo M’Bow, director de la UNESCO, que nos visita para proclamar la Habana Vieja como Patrimonio de la Humanidad (Aplausos). El realiza también una gira de visitas, no solo a Cuba, sino a otros países; pero es muy importante que él quiso estar con los niños cubanos en el día de hoy, y eso constituye para nosotros un gran honor, si tomamos en cuenta el destacado papel que desarrolla esta institución de las Naciones Unidas, la UNESCO, en favor de la educación y la cultura en el mundo.

Nosotros hemos recibido muchas muestras de apoyo, por parte de la UNESCO y por parte de su Director. A esto se suma hoy el extraordinario honor de recibir esta Medalla Conmemorativa del Bicentenario del Nacimiento de Simón Bolívar. Tanto por lo que significó y significa Bolívar para todos los pueblos de América Latina, como por lo que significa para nosotros la UNESCO y su Director, esta medalla conmemorativa constituye un inmenso honor que nosotros aceptamos en nombre de nuestro pueblo y en nombre, podríamos decir especialmente, de nuestros niños (Aplausos). A nuestro pueblo, a la joven generación y a los pioneros, corresponde este honor, porque son los llamados a llevar adelante la obra de la Revolución, la obra de Martí y la obra de Bolívar (Aplausos).

También agradezco mucho a los compañeros pioneritos estos títulos que me han otorgado, de Jefe de las Tropas Pioneriles, ¿no? ¿Ese es el título? (Le responden: "El de uno de ellos, el más grande"). ¿Y el otro? (Le responden: "De Explorador Jefe"). Esto constituye para mí un inmenso honor.

En realidad, recordaba que es la segunda vez que me entregan alguna responsabilidad en este campo, porque cuando yo era estudiante, un poquito mayor que ustedes, estaba más o menos por tercer año de bachillerato, en la escuela se organizó un movimiento de pioneros. Bueno, no era de pioneros, era de exploradores; ahora lo llamaríamos de pioneros-exploradores. Entonces una vez, después de una serie de actividades de exploración, creo que ya al final del año, me nombraron jefe de exploradores de la escuela (Aplausos). A mí me gustaba mucho escalar montañas, cruzar ríos, explorar la naturaleza, recorrer los campos, organizar el campamento donde nos cogiera la noche, comer lo que se podía y pasarme varios días en el bosque.

Eso me sirvió mucho después, ese contacto con la naturaleza, con las montañas, esas experiencias, porque me ayudó a pensar en la lucha guerrillera, en utilizar el terreno, tal como lo habían hecho nuestros mambises, en la lucha contra la tiranía. Y aquellas experiencias que tuve como explorador, me ayudaron mucho; creo que tuvieron una influencia notable en la concepción de la táctica de nuestra última lucha de liberación nacional (Aplausos).

Como les he señalado en otras ocasiones, tal vez no imaginan ustedes la utilidad, la importancia que tiene para la vida la preparación para afrontar cualquier circunstancia, por difícil que parezca. Ustedes acaban de hacer una demostración aquí, muy bonita, sobre la historia de nuestro país, desde el inicio de las guerras de independencia, pasando por la Protesta de Baraguá, hasta la toma del Moncada, y han hecho también ustedes, los pioneros de los círculos de interés de las fuerzas armadas, una magnífica demostración en la tarde de hoy.

Y es que puede decirse que nuestras guerras de independencia, desde las primeras hasta las últimas, se hicieron en el campo.

Nuestro pueblo vivió en las montañas, en los llanos, absolutamente identificado con la naturaleza; durante 10 años en nuestra primera guerra de independencia, tuvieron que vivir haciendo muchas de las cosas que hacen los pioneros exploradores: durmiendo en hamacas, preparando los alimentos en condiciones muy rudimentarias, soportando la lluvia, soportando el calor, soportando la guerra, soportando enfermedades, soportando privaciones de todo tipo. Y como ustedes expresan su deseo de ser buenos patriotas, buenos combatientes revolucionarios, ser dignos sucesores de la actual generación, estos conocimientos que ustedes adquieren en los centros de exploradores, los ayudan a prepararse para eso (Aplausos); además, les ayudarán a tener más confianza en sí mismos, y en la capacidad de superar dificultades y problemas.

Nuestro Ejército Rebelde vivió 25 meses en las mismas condiciones que ustedes practican, o realizando las mismas cosas que ustedes hacen en los centros de exploradores, con una desventaja de nuestra parte: a pesar de que algunos de nosotros habíamos sido exploradores, a pesar de que había algunos campesinos entre nosotros, nosotros no sabíamos, al principio, lo que ustedes aprenden en esos centros de exploradores.

A decir verdad, nosotros al principio no usábamos la hamaca; nada, no se nos había ocurrido, a pesar de todo, cómo resolver el problema del descanso; creíamos que podíamos dormir en el suelo, bueno, y estábamos dispuestos a dormir en el suelo. Y las primeras semanas, pudiéramos decir los primeros meses, dormíamos en el suelo. A veces, como eran montañas, nos acostábamos en la falda de la montaña y amanecíamos dos o tres metros más abajo, íbamos rodando sin darnos cuenta; hasta que volvimos a descubrir la hamaca, que fue un adelanto considerable.

Imagínense ustedes un día de lluvia fuerte, cuando uno tiene que acostarse sobre el lodo prácticamente.

El otro gran descubrimiento fue el nylon, porque descubrimos con ello la forma de llevar un techo en la mochila. Ya cuando teníamos hamacas y nylon, colgábamos las hamacas, poníamos encima el nylon suspendido por un cordelito sobre la hamaca y hasta temporales de tres días pasamos, tres días lloviendo sin mojarnos. Claro, a veces por la soguita de la que cuelga la hamaca rodaba el agua y se mojaba la hamaca; pero entonces le aplicamos un invento, le poníamos una tirita a la soga a cada lado antes de llegar a la hamaca y el agua entonces se dirigía hacia el suelo y no nos mojábamos. Eso tal vez ustedes lo sepan, pero por si no lo saben yo se los cuento: cuando ustedes tengan que acampar en un día de mucha lluvia, aunque tengan nylon y tengan hamacas, cuando estén en los bosques, si se les moja la hamaca por el agua que rueda por la soga; tienen que resolver ese problema.

