«A Cuba la vemos como un ejemplo a seguir; como un hermano de la misma ideología», afirmó este lunes el secretario general del Comité Central del Partido Popular Revolucionario Lao y presidente de la República, Thongloun Sisoulith, en las conversaciones sostenidas con el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
 
En el contexto de la visita oficial que realiza a este país asiático, el Jefe de Gobierno cubano anunció un donativo de medio millón de dosis de vacunas contra la COVID-19, que contribuirá con la inmunización del pueblo laosiano.
 
En el encuentro, que corroboró el buen estado de los vínculos entre las dos naciones, Marrero Cruz también le trasladó «un saludo fraternal» del General de Ejército Raúl Castro Ruz, y del Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
 
«Nos sentimos como en casa», subrayó el Primer Ministro, al tiempo que agradeció el apoyo invariable de Laos en la lucha contra el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba por el Gobierno estadounidense.
 
Desde el establecimiento de relaciones diplomáticas, el 4 de noviembre de 1974, los nexos entre ambos países han sido amistosos y de estrecha colaboración, significó Marrero Cruz, por lo que ratificó la voluntad de continuar consolidando esos lazos y de seguir, muy de cerca, todos los acuerdos que emanen de la visita oficial.
 
Poco antes del inicio de las conversaciones, la comitiva caribeña había iniciado su segunda jornada en Laos con la colocación de una ofrenda floral en el Monumento al Soldado Desconocido.
 
Los titulares de Salud Pública y Comercio Exterior e Inversión Extranjera, funcionarios de la Cancillería, y los máximos representantes del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación, BioCubaFarma y la Zona Especial de Desarrollo Mariel, también integraron la delegación que rindió honores.
  
POTENCIAR LAS RELACIONES HISTÓRICAS ENTRE CUBA Y LAOS
 
Ubicada muy próxima al monumento, la sede de la Asamblea Nacional Lao fue la segunda escala del programa oficial de este lunes. Su presidente, Xaysomphone Phomvihane, recibió al Primer Ministro a la entrada de la institución.
 
Cuba, subrayó Marrero Cruz, concede una alta prioridad a los históricos lazos de hermandad entre ambos países, basados en la solidaridad permanente. De igual modo, ratificó el interés de impulsar los vínculos económicos bilaterales y ampliar la cooperación en las esferas de la salud, el deporte, la educación, la industria farmacéutica, la biotecnología y la agricultura, entre otros.
 
En el diálogo también se mencionó la intensa actividad legislativa en la cual está inmersa la Asamblea Nacional del Poder Popular; se habló de Fidel, referente obligado de cuanto nos distingue, y se ofreció una actualización de la situación económica que afronta la Mayor de las Antillas.
 
Por su parte, el presidente del parlamento Lao, Xaysomphone Phomvihane, dijo que su país valora en alto grado la solidaridad y el sentido revolucionario de Cuba, y reconoció la unidad entre los dos pueblos, desde los días de lucha por la liberación nacional hasta hoy.
 
«Reafirmamos la voluntad de proteger y potenciar las históricas relaciones entre los partidos y gobiernos, y reiteramos que siempre vamos a apoyar a Cuba», aseveró Xaysomphone Phomvihane.
 
POR LA RUTA DEL INTERCAMBIO COMERCIAL
 
Teniendo en cuenta que el fortalecimiento de los vínculos económicos es uno de los objetivos de la visita oficial a Laos, el Primer Ministro recorrió la compañía agrícola Phanphet, dedicada a la producción de arroz y otros productos.
 
Del intercambio trascendió la posibilidad de establecer varios proyectos de negocios, en especial uno referido al asesoramiento del personal cubano por parte de técnicos de la empresa, para producir arroz en la Isla.
 
La Zona de Desarrollo Saysetta fue otro de los objetivos visitados. Se trata de un proyecto cooperativo a nivel estatal, iniciado conjuntamente por los Gobiernos de China y Lao, y es considerado uno de los proyectos exitosos de la iniciativa de la Franja y la Ruta.
 
¡VIVA CUBA!
 
Con un ¡Viva Cuba! genuino, dicho en perfecto español, los estudiantes de la escuela Secundaria y Preuniversitaria Amistad Laos-Cuba, recibieron, al filo de la tarde, a la delegación cubana que hasta allí llegó. Una fila larga de niños y niñas con banderas de los dos países en las manos les dio la bienvenida.
 
El centro docente, según se conoció, se fundó en 1975, y hasta la fecha ha sufrido varias transformaciones; sin embargo, su nombre es mucho más reciente y rinde tributo a la entrañable amistad entre Laos y Cuba. Y de esos vínculos fraternales también emergieron, en Dongbang, varios símbolos.
 
Es una aldea humilde donde se yergue la escuela, con más de 800 estudiantes, y allí está ubicado el único busto de José Martí que existe en el país laosiano.
 
Una ofrenda floral en homenaje al Apóstol colocaron el Primer Ministro y la delegación que lo acompaña y, seguidamente, plantaron un árbol cuyo nombre, dicen los lugareños, significa «madera dura», como han de mantenerse los nexos entre ambas naciones.
 
El Jefe de Gobierno visitó las aulas y exhortó a los estudiantes a conocer a Martí; más que un nombre, ese sería el verdadero homenaje a Cuba.
 
«A los trabajadores, profesores y estudiantes de la escuela Amistad Laos-Cuba: Estoy impresionado por tanto cariño y ver cómo más de 800 estudiantes y sus maestros rinden tributo a la amistad con Cuba y José Martí. Continuaremos apoyándolos y ofreciendo becas como gesto de solidaridad. ¡Vivan Laos y Cuba!», escribió Marrero Cruz en el libro de visitantes. Y una vez más pintó su versión de El Maestro, custodiado por una palma real.