Si una certeza dejó la primera jornada de la visita gubernamental a esta provincia, tras el recorrido del miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, por varios de sus municipios, es que la batalla que libramos –en medio de no pocas dificultades– es complicada, pero tenemos que organizarnos mejor, buscar soluciones entre todos, estar convencidos de que sí se pueden hacer muchas cosas y que los dirigentes tienen que estar en el centro de los problemas de la población.
 
Esa fue la idea recurrente en los intercambios que sostuvo el Jefe de Gobierno con los integrantes de los consejos de la administración municipal de Baracoa y de Maisí, con quienes evaluó el cumplimiento de la estrategia de desarrollo local, así como en los recorridos por centros de producción y en los encuentros con los pobladores.
 
Insistió en la urgencia de hacer coincidir los proyectos de desarrollo local con la solución de problemas acuciantes de la población.
 
Llamó a identificar las potencialidades que tiene el municipio y, de estas, cuáles sirven para trabajar y resolver esos problemas. «Mientras las mipymes anden por un lado, los trabajadores por cuenta propia por otro, los proyectos de desarrollo local por otro, y los principales problemas del municipio por otro, estaremos en el camino equivocado», subrayó.
 
Tal concepto fue compartido con las autoridades de Baracoa, municipio en el que estuvo acompañado por los ministros del Turismo y de la Construcción, Juan Carlos García Granda y René Mesa Villafaña, respectivamente; por el presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Antonio Rodríguez Rodríguez; y por el primer secretario del Partido en la provincia de Guantánamo, Rafael Pérez Fernández.
 
Marrero Cruz se interesó por las iniciativas destinadas a la transportación pública, la alimentación del pueblo, el alojamiento y otras vinculadas al desarrollo sociocultural de las comunidades. Indagó acerca del impacto de las micro, pequeñas y medianas empresas, las cuales ascienden a 20 en el municipio, con tres destinadas a la construcción.
 
Inquirió por la producción endógena de materiales de la construcción, el incremento de las áreas destinadas al cultivo del cacao, principal rubro exportable del municipio de Baracoa, la calidad de la alimentación en las unidades del Sistema de Atención a la Familia, así como por la atención a las más de 5 200 personas en situación de vulnerabilidad y los barrios en transformación.
 
Se analizó en profundidad la vivienda, en un municipio en el que el 53 % del fondo habitacional clasifica como regular o mal, y el programa de los subsidios es el que menos avanza. El otorgamiento de las capacidades de círculos y la urgencia de aumentar las casitas infantiles fue otro de los tópicos abordados.
 
HAY POTENCIALIDADES
 
Evaluó desde el hotel Porto Santo el programa turístico en la Villa Primada de Cuba y el estado de las instalaciones de campismo, próximo a la etapa veraniega. Entre los factores que inciden en este aspecto, según señalaron las autoridades, está la situación que presenta el vial Baracoa-Moa, pues en el año no se han podido ejecutar los kilómetros planificados.
 
El turismo tiene que desempeñar un papel fundamental de cara al verano, con ofertas gastronómicas y culturales para la población. Con las riquezas naturales del municipio, existen potencialidades para desarrollar un turismo inclusivo, significó el Jefe de Gobierno.
 
El programa incluyó un intercambio en la Empresa Agroforestal y Coco Baracoa, que se dedica a producir, acopiar, beneficiar y comercializar productos agropecuarios y sus derivados. Aquí se ubica el polo exportador del territorio, con unos 36 rubros identificados, aunque el carbón y el cacao son los productos que se han podido exportar.
 
Marrero Cruz compartió con trabajadores y vecinos de la circunscripción 7 sobre retos y expectativas, en medio de la compleja situación económica del país. Les aseguró que «estamos conscientes de las dificultades que todavía nos quedan por vencer, pero existen posibilidades de continuar haciendo cosas para mejorar las condiciones de vida de la población».
 
En el caso específico de Baracoa, dijo que el territorio «tiene que hacer todo lo posible para sostenerse, pues aquí hay potencialidades para generar ingresos».
 
Los jóvenes hablaron de continuidad y voluntad de hacer, «a pesar de necesidades y carencias, pues tenemos toda la disposición y el compromiso de nuestra generación, los jóvenes vamos a seguir con el pie en el estribo». Los de más experiencia aludieron a un pueblo «aguerrido, que sabe crecerse, sabe luchar y está dispuesto a resolver todos los problemas que tenemos».
 