También con la alimentación pasábamos mucho trabajo: comíamos cuando había alguna casa por las proximidades, si había ollas, si había alimentos allí. Al principio no cargábamos los alimentos con nosotros; si no aparecía la casa, nosotros no comíamos. Entonces, hicimos otro descubrimiento, que fue llevar la olla arriba y llevar también algunos alimentos: llevábamos sal, si había grasa llevábamos un poco de grasa en botellas, un poco de frijoles, un poco de arroz. Marchábamos a veces durante todo el día y al anochecer; al anochecer, entonces, se organizaba el campamento y se preparaba la comida. Ya no necesitábamos ninguna vivienda para resolver el problema de los alimentos, los llevábamos encima y los preparábamos nosotros. Eso nos daba una gran libertad de movimiento, nos permitía movernos grandes distancias, sin llegar a ninguna vivienda, sin ser vistos, y significó también un adelanto considerable. Eran cosas sencillas: la hamaca, el nylon, los alimentos en la mochila, algunas cosas para cocinar, podía ser una olla, podía ser un cubo, la cocina por escuadra, significaron un progreso extraordinario para nosotros durante nuestra guerra de liberación.

Todas esas cosas ya ustedes también las saben hacer y muchas más, porque ninguno de nosotros sabía lo que saben ustedes, que es armar y desarmar la casa de campaña en cuestión de minutos. No sabíamos, no teníamos casa de campaña, desde luego. Eso que hacen ustedes con los ojos cerrados, con un pañuelo, una venda sobre los ojos, tirarse de la hamaca, ponerse los zapatos, recoger la hamaca, amarrarla y estar listos en cuestión de unos minutos, eso no lo sabíamos hacer nosotros, porque nadie nos lo había enseñado, no habíamos tenido oportunidad de aprenderlo.

Y yo me quedo maravillado cuando veo todo lo que ustedes saben hacer en los campamentos; cómo ustedes cocinan, cómo ustedes preparan el terreno, cómo hacen incluso esa cocinita con la chimenea. Para nosotros uno de los problemas más serios era que, precisamente, por el día no se podía cocinar, porque teníamos los aviones dando vueltas constantemente y el humo nos podía delatar. Pero yo he visto que ustedes preparan ahí unas papas y unas cosas, en unas cocinas que ni siquiera producen humo. Yo pensaba: qué magníficos guerrilleros habrían sido estos compañeritos pioneros, con todos esos conocimientos, con toda esa experiencia que tienen. Es realmente extraordinario.

Y nos satisfizo mucho la noticia, de que ya más de 600 000 pioneros se han iniciado en el movimiento de exploradores (Aplausos). Hace algunos años no teníamos esta actividad; en los primeros años de la Revolución, toda la atención se concentró, primero, en la alfabetización, que se realizó con la participación de nuestros estudiantes; después, la construcción de escuelas, la formación de maestros, todo el desarrollo educacional para nuestros pioneros. Pero no teníamos ni un centro de exploradores de pioneros, ni un palacio de pioneros; no teníamos, en fin, ni campamentos, ni palacios, ni centros de exploradores hace apenas algunos años. Si mal no recuerdo, cuando nos reunimos cerca del Parque "Lenin" o en el área del Parque "Lenin" hace varios años, muchas de esas cosas no existían, tal vez había un palacio de pioneros. Sin embargo, cuánto hemos avanzado en los últimos años.

Los compañeros del Partido, los compañeros de las organizaciones de masa, los compañeros de los Poderes Populares, respondieron al llamamiento que se hizo de impulsar los campamentos de pioneros, los centros de exploradores, los palacios de pioneros, y como consecuencia de ello, hoy ya tenemos un buen número de instalaciones pioneriles. Ustedes saben, por ejemplo, ¿cuántos centros de exploradores tenemos? ¿No lo saben? ¿Tú no lo sabes? ¿Y dónde está Maceíto por ahí? ¿No lo sabe? El de la Protesta de Baraguá. Tú, ¿no sabes cuántos centros de exploradores tenemos? ¿Ninguno lo sabe? ¿Tú lo sabes? Tampoco. Ah, ¿aquel fue el que hizo de Maceo? Pero no sabe cuántos centros de exploradores tenemos, ¿verdad? ¿Nadie lo sabe? A ver, ¿cuántos? ¿Cuántos dice?

(Le dicen: "Noventa y ocho").

(Le dicen: "Sesenta y uno") .

No, no, ¿98? Ah, 61. Sesenta y uno con este.

Bueno, pues ya tenemos 61 centros de exploradores. ¿Qué les parece? Hace tres años creo que no teníamos ninguno y ya tenemos 61. ¿Saben cuántos niños pueden ir de una sola vez, con los adultos que los atienden, cuántos exploradores? En un día, en todo el país, puede haber simultáneamente casi 14,000 pioneros exploradores. ¿Saben cuántos pioneros exploradores pueden pasar por estos campamentos al año? Más de medio millón de pioneros exploradores. ¿Les parece mucho? ¿Saben cuántos han pasado por los centros de exploradores que tenemos, desde el mes de septiembre hasta hoy? ¿No lo saben? Doscientos treinta y nueve mil trescientos cincuenta y cinco pioneros y adultos. Bastantes.

En este momento se construyen ocho centros más, así que vamos a tener 69 con capacidad para más de 15 000 pioneros exploradores.

Como ya les dije, se han incorporado al movimiento de exploradores más de 600 000 pioneros. Ahora tenemos este centro, que es el número 61. ¿Ustedes lo han visto, verdad?

