La graduación 66 de la Universidad de Oriente (UO) se realizó ante los monumentos funerarios de los padres fundadores de la nación en el cementerio patrimonial de Santa Ifigenia, como muestra de lealtad y compromiso.
 
La ceremonia mediante la cual egresaron mil 294 profesionales rindió también homenaje a los 65 años de la salida de esas aulas tras formarse como Ingeniera Química de la heroína Vilma Espín, paradigma de la mujer cubana.
 
Más de 65 mil graduados han aportado a la sociedad la institución, matriz de la enseñanza superior en el Oriente cubano, de la cual se derivaron las universidades de las provincias de esa porción geográfica.
 
Fueron estimulados los jóvenes más destacados en las diversas esferas de la vida estudiantil y en particular quienes fueron acreedores del mérito científico y los 13 sobresalientes por cada una de las facultades.
 
El licenciado Yaidiel Tamayo, de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, en nombre de los nuevos profesionales expresó la gratitud a quienes les ayudaron durante este lustro y en un sitio sagrado de la Patria la decisión de aportar por un país mejor, con los conocimientos aprendidos.
 
La rectora de la UO, doctora Diana Sedal, los exhortó a ser buenos y cultos, tras un recuento de las complejidades de este lapso, cuando se completó el proceso integrador de los tres centros docentes y se enfrentaron los efectos del recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos.
 
Por primera vez tiene lugar la solemne celebración en la explanada frontal de la necrópolis, donde se alinean las tumbas de Mariana Grajales, la Madre de los Maceo; Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la Patria; José Martí, el Héroe Nacional, y el líder histórico de la Revolución, Fidel Castro.