Estudiantes y jóvenes trabajadores que reeditaron el paso de la Caravana de la Libertad por esta ciudad en 1959 evocaron la unidad popular forjada por Fidel en torno a los ideales de la Revolución como el legado más alto a defender por las nuevas generaciones de cubanos.
 
Al pronunciar las palabras centrales de un acto político-cultural en áreas donde estuviera el antiguo Regimiento Militar de Holguín y actualmente se ubica la comunidad Oscar Lucero Moya, Nayla Leyva Rodríguez, primera secretaria de la UJC en esta provincia, afirmó que como fuerza vital, al lado de esa misma Revolución se encuentran hoy millones de hombres y mujeres que son fieles a la máxima martiana de permanecer del lado del deber.
 
Proveniente del poblado de Cacocum, donde la delegación granmense cedió banderas a los jóvenes holguineros, la Caravana realizó su primer alto en el referido sitio, escenario de la rendición de los militares batistianos y del rencuentro de Fidel con las tropas del IV Frente en el llano, Simón Bolívar, al mando del Comandante Delio Gómez Ochoa.
 
La concentración popular fue propicia para la entrega del carné de la UJC a 25 jóvenes, y de la Medalla Conmemorativa Aniversario 60 de las FAR, a 38 combatientes de la lucha clandestina, el Ejército Rebelde, las FAR y el Minint, y a trabajadores de distintos sectores.
 
Por su parte, Adolfo Begdali, combatiente del Ejército Rebelde y testigo de aquel acontecimiento, ponderó que los continuadores de quienes llegaron en aquella Caravana poseen una preparación profesional, política e ideológica superior, como fruto de las enseñanzas del líder de la Revolución y la vigencia de los principios que enarboló.
 
Durante su estancia en la ciudad de Holguín, los 58 caravanistas holguineros visitaron otros emblemáticos sitios históricos y sostuvieron un diálogo de generaciones en la sede provincial de la Asociación Hermanos Saíz. Este miércoles, en el municipio de Majibacoa, los tuneros los relevarán.