¿Visitaron el centro? Lo vieron. ¿Qué les parece este centro? ¿Está bonito? Está bello, dices tú. ¿Pero no les parece demasiado bello? Yo creo que al proyectista y a los constructores se les fue la mano. Sí. Parece un centro turístico. Está demasiado bonito. Yo creo que está demasiado cómodo este centro de exploradores: techos de tejas de barro, unas cocinas tremendas... (Le dicen algo). ¿Cómo? Parece un hotel (Risas). Entonces, si parece un hotel o un motel, no parece un campamento de exploradores.

Yo les voy a explicar lo que pasó. Como este centro de exploradores está situado cerca de la Escuela "Lenin", en las proximidades del Parque "Lenin", y en el perímetro del Jardín Botánico, en un área muy desarrollada, muy bonita, con muchas edificaciones nuevas, entonces los proyectistas quisieron hacer algo que estuviera en armonía con el resto de las construcciones de esta área de los alrededores de la ciudad. Y por eso, en vez de guano, le pusieron tejas. Se ve muy bonito, no hay duda. Pero a mí me parece que los campamentos de exploradores deben ser de guano. Admitido, admitido que este haya quedado tan sofisticado, como se dice por ahí, tan fino, tan bello, tan bonito, pero que sea el único, el único con esa arquitectura. No, no, no. Fíjense que no es un hotel de turismo lo que estamos haciendo. Que sea uno nada más, y esto como una concesión a la arquitectura de la zona; pero los verdaderos, los que parecen más típicos, los que recuerdan la vida de nuestros mambises, la vida de los rebeldes, los que nos recuerdan el campo son los de edificaciones de guano, no de tejas.

Este lo vamos a dejar así porque ya lo hicieron, ya no se puede hacer otra cosa. Pero mi recomendación al movimiento de pioneros exploradores, y mi recomendación a los compañeros de la Juventud, es que en los centros de pioneros exploradores las instalaciones deben hacerse de guano, y tener este aquí como una belleza particular, y de todas formas utilizarlo.

También es indiscutible que el área escogida es maravillosa; los árboles que hay en la orilla de ese arroyo que ha servido de escenario para hacer este centro de exploradores, las proximidades, la inmediatez con el Jardín Botánico, le da características especiales al centro. No lo vamos a usar de inmediato, vamos a tardar como dos meses, porque estamos haciendo un estudio para ver hasta qué forma ese peso que se le ha añadido arriba puede ser bien resistido por las vigas de madera que tiene. Ya llegó una comisión de técnicos de alto nivel, ellos aseguran que el campamento, que el centro es seguro; pero no obstante, para darle más seguridad todavía, aconsejan una serie de medidas de fortalecimiento de las estructuras, de manera de poderles dar aun más seguridad a las instalaciones.

También hay que trabajar en las áreas verdes, porque este centro de exploradores, con un gran esfuerzo, se ha hecho en unas cuantas semanas; entonces, todavía se ven las huellas de la construcción, los rastros de los carros, las tierras removidas. No estará en óptimas condiciones este centro hasta que no tenga las áreas verdes completas, y además, hasta que no se le haga el reforzamiento que aconseja la comisión de técnicos de alto nivel. Si lo hubiéramos construido de guano, no tendríamos esos problemas. Pero ahora, tenemos la responsabilidad de buscar el mil por mil de seguridad en las instalaciones, y hacerle todos los reforzamientos que se requieren para tener absoluta, plena y total seguridad.

Pero no cabe dudas de que el campamento es una maravilla tal como ha quedado, a pesar de mis protestas, de que está demasiado bonito, demasiado sofisticado para centro de exploradores de pioneros. Y que quede constancia de la recomendación, no se les vaya a ocurrir a otras ciudades, querer hacer un campamento como este. Va a ser el más bonito de Cuba, por lo menos, en cuanto a edificaciones. También tiene una naturaleza preciosa, casi insuperable, pero no es, a mi juicio, el tipo de centro ideal para los pioneros exploradores. Yo pienso que ustedes entienden esto, ¿verdad?, ¿lo entienden? (Le responden: "¡Sí!").

Además, nos cuesta más caro. A lo mejor con lo que nos cuesta un centro de exploradores de este tipo, podemos hacer cinco centros, ¿no es mejor? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Está bien.

Ahora, sobre los campamentos de pioneros. ¿Ustedes saben cuántos campamentos tenemos?, ¿no lo saben tampoco? Pero ustedes no saben nada. Ustedes sí conocen que existe uno, ¿verdad? ¿Cuál? ¿Cómo dicen ustedes que se llama?

(Le responden: "Tarará"). ¿Tarará? (Le responden: "José Martí"). ¡Ah!, "José Martí". Está bien. Porque a mí a veces me pasa eso, digo el de Tarará, pero digo enseguida: caramba, no, el "José Martí". Que me pase a mí, se puede explicar, pero a ustedes, que les pase a ustedes, que han nacido casi en ese campamento de pioneros, no: es el campamento "José Martí". Ustedes saben que es el mayor del país.

¿Quién de ustedes no ha estado en el campamento "José Martí"? Que levanten la mano todos los que han estado en el campamento "José Martí". (Los pioneros levantan la mano). Todos han pasado por el campamento. Que levanten la mano los que han ido más de una vez (Risas). Bueno, está bien, no voy a seguir preguntando, porque van a estar levantando la mano siempre. Es decir, se utiliza ese campamento en período de vacaciones y se utiliza también en período de clases; en período de vacaciones por una semana cada alumno, en período de clases, como centro docente-recreativo, por 15 días.