El recorrido incluyó la fábrica de chocolate Rubén Suárez, que fue objeto de una remodelación tecnológica, en la cual se chequearon sus potencialidades y el destino de sus producciones.
 
EN MAISÍ
 
El Jefe de Gobierno recorrió la desalinizadora que en el municipio de Maisí beneficia a más de mil pobladores. Se interesó por la intensa sequía que afecta al territorio y llamó a «tener mucho control de las pipas de agua que se destinan a la población».
 
Dialogó con hombres y mujeres «buenos, aguerridos y revolucionarios». De ellos escuchó sus insatisfacciones con los altos ciclos en la distribución de agua por pipas, los precios abusivos y especulativos, la entrega de tierras ociosas y la insuficiente oferta de productos agrícolas.
 
«La Revolución, a partir de las posibilidades reales y en los momentos más complejos, no ha dejado desamparado a nadie», les aseguró a los pobladores, y les recordó que el objetivo de estas visitas, entre otros, es «evitar que se mezclen aquellos problemas más complejos con otros, cuya solución sí depende de nosotros mismos, de cosas que sí pudiéramos hacer. No estarán solos, seguiremos viniendo aquí, de conjunto con las autoridades del territorio, a buscar alternativas», señaló Marrero Cruz.
 
CON CAPACIDADES PROPIAS
 
Un buen ejemplo de cómo aprovechar capacidades endógenas para encauzar soluciones encontró Marrero Cruz en La Bonita, finca integral que fomenta la producción de huevos a partir de gallinas rústicas y codornices.
 
Ubicada en la comunidad de Arroyo Hondo, del municipio cabecera, La Bonita pertenece a la Empresa Avícola Guantánamo, y su producción de huevos, en lo fundamental, se destina al consumo de los habitantes de Arroyo Hondo. También impulsa la cría de avestruces, búfalos y ganado ovino-caprino.
 
Se trata de un esfuerzo «rociado» con ciencia y técnica. Las cabras en esta finca se crían en entarimados, método novedoso para el ahora prometedor entorno agropecuario, golpeado por la sequía y la salinidad en las últimas décadas.  
 
El proyecto de La Bonita, en el polo productivo Arroyo Hondo-Paraguay, tiene proyectada una minindustria que persigue producir quesos y yogur de leche de búfalo.
 
Es otro buen paso de un municipio que, a contrapelo de bloqueo económico, la crisis mundial y las adversidades climatológicas, gestiona el bienestar de sus ciudadanos, a partir de sus capacidades propias, y busca ejercer la autonomía que nuestra Constitución le concede. Marrero Cruz elogió esa iniciativa, y se interesó por las posibilidades de replicarla en otros sitios del territorio.
 
EL NUEVO ROSTRO DE CECILIA
 
Otro ejemplo que mereció su felicitación, lo constató en la comunidad de Cecilia, a unos cinco kilómetros al noreste de la ciudad de Guantánamo. El batey transforma su paisaje residencial y social, con cambios graduales, y nada fortuitos.
 
Cecilia se renueva y se expande, y a la par de la restauración levanta nuevas moradas. Una faena no detenida parece anunciar que el cero casas con piso de tierra se ve más claro y cercano aquí.
 
Iniciativa del gobierno municipal de Guantánamo, el movimiento constructivo aquí –supo Marrero Cruz– responde a otro proyecto de desarrollo local en marcha en la cabecera de la provincia, y busca producir materiales para mejorar viviendas en mal estado, y de construir otras nuevas.
 
PROGRAMAS DECISIVOS
 
El vice primer ministro de la República y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, en el contexto de la visita gubernamental que se inició en Santiago de Cuba, recorrió varios centros de importancia social y económica.
 
En la casita infantil Abdala, del Hospital Clínico-Quirúrgico Dr. Juan Bruno Zayas, se interesó por la atención a los pequeños y por el funcionamiento general de la institución. A ella asisten 60 niños, atendidos en dos salones: uno de segundo año y otro mixto, que acoge a los de tercero, cuarto y quinto años de vida.
 
Gil Fernández constató en el mercado agropecuario estatal La Santiaguera el comportamiento de los precios, del enrutamiento de las producciones agrícolas y su calidad. Verificó el trabajo que realizan los comités de contratación, y la ficha de costo de las mercancías, además de la variedad de las ofertas.
 
Asimismo, el vice primer ministro Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez visitó las centrales termoeléctrica Antonio Maceo –Renté–y la flotante turca, fundamentales en la generación de electricidad en la zona oriental.