La grandeza de Fidel
تاريخ:
مصدر:
المؤلف:
Si alguna cualidad distinguió siempre a Fidel, fue que nunca logró pasar desapercibido ante nadie, ni amigos ni enemigos. Personalidades tan distintas como Richard Nixon y Alicia Alonso, Frei Betto o John F. Kennedy, por solo citar algunos ejemplos, admiraron sus cualidades y virtudes, más allá de cualquier diferencia o posición política.
Ellos, y cientos de personalidades del deporte, la cultura, la política o la religión, supieron distinguir la grandeza que había en él, sus méritos humanistas y solidarios, además del valor personal que siempre lo caracterizó, que le permitieron, durante más de 50 años, enfrentar con éxito al imperio más grande que ha existido sobra la tierra.
Y todo eso lo pudo hacer porque como dijo Abdelaziz Bouteflika, presidente de Argelia, “Fidel viaja al futuro, regresa y lo explica” o debido a que “es un hombre que pone su vida en función de la utopía, es un hombre que jamás en esta vida encontrará su plenitud porque Fidel cree que es posible el cielo en la tierra”, como expresó el teólogo brasileño Frei Betto.
Un viejo amigo nombrado Antonio del Conde (El Cuate), quien mucho lo ayudó en México durante los preparativos de la expedición del Granma, dijo de él: “Cuando sigue usted a una persona, como seguí yo a Fidel, deposita toda su confianza en él. Siempre he dicho que él convence hasta las piedras. Yo soy un poco piedra, pero él me convenció fácilmente.
¿Qué vi en él? A una persona exageradamente honrada, con una memoria que los elefantes envidiarían, alguien que cada día crece más y más. Nada en mi vida hubiera tenido importancia si desde que lo vi, no hubiera creído en él.
¿Por qué? No lo puedo explicar”.
Otro que caló muy pronto las virtudes del líder del Moncada, de quien se hizo amigo inseparable, fue Diego Armando Maradona, quien luego de conocerlo expresó: “Me pareció mentira tener un cacho de historia tan cerca. Es un seductor y usa todo para envolverte. Dicen que él arrancó con doce hombres y tres fusiles en la Sierra Maestra y ahora me doy cuenta porqué ganó: tiene una convicción de hierro. Fidel Castro es una personalidad imposible de olvidar. Es una historia viviente. Yo defiendo mi fútbol como Fidel defiende a su pueblo”.
También el desaparecido Alfredo Guevara, compañero de aulas de Fidel, quedó asombrado por la personalidad de Fidel desde el instante mismo en que lo conoció: “la generación de que soy parte buscaba sin cesar al Profeta, aquel que, de entre nosotros, tendría que asumir la adarga recorriendo caminos y montañas. Lo supimos más tarde, se llamaba Fidel, Fidel se llama”.
Y al referirse a su resistencia ante el imperio yanqui, Alice Walter, escritora afroamericana y feminista, reconoció: “No han podido matarlo y eso les ha molestado. No han podido matar a ese hombre que ha persistido en ser quien es, durante años, frente al país más poderoso de la tierra. Es algo asombroso. Es una secova, viejo árbol gigante, que mientras otros han sido segados, él sigue en pie y están desesperados para hacer el corte final. Y entonces no tendremos a nadie como él. Tendremos a otras personas maravillosas, y nosotros mismos seremos los que tengamos que ser, pero él es una inspiración”.
Alicia Alonso, una admiradora excepcional de la sensibilidad artística de Fidel, nunca pudo esconder la impresión que él le causaba: “Quizás Fidel no se haya percatado pero, cada vez que me encuentro frente a él, he sentido que tengo que pararme para poder defenderlo ante cualquier cosa que le quieran hacer. Cada vez que me encuentro con Fidel me pongo nerviosa.
“De las numerosas personalidades mundiales que he conocido es él quien ha dejado en mí una mayor huella por su sencillez, por su carácter humano. Una lo mira y no deja de pensar: Este hombre ha hecho esto. Este hombre está luchando desde hace tanto tiempo. Es algo que va creciendo, creciendo que termina por apabullarlo a uno. Después uno se convierte en parte de todo ese mundo y ya goza de la naturalidad de ese ser humano. Lo siente. Se convierte en parte de él.
“Él no es local. Él es parte de la historia. No solo de nuestra historia, sino de la historia de la humanidad. Pienso que es tan grande que se convierte en una puertecita, en una cosa sencilla. Si sintiera lo grande que es, lo mataría el peso”.
Igualmente, el extraordinario actor Jack Nicholson, dejó su impronta acerca del líder cubano: “He hablado con Fidel Castro de todo, de la vida, de la cultura. Fidel es un genio, un humanista, y pienso que nunca quiso romper con nosotros (Estados Unidos). Los cubanos son muy abiertos y no tienen ninguna hostilidad contra el pueblo norteamericano”.
Dos ex presidentes de los Estados Unidos, John F. Kennedy y Richard Nixon, a pesar de sus diferencias con el estadista cubano, supieron mostrar respeto por sus ideas. Kennedy, por ejemplo, dijo de él: “Fidel Castro forma parte del legado de Bolívar. Debíamos haber dado al fogoso y joven rebelde una más calurosa bienvenida en su hora de triunfo. En tanto Nixon aseguró: “Debemos estar seguros de un hecho: Fidel Castro posee esas cualidades indefinibles que le permiten ser un líder de hombres. Independientemente de lo que pensamos de él, será un factor clave en el desarrollo de Cuba. Tiene la potestad del liderazgo”.
Pero nadie como Raúl Castro, su hermano y continuador de la obra al frente de la Revolución iniciada por él, para definir la grandeza de Fidel: “La autoridad que tiene Fidel por ser quien es, por haber hecho lo que ha hecho, una Revolución de verdad y profunda, con sus virtudes y sus defectos, no la tendrá nadie otra vez en Cuba”.