Bueno, en este verano van a pasar por el campamento "José Martí", según los datos de "Juventud Rebelde" —y yo leo mucho "Juventud Rebelde", a veces me equivocan también, porque había leído en el informe sobre este centro de exploradores que tenía tres kilómetros cuadrados; yo me quedé asombrado, enseguida llamé al compañero Landy, llamaron después a la Juventud Comunista para averiguar qué tamaño tenía eso. Porque yo calculo: tres kilómetros cuadrados, más de 20 caballerías, el centro de exploradores se ha tragado el Jardín Botánico, ¿cómo puede ser eso? Porque es que el Jardín Botánico les dio una parte de su superficie, una de las más bonitas, por lo menos donde hay más vegetación natural. Es rico el Jardín Botánico. El Jardín Botánico tiene más de 40 caballerías; pero yo dije: ¿veinte? ¡Se han vuelto locos! Yo no había visitado todavía el centro de exploradores, pero después me dijeron: no, son seis hectáreas, y después, por fin, supe la cifra definitiva. No es como dijo "Juventud Rebelde", son dos caballerías; pero dos caballerías, ¡no se sabe lo que valen dos caballerías aquí en este lugar! Está bien, dos caballerías está bien. Al Jardín Botánico le quedan 42 caballerías todavía. Espero que ustedes no se apoderen de más tierras del Jardín Botánico.

Bueno, pues como les iba a decir, según los datos de "Juventud Rebelde", 100 000 pioneros van a pasar por el campamento "José Martí" durante las vacaciones.

Ahora tenemos ya 22 campamentos de pioneros. En el curso que acaba de transcurrir pasaron por estos campamentos, casi 300 000 pioneros. Se construye un nuevo campamento en la provincia de Holguín y se amplían las instalaciones del de Santiago de Cuba. Así que contaremos con 23 campamentos para el próximo curso, lo que permitirá que puedan pasar por esos campamentos en un año, más de 465 000 pioneros.

Bien, ya tenemos dos cosas. Espero que a ustedes no se les olviden los datos que están recibiendo aquí, para cuando alguien les pregunte cuántos campamentos tienen los pioneros y cuántos centros de exploración, sepan contestar.

Ahora, palacios de pioneros —déjenme ver aquí. ¡Ah!, ustedes estaban equivocados. Eran 60 de exploradores y 61 palacios de pioneros. Palacios de pioneros son 61, con una matrícula semanal de 124 917 pioneros. Se encuentran en construcción 19 palacios más, de modo que para el próximo curso tendremos alrededor de 80 palacios de pioneros, con una matrícula semanal de casi 150 000 pioneros. Ya hay 78 municipios del país que cuentan con los palacios de pioneros.

Así que en estos últimos años hemos crecido considerablemente: en palacios de pioneros, en centros de exploradores, en campamentos de pioneros. Y también, además de los campamentos de pioneros y de los centros de exploradores y de los palacios de pioneros, ¿qué tenemos?, ¿qué otra institución pioneril tenemos?, ¿no lo saben?, ¿cuál? (Le responden: "La campiña pioneril"). La campiña pioneril, correcto. Tenemos 52 campiñas pioneriles en cooperativas y se están construyendo 24 más. En el día de hoy se inaugura también una campiña pioneril en la provincia de Matanzas, en una empresa agrícola, la empresa "Lenin", de Jovellanos. Así que en total contaremos el próximo curso con 248 instalaciones pioneriles de todo tipo, con una capacidad de 1 200 000 pioneros. De este modo, se puede garantizar que el 80% de los pioneros de tercer grado en adelante, puedan pasar por estas instalaciones en un solo año.

Es decir, la Revolución ha logrado crear ya instalaciones pioneriles para el disfrute del 80% de los pioneros del país. Seguiremos trabajando, seguiremos construyendo campamentos de pioneros, centros de exploradores, palacios de pioneros, campiñas pioneriles, etcétera, hasta que el ciento por ciento de los pioneros tengan oportunidad de participar en estas instalaciones.

No es, desde luego, lo único que la Revolución ha hecho por los niños, por los pioneros. Como explicó la compañerita Enith, se han construido muchas escuelas, hospitales para los niños, eso fue lo primero, y realmente podemos sentirnos satisfechos de que al conmemorarse el XXX aniversario del Moncada, y próximo a conmemorarse el XXV aniversario del triunfo de la Revolución, podamos decir que todos los niños de nuestro país cuentan con escuelas, todos, el ciento por ciento de los niños; no solo con escuelas primarias, sino también con escuelas secundarias, escuelas preuniversitarias, escuelas politécnicas y tecnológicas. Que además, nuestro sistema educacional garantiza la posibilidad a los más destacados estudiantes de continuar sus estudios superiores en cualquiera de las ramas. Es decir, se ha creado un sistema educacional que garantiza posibilidades ilimitadas a todos los niños y adolescentes y a toda nuestra juventud.

Tenemos que seguir trabajando en ese sistema educacional, todavía no es perfecto. Por ejemplo, no todas las escuelas primarias del país tienen doble sesión, hace falta la doble sesión en las escuelas primarias, ¿ustedes están de acuerdo? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Bien.

¿Cuántos de ustedes tuvieron la doble sesión en la escuela primaria?, que levanten la mano los que tuvieron la doble sesión. (Muchos pioneros levantan la mano). Bueno. Ahora, que levanten la mano los que no tuvieron o no tienen doble sesión en la escuela primaria. (Algunos pioneros levantan la mano). Claro, no son muchos; pero ustedes son pioneros de la Ciudad de La Habana, que tiene, creo que el 80%. (Le dicen: "El 90"). El 90% de los alumnos de primaria de la Ciudad de La Habana tiene doble sesión ya, eso es un gran avance en todos los sentidos. Ahora, otras provincias no tienen un porcentaje tan alto de doble sesión en la escuela primaria. Sin embargo, las escuelas secundarias urbanas no tienen doble sesión, los preuniversitarios urbanos no tienen doble sesión. Otra cosa son las escuelas secundarias en el campo, y los preuniversitarios en el campo, ya esos integran un sistema educacional más perfecto.

