“Los pueblos cuando están unidos, cuando defienden un derecho justo, pueden confiar en sus propias energías, porque no se trata, por supuesto, de un grupo de hombres, como nos han querido pintar a nosotros, gobernando un país. Se trata de un pueblo gobernando un país; se trata de un pueblo entero firmemente unido y con una gran conciencia revolucionaria, defendiendo sus derechos. Y eso lo deben saber los enemigos de la Revolución y de Cuba, porque si lo ignoran están cometiendo un lamentable error”.