Grupos subversivos contra Cuba intentan desde las redes sociales descontextualizar la historia, manipular el pensamiento de los próceres y condicionar el posible acercamiento con Estados Unidos, denunció hoy la prensa local.
 
El noticiero de la televisión cubana explicó cómo estas personas buscan apropiarse de los símbolos nacionales, en particullar de la imagen del Apóstol José Martí.
 
De acuerdo con el material, estos grupos utilizan al Héroe Nacional de la isla para tratar de buscar una legitimidad en sus acciones subversivas por lo que le atribuyen frases que no dijo o manipulan otras que extraen de su contexto discursivo.
 
La prensa televisiva mencionó a la mal llamada radio y televisión Martí, ambas con un trabajo subversivo contra el orden y la estabilidad en Cuba.
 
Además, el noticiero mostró testimonios de estos 'supuestos promotores de la civilidad' que instan a la invasión militar contra la nación caribeña y el ataque de drones a estaciones de policías.
 
De la misma forma, el comentario televisivo explicó los vínculos de personas que viven en el exterior del país con acciones subversivas como las ocurridas en las afueras del ministerio de Cultura el 27 de enero pasado.
 
En ese sentido, se mencionó a Carolina Barrero, quien vive en España y llegó a Cuba a finales de diciembre para impulsar las actividades contrarrevolucionarias aquí.
 
Además, el noticiero desacreditó a estos grupos que quieren poner condiciones ante un posible diálogo entre la isla y Estados Unidos.
 
El audiovisual mostró una carta dirigida al presidente estadounidense, Joe Biden, donde esos individuos exigen una serie de requisitos antes de iniciar cualquier acercamiento bilateral.
 
Según se evidenció, entre los autores de esa misiva están participantes de la farsa de San Isidro, así como miembros de grupos estructurados a través de redes sociales para gestionar actividades subversivas en la mayor de las Antillas.
 
Recientemente, el investigador Yoel Cordoví explicó a Prensa Latina que la campaña mediática contra Cuba promueve una imagen sesgada y descontextualizada de la historia nacional.
 
El también presidente del Instituto de Historia de la nación caribeña enfatizó que esta estrategia no es nueva y se basa en el uso de palabras y hechos fuera de contexto.
 
'Se hace de una manera maniquea, burda e irresponsable con un objetivo político que no está a tono con la ética que debe tener un ser humano', señaló.