Ahora, ¿cuántos de los que están aquí estudian secundaria?, que levanten la mano. (Varios pioneros levantan la mano). Ustedes son de escuelas secundarias urbanas, ¿verdad? Todos. ¿Cuántos tienen doble sesión? Ninguno. Bien. ¿Y qué piensan ustedes? ¿Qué hacen ustedes cuando no tienen clases por la tarde en la Ciudad de La Habana? ¿Qué hacen? (Exclamaciones de: "Estudiar"). ¡Estudiar! ¿Todos, todos estudian cuando no tienen la doble sesión? (Exclamaciones de: "¡Sí!") No, pero estamos hablando serio (Risas). Hacen deporte también (Exclamaciones de: "¡Sí!") Claro, ¿y qué más? Y pasean un poco también por la ciudad, ¿verdad? Bastante.

¿Qué piensan ustedes de la doble sesión? (Del público le dicen algo). Incluso, para hacer deportes, para llevar la actividad organizada, ¿no serían mejores las escuelas con la doble sesión, las secundarias? Así aprenden más. ¿Y los padres de ustedes no estarían más satisfechos y más tranquilos si saben que ustedes están en la escuela? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Seguro. Estamos pensando en el futuro, ahora no podemos, porque no tenemos suficientes instalaciones; pero pensamos en el futuro, ya que no podemos hacer escuelas en el campo para todos los estudiantes de nivel medio, que las escuelas secundarias urbanas y los preuniversitarios tengan doble sesión. Tardaremos años en lograr esto, pero es un propósito; por eso digo que todavía nuestro sistema educacional requiere de esfuerzos adicionales para perfeccionarlo.

¿Ya ustedes saben lo que van a estudiar o no? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Por ejemplo, quiero hacer una pregunta: ¿cuántos de ustedes van a estudiar para maestros? Hay algunos, hay algunos, hay bastantes. ¿Tú no? ¿Y tú qué vas a estudiar, tú? (Le responde: "Abogada"). Tú vas a ser abogada, está bien. ¿Vas a ser juez, fiscal o qué? (Le responde: "Abogada"). Abogada. ¿Y quiénes son los que van a estudiar, por ejemplo, ingeniería? (Exclamaciones). Ah, muy buena noticia, muy buena noticia. Muchos quieren estudiar ingeniería. Correcto. Ahora, saben que tienen que estudiar duro, tienen que estudiar duro, porque se entra en la universidad por expediente, según el rendimiento escolar.

Ahora, levanten la mano los que van a estudiar medicina (Muchos pioneros levantan la mano). Hay bastantes. Está bien. Pero saben que tienen que luchar muy duro si quieren llegar a formar parte del Destacamento de Ciencias Médicas, porque también son seleccionados por su expediente, por su conducta, etcétera. Luego, ustedes están seguros de que si se lo proponen pueden estudiar lo que quieran (Exclamaciones de: "¡Sí!") ¿Por qué? (Del público le dicen algo).

Ahora, ¿todos los niños y los jóvenes en América Latina tienen la misma oportunidad que ustedes? (Exclamaciones de: "No"). Desgraciadamente no, desgraciadamente no. Desgraciadamente queda mucho analfabetismo, todavía hay muchos niños sin escuelas, muchos niños sin hospitales.

La Revolución se ha preocupado también por la salud de ustedes, y yo pienso que ustedes se preocupen, y que cooperen con todos los planes de protección de la salud. Se han creado muchos hospitales pediátricos, se van a construir más y también, policlínicos; se han construido salas de terapia intensiva en todos los hospitales pediátricos del país. Se ha reducido extraordinariamente la mortalidad infantil, se han erradicado muchas enfermedades que afectaban a nuestros niños, la primera de ellas fue la poliomielitis que constituía un verdadero azote en nuestra patria. No existen exactamente las mismas condiciones en todos los países de América Latina: hay muchos niños sin policlínicos, sin médicos, sin hospitales. Es también muy satisfactorio que próximo a cumplirse el XXX aniversario, se pueda decir que la salud de los niños de nuestro país está garantizada.

Hay otras instituciones que se han ido desarrollando para el disfrute de la población, especialmente de los niños. En las inmediaciones de aquí está el Parque "Lenin", yo supongo que muchos de ustedes han visitado el Parque "Lenin", que levanten la mano los que han visitado el Parque "Lenin" (Varios pioneros levantan la mano). Ahora, que levanten la mano los que han visitado el zoológico (Todos los pioneros levantan la mano). ¡Todos! ¿Pero qué zoológico, el viejo o el nuevo? (Exclamaciones de: "¡El nuevo!") No, el nuevo ustedes no lo han visto (Exclamaciones de: "¡Sí!") No (Del público le dicen algo).

Ese, ¿cuál?, ese es el viejo, ese es un viejo rejuvenecido, si ustedes quieren, pero es viejo. (Un niño le dice: "Yo sí he ido al nuevo"). ¿Tú has ido al nuevo? Ah, sí, es que tú eres del grupo aquel que estaba en Palacio hace unos días. Ah, sí, ya me acuerdo, tú y el grupito tuyo fueron; pero ustedes, cuando yo hablé con ustedes, no sabían que existía, que se estaba construyendo un zoológico nuevo. Ese zoológico lleva años haciéndose, despacito, ¿no? Tiene muchos leones, tiene elefantes. (Del público le dicen: "y tigres"). Tigres, montones de tigres. Tiene de todo. Le faltan algunas jirafas, pero vienen las jirafas.

Hace varios años, les decía, se está construyendo ese zoológico; no está terminado, se lo advierto. ¿A ti te gustó? (Exclamaciones de: "¡Sí!") A ti te gustó, ¿verdad? Bueno, en ese zoológico los animales estarán sueltos (Exclamaciones). Sí, sí, sueltos, pero no te asustes; aunque estarán sueltos los animales. Los tigres también creo que estarán sueltos, los leones sueltos, todo el mundo suelto. Cada uno está en su área, pero suelto.

