El silencio de Aznar
En una mesa redonda transmitida por la televisión cubana que tuvo lugar el 25 de abril del 2003, revelé que el entonces presidente del gobierno español José María Aznar, aliado de la superpotencia en genocidios y masacres, se había reunido con el presidente William Clinton el 13 de abril de 1999, en un momento incierto de la guerra contra Yugoslavia, y le expresó textualmente:
“Si estamos en una guerra, hagámosla completamente, para ganarla y no sólo un poco. Si necesitamos persistir durante un mes, tres meses, hagámoslo. No entiendo por qué no hemos bombardeado todavía la radio y la televisión serbias.”
Sobre esto, tanto Aznar como los voceros del gobierno de Estados Unidos, han guardado silencio. Todo lo que sigue se publica por primera vez. Otros materiales, tanto públicos como confidenciales, los utilizaré en sucesivas reflexiones.
[...]
“AZNAR: Voy a hablar sinceramente. Como ya dije al presidente Clinton, lo único que no puede pasar es que la OTAN no gane ahora. Ahora la OTAN se está jugando no ya su credibilidad sino su propia existencia. Si este conflicto se hubiera planteado hace 30 años, no hubiésemos intervenido. En Europa siempre ha habido limpiezas étnicas, enfrentamientos entre minorías y mayorías, disputas religiosas. Ahora ya esto no se puede permitir. Desde el punto de vista político, nunca estaremos a favor de la independencia de Kosovo por lo que dijimos antes.”
Refiriéndose a Chirac, presidente de Francia, dijo:
“Le hablaré mañana en Bruselas. Cuando quiero tener un buen rato con Chirac, empiezo diciéndole que ‘estos americanos son realmente horribles’. Hace tres semanas cené con él en el Elíseo. No sé qué le había pasado con ustedes, pero hablaba pestes. Le dije que bien, pero que yo no venía a hablar de eso.
“Mi idea es que para ganar esta guerra hay que cortar las comunicaciones entre el gobierno de Belgrado y el pueblo. Es vital cortar todas las comunicaciones de Serbia, radio, televisión y teléfono.
“Por otro lado, tenemos que reestructurar nuestra política de información. La política de información de la OTAN es un desastre. Damos la impresión de que nos hemos embarcado en una aventura y no en una guerra. Hay verdaderas lagunas en la comunicación. Hay que avanzar al máximo, cortar todos los suministros y las comunicaciones con paciencia.
“Hay que tener cuidado con Italia y con Grecia. Italia se está viendo muy afectada en su tráfico aéreo y turismo. D’Alema está haciendo un trabajo bueno, teniendo en cuenta sus circunstancias. No hay que dejarle que caiga en soluciones fáciles.
“Tenemos que incrementar la ayuda humanitaria. La contrapartida a los bombardeos es que nuestros ciudadanos perciban la eficacia de nuestra labor humanitaria.
“No tendría sentido cambiar de posición ahora. Ayer hablé con Annan. Le vi muy serio en sus planteamientos. Yo le insistí mucho en esto a Annan. Podemos ser flexibles pero no podemos dar la impresión de que la OTAN se retira.
“Podemos ser flexibles sobre si la OTAN dirigiría o no esa fuerza, pero no podemos contentarnos con la vuelta de los observadores de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa). Además de visibilidad, debe de haber garantía.
“Hay que mantener la estrategia, para ver si es posible que sea derrocado internamente.” (Se refiere al Presidente de Serbia, Slobodan Milosevic)
“Si algunos de sus generales temen que pueden ser acusados ante el Tribunal de La Haya, tal vez cooperen.
Milosevic probablemente intentará lograr un acuerdo. Debemos tratar de que ese acuerdo sirva para debilitar y no para reforzar el poder.
“No tenemos que mencionar siquiera el tema de la operación terrestre.
“Todo el mundo comprende que se estén haciendo planes, lo contrario sería ilógico. Si nuestra estrategia actual no da resultado, habría que explorar otras. Hay que mantenerla sobre la mesa. Si todo lo que estamos haciendo sigue sin dar solución, en los próximos meses habrá que intervenir. Pero tendría que ser una acción no sólo limitada a Kosovo. Sino que abarcaría otras zonas de la República Federativa de Yugoslavia entrando incluso a través de Bosnia y de Hungría. El presidente de Hungría es un líder joven e inteligente, me dijo que el éxito será imposible si no ocurre lo siguiente: Milosevic fuera del poder, Kosovo partido y revisión de la política en Bosnia‑Herzegovina con separación de las entidades; República Serbia unida a Serbia, parte Croata a Croacia y parte musulmana independiente. No estoy de acuerdo con este planteamiento. Pero creo que la idea está ganando terreno en los países de la zona. Es muy difícil que los serbios y los albaneses puedan volver a vivir juntos de nuevo. Debemos seguir haciendo lo que estamos haciendo; pero llevamos ya muchos años en Bosnia y no sabemos cuándo podremos salir de allí. Tal vez los albaneses acepten la fórmula de una confederación pero será imposible si se mantiene Milosevic.
“Si no hay garantía de una cierta presencia serbia en las zonas que simbolizan el nacimiento de su civilización, no lo aceptarán.
Surgirá el irredentismo sobre el ‘territorio a liberar’.
“Lo primero es ganar la guerra, y luego veremos.”
[...]
Le pido al señor Aznar que diga si es o no cierto que aconsejó al presidente Clinton el 13 de abril de 1999 bombardear la radio y la televisión serbias.
Fidel Castro Ruz
29 de septiembre del 2007
8:36 p.m.