¿Ustedes quieren que les dé algunos datos del zoológico? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Bueno, yo tengo aquí algunos datos, porque pensé que les interesaría saber que en este año 1983, también se abre el zoológico, aunque no está completamente terminado. Pero ya llevan mucho tiempo ahí gran número de animales, y no vamos a esperar que esté todo terminado, porque lleva tiempo; lleva tiempo, pero esos leones comen mucha carne de caballo y consumen muchos alimentos, hay que aprovecharlos.

Bueno, sobre el Parque Zoológico les puedo decir que ya existen numerosas obras realizadas, y en la parte llamada zona de reproducción, viven más de 900 animales; la gran mayoría logrados por intercambios con otros zoológicos y, otra parte, nacidos allí. Tienen dromedarios, cebras, rinocerontes, hipopótamos, antílopes, tigres, hienas, etcétera. Este año se van a adquirir algunos más, entre ellos las jirafas.

Ahora bien, escuchen esto, El Parque Zoológico Nacional tiene como principio fundamental que los animales se exhiban en condiciones similares a las que tienen en la naturaleza, sin construcción o elemento artificial alguno visible, y que se les vea como si estuvieran libres. Es por ello que la construcción no es fácil, ya que cada especie animal tiene requerimientos propios que son necesarios tener en cuenta.

Ahora, para este año ya se debe inaugurar la zona de mantenimiento y servicio, que dará el aseguramiento necesario a todo lo que se construya; la zona de reproducción, donde actualmente están alojados los animales con que se cuenta, todos muy bien aclimatados; la pradera africana, donde vivirán sueltos, en un área de seis caballerías, unos 150 animales africanos: elefantes, jirafas, cebras, rinocerontes, búfalos, antílopes, avestruces, etcétera, los que se verán desde los ómnibus que circularán por la misma, y en cada uno de ellos irá un guía que informará acerca de los animales que se vayan observando. No van a pie, van por allí en ómnibus, construidos especialmente para eso.

La exhibición de los leones. Es una antigua cantera, de gran tamaño, donde vivirán sueltos de 40 a 50 leones. Se entrará a esta exhibición por un túnel, en ómnibus especiales que recorrerán la misma, que circularán entre esos majestuosos y feroces animales. También en lo alto del paredón, habrá un gran mirador que se proyecta hacia adentro de la exhibición. El que no quiera pasar en ómnibus, los puede ver desde el mirador.

Esto no es nuevo, existe en otros países y también por supuesto en la naturaleza. Nosotros estuvimos en Africa en un zoológico natural, en Ngorongoro, Tanzania, y allí están sueltos todos los animales. Aquí no van a estar los leones juntos con los antílopes, o las cebras, pero allí están todos juntos. Pero qué ocurre, que hay un equilibrio natural y, naturalmente, los leones de vez en cuando se comen un antílope, o se comen una cebra, pero el número de cebras o antílopes que nacen por año es tal que se reemplazan, y viven todos en estado de equilibrio, tal como los produjo la naturaleza.

Ahora, en este zoológico los leones van a estar sueltos, pero no van a estar sueltos con los otros animales, porque si se empiezan a comer las cebras y los antílopes, nos quedamos sin antílopes y sin cebras. Ellos estarán, digamos, juntos, pero no revueltos. Van a estar los leones en su área, que es una vieja cantera. Es muy interesante.

Lo que todavía no me han explicado bien es qué ocurre si el ómnibus se para allí entre los leones, de repente, si le falla el motor, o si se poncha el carro, porque todo eso puede pasar. Pero me imagino que esté previsto eso, ¿no? A lo mejor tienen un azotador de leones allí que los tranquiliza a todos, o a lo mejor tienen una grúa, tienen un camión, yo me imagino que tengan todas las condiciones de seguridad para poder visitar a los leones en ómnibus, y sin que los leones se monten dentro del ómnibus.

¿Pero ustedes tienen miedo? (Exclamaciones de: "¡No!") ¿Tú, sí? Pero, ¿cómo una pionera exploradora va a tenerles miedo a los leones?, de ninguna forma. Cuando a ustedes los lleven por allí, saben que van a estar en completa seguridad. ¿Ustedes van a ir a ver los leones en ómnibus? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Está muy bien. (Un pionero le dice: "Comandante, cuando nosotros lo visitamos, los ómnibus estaban reforzados"). Estaba reforzado el ómnibus, ¿verdad?, no había problemas. Ah, el carro-grúa lo podía recoger. Mira, un pionerito que ya visitó el zoológico nuevo, está dando información. Entonces, no hay problema ninguno; tú aconsejas que vayan sin temor, ¿verdad? Bueno, les voy a leer más cosas.

Se inauguran también dos exposiciones especiales para algunas cebras y antílopes, que no se deben soltar en la pradera africana para evitar cruzamientos. La zona de recreación infantil, donde los niños podrán disfrutar de juguetes diseñados para que el juego contribuya a su desarrollo físico y mental, y también habrá un anfiteatro para representaciones de marionetas, títeres, payasos, etcétera.

El zoológico infantil. Vean lo que dice aquí: en esta unidad habrá un área de animales domésticos, donde podrán observar las madres con sus crías, y otra de animales silvestres mansos, criados a mano, que los pioneros podrán cargar o acariciar, de acuerdo con las instrucciones de los técnicos. Esos son animales domésticos pacíficos. Se espera que aquí se pueda tener un elefantico de no más de 40 pulgadas. Será un elefante enano, ¿verdad?, cebritas, antílopes, llamas, búfalos, leones, tigres, chimpancé, mapaches, todos recién nacidos y criados a mano, en la unidad de cría del propio Zoológico. No sé si se le podrá pasar la mano a un tigre allí, pero dice que habrá de estos animales recién nacidos y criados a mano en la unidad de cría del propio Zoológico. Habrá un lago para aves acuáticas, etcétera.

Va a ser un gran zoológico, y ya desde fines de año, esperamos que ustedes puedan comenzar a visitarlo.

Tenemos también aquí el Botánico. Seguramente que ustedes no sabían que el Botánico les dio dos caballerías de tierra para el Centro de Exploradores. No lo sabían, ¿verdad? Bueno, cuando vean a la directora del Botánico le dan las gracias.

¿Quieren algunos datos sobre el Botánico, les interesa? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Bueno, este Jardín Botánico tiene casi 600 hectáreas de extensión, organizadas en 19 zonas, que corresponden a diferentes criterios ecológicos, sistemáticos, económicos. Su desarrollo comenzó en 1968, y sus principales objetivos son educativos, recreativos y científicos, por lo que brindará servicios a estudiantes de todos los subsistemas de educación —incluidos ustedes—, a especialistas y al pueblo en general. El territorio se encuentra recorrido por 35 kilómetros de caminos, que facilitan acceso a todas sus zonas. Hay una gran cantidad de árboles, hay árboles de Cuba, árboles de América Latina, árboles de Asia, árboles de Africa, incluso árboles de Australia y Oceanía; tiene una colección de palmas de 140 variedades, colección de frutales y otras plantas económicas; posee más de 500 especies de orquídeas, 1 037 especies de cactus y 600 otras especies de aráceas, begonias, helechos, curujeyes y otras plantas de sombra.

Este jardín también se va, no a inaugurar, va a estar listo para poder ser visitado desde fines de este año, y tiene una gran importancia, aparte de una gran belleza; hay que tener mucha paciencia para hacer uno de estos jardines, porque hay que sembrar la matica y esperar muchos años, pero decenas de científicos y cientos de trabajadores han estado luchando durante 15 años, ¡quince años!, para crear este Jardín Botánico que está en las inmediaciones del Centro de Exploradores; y también, desde fines de año, los pioneros podrán visitar este Jardín Botánico.

Esas son las noticias que les puedo dar, ¿son buenas? (Exclamaciones de: "¡Sí!") ¿Qué es lo que más les gusta de todo, la doble sesión en las escuelas urbanas? (Risas). Eso en el futuro, eso no llega todavía, eso tarda un tiempo. ¿Lo que más les gusta es el Zoológico? (Exclamaciones de: "¡Sí!") ¿Por qué? (Le responden: "Porque hay muchos animales"). ¿Y el Botánico no lo van a visitar, a ustedes no les gustan las plantas? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Van a visitar también el Botánico. Correcto. ¿Y ustedes han visitado el Acuario? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Que levanten la mano los que han visitado el Acuario. Está bien. Es el Acuario de Miramar.

En el futuro más lejano, tendremos también un acuario nuevo, pero ese lleva tiempo, lleva recursos y hay que hacerlo con calma, pero ya se están haciendo los proyectos de ese nuevo acuario. Sé que a los niños les gusta mucho el Acuario. Vamos a mejorar el que tenemos ahora, pero como les decía, se está haciendo el proyecto de un nuevo acuario. De modo que tendremos Zoológico, Botánico, Acuario, Parque "Lenin", Centro de Exploradores, Palacio de Pioneros; el Circo existe, pero no creo que esté entre los mejores del mundo, creo que nuestro Zoológico va a estar entre los mejores del mundo; nuestro Botánico también va a estar entre los mejores del mundo; nuestro Acuario futuro va a estar también entre los mejores, es un diseño muy bonito. Ahora, el Circo nuestro no está todavía entre los mejores del mundo, pero debemos aspirar también a mejorar el Circo y que un día podamos decir que tengamos un circo que se parezca, por ejemplo, al soviético. Ustedes han visto el Circo soviético, ¿verdad? (Exclamaciones de: "¡Sí!") Es muy bonito. Que levanten la mano los que vieron el Circo soviético. (Varios pioneros levantan la mano). ¿Pero qué tiempo dedican ustedes a estudiar? (Risas.) (Le responden: "Por la noche.") ¿Eh? (Le responden: "Por la noche"). Veo que a ustedes no se les quedó nada sin ver aquí en la Ciudad de La Habana.

Bueno, pues todas esas cosas se han desarrollado y se han construido después de la Revolución.

Nuestros niños se educan también en un gran sentimiento patriótico. La Revolución nos ha traído muchas cosas, esa es precisamente la obra de la Revolución, pero hay que defender la Revolución.

Un avión, pero no viene a hacer ninguna maniobra por aquí (Risas).

Como ustedes saben, la Revolución tiene enemigos. ¿Cuál es el enemigo fundamental de la Revolución? (Le responden: "Los yankis"). Los yankis, el imperialismo yanki. Por eso los pioneros tienen también que ir a los Círculos de Interés de las Fuerzas Armadas, por eso los pioneros tienen que interesarse por las armas, por la preparación militar; tienen que prepararse muchos pioneros para ingresar en el futuro como cuadros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, o como combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, o en las milicias como parte de nuestro pueblo; porque ustedes saben que a nuestra patria y a nuestra Revolución no la defienden solo los soldados, la defiende todo el pueblo, la defienden los reservistas, la defienden los miembros de las Milicias de Tropas Territoriales, que son cientos de miles. Y en el futuro, ustedes que hoy son pioneros, ustedes que hoy participan en los centros de exploración, tienen que participar también en las milicias, tienen que participar también en la defensa del país, una parte de ustedes tiene que ir a las escuelas militares. Los varones tienen que prepararse para la defensa y las mujeres también.

Como ustedes saben, hay muchas mujeres en las Milicias de Tropas Territoriales, porque la Revolución la tiene que defender todo el pueblo, de todas las edades: jóvenes, viejos y niños, hombres, mujeres.

Yo estoy seguro, estoy seguro, completamente seguro de que si el enemigo atacara a nuestro país, si el enemigo agrediera a nuestro país, tendría que enfrentarse incluso a nuestros niños, más tarde o más temprano (Aplausos).

Los pioneritos que asisten a los Círculos de Interés de las Fuerzas Armadas, han podido comprobar que son capaces de manejar, incluso, un tanque; que son capaces de manejar armas complicadas con 12, 13, 14, 15 años; que son capaces de disparar, y de disparar bien. Un niño puede hacer muchas cosas, puede ser mensajero. Nosotros teníamos muchachos muy jovencitos que eran mensajeros, o avisaban cuando venía el enemigo; eran exploradores, traían información valiosa a las tropas rebeldes. Y, por último, si un niño es muy chiquito y no pudiera usar un arma, no pudiera hacer una tarea directa en la defensa, le queda todavía una función: crecer, para llegar a ser un día soldado de la patria. Recordando aquello que le dijo la madre de los Maceo al más pequeño: "¡Empínate!" ¡Empínate, para luchar por la patria! (Aplausos.) Es muy importante que nuestros pioneros se eduquen en ese sentimiento patriótico.

Nosotros no queremos que haya guerra, no deseamos que alguna vez nuestra patria sea agredida, no deseamos circunstancias como esas, duras, difíciles; pero antes de renunciar a nuestros principios, antes de renunciar a nuestra independencia, antes de renunciar a la Revolución, preferimos la muerte. Eso es lo que dicen también nuestros niños y dicen también nuestros pioneros (Aplausos).

Por eso nuestros pioneros también se educan en las ideas revolucionarias, por eso nuestros pioneros hacen deportes, hacen ejercicios y se preparan para el futuro. Pero nadie piense que porque tenga 10 años, tenga 9 años, tenga 12 años, no sería capaz de hacer algo por su patria.

Desde luego que el deber primero de ustedes, el número uno a esta edad, es... (Exclamaciones de: "Estudiar"). Estudiar, muy correcto. Ese es el deber primero, el estudio. También cuidar la salud, practicar el deporte. Además del estudio, la disciplina y la educación, es muy importante eso que llamamos la educación formal; el respeto a los maestros, el respeto a los padres, el respeto a los mayores, la buena educación que deben recibir en la familia y en la escuela; el hábito de seguir los buenos ejemplos, no los malos ejemplos. Hay dos formas de combatir los malos ejemplos; una de ellas es criticarlos, y otra es no imitarlos.

Desgraciadamente, a veces hay personas mayores que no tienen educación. Es verdad que la cuna fundamental de la educación debe ser el hogar, pero, desgraciadamente, nuestra anterior generación no recibió la educación que reciben ustedes. En término general, las familias son educadas y, en término general, las familias se ocupan de sus hijos, eso lo sabemos bien, y sobre todo las familias revolucionarias. Y como la inmensa mayoría de las familias son revolucionarias, sabemos que se preocupan por los hijos; pero siempre hay excepciones. Desgraciadamente hay hogares desunidos, desgraciadamente hay hogares con problemas, y esos problemas, muchas veces, se reflejan en los niños, se reflejan en los adolescentes, en los jóvenes. Desgraciadamente hay personas adultas que no tienen buena educación, hay personas que no respetan a los mayores, hay personas que no respetan a los padres, hay jóvenes y adolescentes que no respetan a los maestros.

Por eso, el deber de ustedes es el estudio, la disciplina, la educación, el respeto a los padres, el respeto a los maestros, el respeto a los mayores, la critica a los que dan el mal ejemplo, la imitación de los mejores. Es decir que los niños tienen, en esta edad, esas obligaciones fundamentales; pero tienen también que irse preparando, desde muy jóvenes, como buenos revolucionarios, como buenos patriotas, como buenos combatientes.

Nosotros no tenemos ninguna duda de que cada generación es mejor y que cada generación será mejor. Yo no tengo ninguna duda de que la actual generación de jóvenes es mejor que la generación nuestra, de la época anterior a la Revolución; pero estoy seguro, y tenemos grandes esperanzas, de que esta generación constituida por ustedes, los pioneros, será todavía mejor que nuestra actual generación de jóvenes; y la generación que venga detrás de ustedes, será todavía mejor que ustedes.

Ustedes decían aquí, a través de la pionerita que habló, de su agradecimiento a la Revolución, de su agradecimiento a los que dieron la vida por la Revolución. Bueno, yo puedo decir lo siguiente, que la Revolución es el pueblo, que la Revolución son ustedes mismos. Lo que hacen nuestros pioneros cuando estudian, cuando trabajan, cuando participan en actividades deportivas, cuando son disciplinados, cuando son educados, cuando son respetuosos, es precisamente revolución (Aplausos).

La Revolución no la hizo una sola generación, la Revolución la comenzó la generación de Céspedes, de Agramonte, de Maceo, de Gómez, de Martí, de Mella, de Villena, de Guiteras; la llevó adelante nuestra generación en el Moncada, en la Sierra Maestra, en la lucha contra las agresiones imperialistas; la lleva adelante nuestra actual generación de jóvenes y la tendrán que proseguir ustedes, esta generación que representan nuestros pioneros (Aplausos).

Por eso, un día como hoy, 17 de julio, en vísperas o a pocos días de conmemorarse el XXX aniversario del asalto al Moncada, yo puedo decir, en nombre de los combatientes de nuestra generación, que estamos orgullosos, felices de nuestros pioneros (Aplausos); que estamos seguros de que serán dignos abanderados de la Revolución. Y que cuando estén en la escuela, cuando estén ante el libro, cuando estén ante el trabajo, cuando estén en el centro de exploradores, cuando estén en el campamento, cuando participen en actividades recreativas o de formación, en cualquier actividad, ustedes harán el máximo, y lo harán, precisamente, como recuerdo, como reconocimiento y como gratitud a aquel numeroso contingente de jóvenes, que el 26 de Julio de 1953, hace 30 años, dieron sus vidas por ustedes.

¡Patria o Muerte!

¡Venceremos!

(Ovación.)